URUGUAY : LOS ASESINADOS DE LA 20.

Ni se olvidan ni se recuerdan premiando a sus verdugos

Compañeros y amigos familiares de los ocho asesinados que aún conservan con valentía y honestidad el respeto a los caídos en la Seccional 20 del Partido Comunista.
Esta vez como cada año y como lo hacemos a diario rendimos homenaje a los mejores militantes de la patria que ofrendaron su vida generosamente.
El recuerdo y su sacrificio no puede ser únicamente parte del culto de los héroes.
Sobre las calles, veredas y las azoteas del Paso Molino los muertos convocan nuevamente a revisar la historia proletaria de decenas de años de lucha obrera y estudiantil.
Y nos comprometen a continuar la lucha por la verdad y la justicia, de un país que avance junto al proyecto liberador y socialista de la Cuba de Fidel, y la Venezuela de Chávez.
Nos exigen a gritos no un Uruguay neoliberal y burgués sino la construcción de la nueva sociedad por la que cayeron cumpliendo órdenes de muchos de los mismos dirigentes que hoy tienen todo el poder para emprender las tareas por las que ellos cayeron.
Un proyecto de país reconquistado por el pueblo de la democracia y la libertad, sin presos políticos, ni cárceles para los hijos de los trabajadores. Un Uruguay que avance y rompa la dependencia con el imperialismo yanqui, el dominio de la oligarquía, el predominio de los financistas, de las multinacionales, de los empresarios que lucran mientras los trabajadores ven rebajarse sus salarios cada día, y suben los precios.
Mientras continúan emigrando miles de compatriotas y otros continúan desempleados.
Hoy no es un día de recordación y peregrinaje hoy es un día de compromiso de lucha renovado.
Hace 35 años atrás los nombres de Mendiola, Sena, Cervelli, Gancio, Fernández, Abreu, González y López entraron en la historia del Uruguay mezclándose con los héroes que cayeron a lo largo de la lucha de clases del país, como Brum, Grauert, que cayeron luchando contra la dictadura de Terra, de Hugo, Liber Arce, Susana Pintos, Ibero Gutierrez, Recalde, que murieron luchando contra el pachecato, de los más de seiscientos mártires de la dictadura uruguaya, de Morroni y Facal que fueron asesinados por la policía impunemente durante el Gobierno de Lacalle.
En aquella época de los asesinatos de la 20ª, miles de compatriotas fueron presos y torturados, hasta los niños eran arrancados de los brazos de sus madres y vendidos o entregados a familiares de militares y policías como un trofeo más de guerra.
De aquella tragedia quedaron varios sobrevivientes primero Machado que salvó de un balazo en la cabeza y que estaba junto a los que asesinaron allí en una operación preparada y premeditada por las Fuerzas conjuntas y por el Escuadrón de la Muerte.
El mismo que tres días antes había asaltado la sede Central del Partido Comunista, del Partido Demócrata Cristiano, y del 26 de Marzo.
El Escuadrón de la muerte que había salido a matar y asesinar a mansalva el 14 de abril en varios locales del MLN.
Allí en el local de la 20 estaban también Fernández Ferreira y Rodríguez se salvaron ocultos en la azotea porque no los pudieron encontrar.
Allí estaba organizando los asesinatos Campos Hermidas, y el Goyo Alvarez en el ESMACO al que dirigía.
Cuentan que después los militares rompieron las paredes, y echaron el local abajo, no querían aquella casa que los acusaba directamente.
Durante la larga sesión de toda la noche los legisladores comunistas leyeron la autopsia de los asesinados. De por sí el relato mostraba la magnitud del crimen y la calidad de los asesinos.
De un crimen que el ESCUADRON había comenzado el 14 de abril en la calle Amazonas con los asesinatos de Ivette y Luis Martirena, y de los compañeros Candán Grajales, Horacio Carlos Rovira, Gabriel Schroeder Orozco, y Armando Hugo Blanco Katrás en la calle Pérez Gomar, y murieran resistiendo en la calle Nicolás Gropp y Norma Carmen Pagilano.
Siete autopsias se manejaron en aquella noche de abril del 72 porque la de Cervelli no se practicó ya que fue enterrado sin certificado de defunción.
Ricardo González un solo balazo en la nuca desde atrás y desde la izquierda ligeramente descendiente. La bala quedó en el cráneo. Muerte instantánea por lesión nerviosa.
Ruben López baleado en la nuca, con lesiones nerviosas mortales. Caído en el suelo boca abajo, recibe otro balazo de la cabeza a los pies desde unos dos metros con bala que entró por el costado derecho de la cabeza y salió por la base del cuello del lado izquierdo. Muerte instantánea.
José Abreu primera herida de tórax que lesionó pulmón y provocó hemorragia interna. Segunda herida hecha desde arriba. No se sabe si está de pie o caído en el suelo, con disparo desde la cabeza a los pies, lesionó pulmón y médula espinal. No murió instantáneamente.
Elman Fernández herido de bala en muslo derecho que no lesionó huesos ni grandes vasos, y herida en la cabeza de adelante hacia atrás que provocó muerte instantánea por lesión del encéfalo.
Raúl Gancio una sola bala en el abdomen, de adelante hacia atrás y hacia la izquierda, prácticamente horizontal, por debajo del ombligo, que provocó caída al suelo por lesión nerviosa. Murió por hemorragia interna, por desangramiento, luego de estar tirado en la calle aproximadamente una hora.
Luis Mendiola Seis balazos, dos heridas de otra naturaleza. Muerte instantánea por bala en la cara que lesionó el cerebro y salió por la nuca.
Justo Sena Tres balazos horizontales en el cuerpo. Tiene otro balazo en el muslo. No muere instantáneamente sino por hemorragia, tirado en la calle por más de una hora.
Aquella acción del Escuadrón se había preparado la misma noche del 14 de abril en la sede Central del Partido Comunista.
Llegaron disfrazados, ingresaron disparando, separaron a un número grande de compañeros y los pusieron contra la pared como para fusilarlos, no pudieron hacerlo por que en ese momento había unas ochocientas personas en el local. Una de las personas llamó al Parlamento donde estaba funcionando la Asamblea General.
Inmediatamente los legisladores comunistas junto a Gutiérrez Ruiz que estaban en el Parlamento, se dirigieron a la Casa del Partido.
Vimos la gente tendida, las carteras de las mujeres robadas, y muchos hombres con brazaletes disfrazados los mismos que después llevarían a cabo la operación de la 20.
Solamente aquel verdadero y auténtico Frente Amplio no votó en la Asamblea General, no votaría el Estado de Guerra Interno, las Fuerzas Armadas, la Oligarquía y el imperialismo querían preparar fríamente el Golpe de Estado.
Estaban asesinando y matando a sangre fría porque conducían al país hacia la dictadura fascista, y los hacían sistemáticamente, planificadamente paso a paso sobre la sangre de nuestros hermanos y sobre la muerte de nuestros compatriotas.
El ESCUADRON de la muerte primero y el golpe militar después fue parte de la ofensiva general del imperialismo norteamericano que apoyándose en las oligarquías financieras y terratenientes junto a militares fascistas en el sur de la América Latina, trataban de revertir el proceso liberador, nacionalista y socialista revolucionario que sacudía América Latina.
El fascismo se instalaría definitivamente en el país, después del 27 de junio todas las instituciones violentadas, las libertades desaparecidas gobernaron por el terror, la llamada guerra interna, proscribieron, torturaron, desaparecieron, allanaron, asaltaron, robaron, y entregaron a la banca internacional y el FMI la riqueza del país, la corrupción se extendió hasta los militares.
Pasado treinta y cinco años, el Frente Amplio en el poder, es la caricatura de aquella izquierda la que cohabita en el homenaje a los mártires y repara económicamente a los familiares de los verdugos.
Desde la imparcialidad que da el poder el pragmatismo de los progresistas, no identifica en su ceguera ancianidad entre las víctimas y los esbirros emparejando las muertes a cambio de muy poco.
El gobierno progresista llega a una apertura liberal tal que ni los propios partidos de la oligarquía que votaron aquellas leyes de Guerra Interna y Medidas Prontas de Seguridad se hubieran atrevido a insinuar siquiera.
Remunerar a los familiares del ESCUADRÓN de la muerte, y al jefe del ESMACO el Goyo Alvarez.
Militares y civiles gratificados por torturar, asesinar, desaparecer, robar niños, dar un golpe de Estado, mentir y no decir donde están los desaparecidos.
Militares y civiles remunerados con ciento cincuenta mil dólares cada uno por haber violado la constitución, aplicar el terrorismo de Estado, atentar contra los derechos humanos, robado, y haber servido de brazo armado de la oligarquía y el imperialismo norteamericano.

LOS MARTIRES DE LA VEINTE CAYERON COMO LOS DEL CATORCE DE ABRIL, EN MANOS DEL ESCUADRON DE LA MUERTE.
UN ESCUADRON DE LA MUERTE QUE NO ERA OTRA COSA QUE LAS PROPIAS FUERZAS CONJUNTAS.
POR ESO CUANDO SE GOLPEÓ A ALGUNOS DE SUS MIEMBROS LA REACCIÓN FUE DE TODO ÉL EJERCITO, DE TODA LA POLICÍA Y TODA LA OLIGARQUÍA NACIONAL.

17 de abril del 2007

MENSAJE DE LA 36