Blog marxista destinado a la lucha por una nueva sociedad fraterna y solidaria, sin ningún tipo de opresión social o nacional. Integrante del Colectivo Avanzar por la Unidad del Pueblo de Argentina.
viernes, noviembre 29, 2013
Acuerdo con REPSOL: Capitulación a la Corona
El acuerdo con Repsol reafirma el giro derechista del gobierno con concesiones al imperialismo y acercamiento a los “mercados”. La Repsol retirará la demanda iniciada en el CIADI, el tribunal imperialista que dictó sentencias contra Argentina favoreciendo a los fondos buitres. Así, se habilita el endeudamiento a gran escala de YPF trabado por esa demanda. La petrolera estatal sólo había conseguido hacer colocaciones menores de deuda en EE.UU. para hacer inversiones. Además, facilita los negocios de Chevron. Es que, según trascendidos, las cláusulas secretas del acuerdo con la petrolera norteamericana implicaban mecanismos para remitir ganancias evitando embargos frente a las amenazas de la Repsol. Ahora las vías del saqueo se despejan. Cerrar los conflictos en el CIADI abre la posibilidad de ampliar el endeudamiento con el Banco Mundial, organismo con el que se acaba de pactar un préstamo de 3 mil millones de dólares. La tarea de acercar posiciones con los organismos multilaterales de crédito la había iniciado Hernán Lorenzino, ex ministro de Economía. Ahora tiene a su cargo una “unidad” especial para negociar con el Club de París la regularización de una deuda odiosa, iniciada por la dictadura de la “Revolución Fusiladora” y profundizada por el gobierno de la Alianza.
También tiene la misión de acercarse al FMI, algo ya encaminado con el acuerdo sobre un nuevo índice de precios.
Los escribas K están remodelando el relato. Lo que hasta hace poco era “”sumisión a las recetas del FMI””, ahora lo llaman endeudamiento “heterodoxo o “productivo”. La idea de atraer inversiones extranjeras subordinándolas a los fines del desarrollo nacional ya fracasó en los ´60 con Frondizi. El resultado es el opuesto: mayor sumisión al capital imperialista y pagos de deuda cada vez más pesados. El final es anunciado: ajuste.
Soberanía de las petroleras imperialistas
Hace un año y medio, Julio De Vido y Axel Kicillof denunciaban: “la estrategia de depredación, desinversión y desabastecimiento del mercado interno que desplegó el grupo Repsol desde que tomó el control de YPF en 1999” (Informe Mosconi). Para aquel entonces, el actual ministro de Economía decía que YPF en manos de Repsol “era una vaca lechera a la que iban a ordeñar hasta la muerte” para “girar dividendos al exterior”. En otra ocasión se envalentonó con Antonio Brufau, presidente de Repsol denunciando al virreinato del Río de La Plata.
Como es previsible en toda negociación, Repsol empezó reclamando mucho más de lo que esperaba cobrar: pidió 9300 millones de dólares en el CIADI.
Decir que no iban a pagar un peso de indemnización fue parte de la teatralización K para alimentar el relato. La misma amenaza hizo Cristina a los buitres para después abrirles el grifo con la reapertura del canje. Los 5 mil millones que se llevará Repsol, “”líquidos”” (como habría exigido Brufau), es un gran negocio. Y se suman a los más de 15 mil millones de ganancias que se llevó estando al frente de YPF. Como con la reapertura del canje, la mayoría de la oposición patronal celebró el acuerdo. Pero en esta ocasión el kirchnerismo amplió los apoyos. Hasta la Asociación Empresaria Argentina liderada por Clarín festejó. La Repsol que saqueó los recursos, vació la empresa y con la complicidad de los K condujo a la “crisis energética” se lleva un gran premio. Los términos secretos del acuerdo aún pueden traer más regalos para la petrolera.
El terreno quedó allanado para que, además de Chevron y Dow Chemical que ya firmaran alianzas con YPF, Vaca Muerta sea transformada en un banquete para la americana Exxon, la mexicana Pemex (accionista de Repsol y activo impulsor del reciente acuerdo) y otras multinacionales que esperan ansiosas ingresar al negocio de los combustibles no convencionales sin las trabas que interponía Repsol.
Las petroleras auguran negocios extraordinarios. No es para menos. El aumento autorizado en los combustibles corona mayores ganancias. En el camino, dejó al desnudo el engaño del“control de precios”de Jorge Capitanich. Una vez más, el Mercado de Valores celebró con aumentos en las acciones de YPF. Las compañías eléctricas también están en alza en la bolsa. Tendrían bajo el brazo la promesa de aumentos de tarifas.
Para acabar con este saqueo hay que expropiar íntegramente a las petroleras sin indemnización para conformar una empresa estatal única bajo gestión de los trabajadores.
Pablo Anino
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario