El Congreso Nacional del PCF se celebró del 11 al 14 de diciembre, en el contexto de la gran crisis capitalista. La recesión mundial tendrá consecuencias desastrosas para centenares de millones de personas. En Francia, cientos de miles de empleos están amenazados en el corto plazo. Cada semana trae su cuota de cierres de empresas y deslocalizaciones. El desempleo, la pobreza extrema, la inseguridad: todos los tumores de peor capitalismo se agravan. En todos los países, las clases dominantes tratan de colocar la carga de la crisis sobre los hombros de los trabajadores. Educación, salud, pensiones, vivienda y servicios públicos son atacados. En respuesta, los jóvenes y los trabajadores se movilizan. En Grecia e Italia, el profundo descontento ha surgido a una escala masiva. Otros países europeos seguirán este camino. Todas las condiciones para una explosión de la lucha de clases están dadas. La ola revolucionaria que barre la región de América Latina cruzan las fronteras y los océanos.
En este contexto nacional e internacional extremadamente interesantes y explosivos, la mayoría de los debates del Congreso del PCF debieron haber abordado la crisis del capitalismo y las perspectivas en las esferas económica, política y social derivadas de ello, y también el programa y la estrategia con los que el partido debe armarse para movilizar a los trabajadores contra el sistema. Sin embargo, este debate ha pasado a un segundo plano. Por el contrario, hemos sido testigos de una multitud de discursos sobre temas tan abstractos como la "profunda transformación o metamorfosis del partido" Contra el telón de fondo de este "debate", se presentó otra cuestión mucho más mundana: ¿qué número tendrá la lista alternativa de Marie-Pierre Vieu, es decir los partidarios de la "metamorfosis", en la elección del Consejo Nacional?
Uno se ve impresionado por el abismo existente entre las bases del partido y los debates celebrados durante el congreso, es decir, entre la base y los dirigentes del partido, que han impuesto esos ejes. En cuanto a la cuestión del futuro del PCF, por ejemplo, la gran mayoría de los activistas del partido ya ha respondido muy claramente en varias ocasiones: es preciso mantener y fortalecer el partido. Muchos activistas también exigieron un retorno a las ideas básicas del comunismo, es decir, al marxismo. Desde esta perspectiva, la diferencia entre el Congreso y la Asamblea Extraordinaria de diciembre de 2007 salta a la vista. La razón es simple: en la Asamblea en 2007, la proporción de activistas de las bases del partido era mucho mayor que durante el actual Congreso. Por lo tanto, el creciente divorcio entre la base y la dirigencia del partido es el más obvio en el 34º Congreso del PCF.
El documento de orientación
El documento de orientación aprobado por el Congreso no ofrece un análisis serio de la crisis del capitalismo. Del mismo modo, los elementos de programa contenidos en el documento son de un reformismo insípido.
Miles de enmiendas se han aprobado en las conferencias regionales con el fin de imprimirle al texto un contenido más revolucionario - más comunista. Pero en la práctica, los mecanismos existentes le proporcionaron a la dirección saliente un gran margen de maniobra para modificar o eliminar las enmiendas que no les convienen. Pasadas por la picadora de las "comisiones del documento", a nivel federal y nacional, las enmiendas desaparecen, ya no se incluyen en el texto más que ecos lejanos sin sustancia. Por ejemplo, muchas secciones habían solicitado que la consigna de las nacionalizaciones encontrara un lugar central en el programa del partido. Innumerables "comisiones de documento" más tarde, el documento final aboga por "nuevos tipos de nacionalizaciones". ¿Qué significa esto? ¿Cuáles son las características de estos "nuevos tipos" de nacionalizaciones? El texto no se toma la molestia de explicar. La dirigencia del partido ni siquiera se plantea la cuestión, sin embargo. Su objetivo era sólo hacer de la consigna de "nacionalización" algo irreconocible, incomprensible. Y así fue hecho.
Otro ejemplo: podemos celebrar el hecho de que Cuba finalmente fuera mencionada en el texto final. Sin embargo, esta enmienda no hace ningún análisis y no obliga al partido a nada. Lo mismo ocurre en muchos otros temas cubiertos por las enmiendas de las secciones. La suerte corrida por las enmiendas es, de nuevo, un claro ejemplo de la brecha que se ha ampliado en los últimos años, entre la base y la dirigencia del partido.
La "profundas transformaciones" del PCF
Muchos camaradas dicen estar tranquilos en un punto: el texto del congreso está a favor de mantener el partido y rechaza la idea de una "nueva fuerza política", en lugar del PCF. Pero la verdad es que no hay nada resuelto sobre este tema. Ya que el texto se pronuncia también por "cambios profundos en el PCF", sin decir exactamente cuáles. Como explicó Pierre Laurent, desde la tribuna del Congreso, el texto encarga a la nueva dirección la tarea de definir las "profundas transformaciones" – y de iniciarlas. Nada más se ha decidido en el Congreso. Pero la nueva dirección es, con unos pocos cambios, la misma que la anterior, que se ha embarcado en la aventura de crear ¨colectivos anti-liberales", entre otras cosas.
Nosotros estamos, también, por "profundas transformaciones" en el partido. Estamos a favor de profundas transformaciones de lo que constituye la base del Partido: sus ideas y su programa. De hecho, estas ideas y este programa reformistas son la principal causa del debilitamiento del PCF durante el último período. Nuestro texto alternativo, ¨Renforcer le PCF, renouer avec le marxisme¨, desarrolla nuestros puntos de vista sobre este asunto y ha sentado las piedras angulares de un verdadero programa comunista. Pero eso es, precisamente, una transformación que la dirección del partido se niega a encarar.
Marie-Pierre Vieu y la dialéctica
En el ámbito de las ideas y del programa, no hay ninguna diferencia grave entre la lista alternativa presentada por Marie-Pierre Vieu y la lista preparada por el saliente Consejo Nacional. Sean los partidarios de la "metamorfosis" o de "transformación profunda" del partido, estos amigos comparten las mismas ideas reformistas. El debate sobre la transformación del PCF fue en gran medida, un pretexto político en la lucha para ganar el máximo de bancas en la dirección del partido.
Así, Marie-Pierre Vieu levanta muy alto, en teoría, hasta a la "dialéctica". Para aquellos que no saben todavía, la camarada Vieu es un formidable ¨dialecticienne¨. Tomemos, por ejemplo, la idea de "metamorfosis" del PCF. Esta fórmula se ha eliminado del documento de orientación. Qué insulto a las leyes de la dialéctica! Porque todo en este mundo sufre cambios y está en constante evolución, dice la hermana Vieu. Mejor aún, todo lo que vive, muere. Es inevitable. Esta es la dialéctica. Por lo tanto, el PCF - como el sistema solar y las mariposas - también debe desaparecer!
Esta obra maestra del razonamiento dialéctico ha dejado algunas preguntas sin respuesta. ¿En qué preciso momento el PCF debería desaparecer? ¿Y quién debería decidir ese momento: Marie-Pierre Vieu o los militantes comunistas? Además, el PCF fue fundado en 1920 para trabajar por el derrocamiento del capitalismo francés. Sin embargo, esta tarea - más urgente que nunca - todavía no se ha completado, que nosotros sepamos. Por lo tanto, si no le molesta demasiado a Marie-Pierre Vieu, a los activistas del partido nos gustaría que el PCF cumpliera con su tarea histórica antes de considerar su desaparición en el gran agujero negro donde la dialéctica arroja todo - las mariposas, el del sistema solar y los partidos comunistas!
Las otras dos listas alternativas
Además de la liderada por Marie-Pierre Vieu, otras dos listas alternativas se han presentado en el congreso. Una, dirigida por André Gerin, fue la que resentó el texto alternativo ¨Faire vivre et renforcer le PCF, une exigence de notre temps¨. No vamos a repetir aquí nuestra crítica de este texto, en particular las ideas nacionalistas de André Gerin (véanse artículos anteriores).
Otra lista estuvo encabezada por Nicolas Marchand, que es uno de los llamados - por razones que se nos escapan - ¨economistas¨ del PCF (con Dimicoli, Boccara, Cailloux, etc.). Una vez más, no hay ninguna diferencia fundamental entre las ideas de los "economistas" y el documento de orientación. En la presentación de su lista, Marchand dijo que a través de las enmiendas, el documento de orientación adoptado en el Congreso - con sus "nuevos tipos de nacionalización" , etc. - es "claro" y "coherente". Incluso, dice que se dio "un paso importante" a partir de este texto. Por lo tanto, la lista de Marchand tenía sólo un significado: ganar más escaños en el Consejo Nacional, ¿se propone para el liderazgo del partido? Nicolas Marchand ya lo ha reconocido explícitamente. Sin embargo, como ya hemos explicado, las medidas fiscales que forman el programa Marchand, Dimicoli y Boccara no constituyen una alternativa a las ideas reformistas de la actual gestión.
La misma política, la misma dirección
La votación de las secciones sobre la "base común", los días 29 y 30 de octubre, expresó la insatisfacción creciente en las bases del partido, en contra de la dirección saliente y sus políticas. Casi el 40% de los votantes optó por uno de los dos textos alternativos. Un cotizante cada dos no se molestó en votar. Y entre el 60% de los votantes que eligieron la orientación del Consejo Nacional, muchos de ellos no esconden su disgusto. A pesar de ello, el Congreso no ha registrado ningún cambio significativo - ya sea en la composición de la dirección, ni en la política que se propone aplicar. Los dirigentes y las ideas que condujeron el partido de derrota en derrota, en el pasado, son nuevamente puestos a la cabeza del partido.
En las semanas anteriores al Congreso, los más ardientes partidarios de la liquidación del PCF - Zarka, Martelli, etc. - han denunciado a los activistas comunistas del mundo entero que son víctimas de una "purga". Toda la prensa capitalista se apresuró a difundir este hecho lamentable. Sin embargo, gracias al peso de estos elementos y su complicidad en los planos nacional y federal, mostraron que tenían una base sólida entre los delegados del Congreso, y encontraron refugio en la lista alternativa encabezada por Marie-Pierre Vieu. En consecuencia, conservan más o menos todos sus asientos, en el Consejo Nacional.
El 16% de los votos obtenidos por la lista de alternativas Marie-Pierre Vieu es una ilustración matemática de la brecha entre la base y la dirección del partido. Porque si estos dirigentes hubieran presentado un texto alternativo a votación de los militantes, es dolorosamente evidente que no hubieran superado el 5%, a pesar de su considerable peso en el aparato de partido. Perfectamente conscientes de ello, es que se contentan con escribir contribuciones para protestar contra la "base común" y en contra de la legitimidad del propio Congreso, evitando al mismo tiempo, presentar sus ideas ante el voto de los militantes. Sin embargo, una vez inscritos, sentados en el interior del Congreso, inmunes a los votos de las secciones, encontraron un poco de coraje político, mucho de la ambición personal - y a su inquebrantable amiga Sylvia Zappi, una periodista de Le Monde, que nunca economiza sus esfuerzos para cantar su gloria y engañar a sus lectores.
Otro ejemplo del mismo fenómeno es la diferencia entre los puntajes obtenidos por el texto alternativo de André Gerin (24%), en las secciones, y el puntaje de su lista alternativa a la del Congreso (10%).
Por último, ninguno de los cuatro candidatos para el Consejo Nacional que han firmado nuestro texto alternativo - ¨Renforcer le PCF, renouer avec le marxisme¨ - ha sido seleccionado para la dirección del partido. Si bien nuestro texto ha recogido el 15% de la votación en las secciones, la dirección se ha negado a concedernos ningún tipo de representación. En el debate sobre los cargos, el domingo por la mañana, dos de nuestros compañeros tomaron la palabra para denunciar esta violación flagrante de la democracia más elemental. La dirección ni siquiera se tomó la molestia de responder, aunque se habían pasado la mañana defendiendo la idea de que el Consejo Nacinal debe reflejar la diversidad política "que existe dentro del partido¨.
Como hemos explicado en la víspera del Congreso, no hemos escrito ¨Renforcer le PCF, renouer avec le marxisme¨ con el objetivo de ganar bancas en el Consejo Nacional. Queríamos, sobre todo, defender nuestras ideas y nuestro programa marxista. Pero también creemos que el 15% de los votos recogidos por nuestro texto, es evidente que hay que merecen designar candidatos al Consejo Nacional, para defender nuestra posición y nuestras propuestas. Al negarnos toda representación la dirección del partido confirma ante los ojos de todos su hostilidad a las ideas y el programa del marxismo.
¡Volver a ideas básicas del comunismo!
El rechazo de nuestros cuatro principales candidatos por parte de la dirección del partido tiene por objeto desanimar a los miles de comunistas que votaron a favor de nuestro texto. Haremos todo lo posible para que esto no ocurra. Sería muy malo sacar conclusiones pesimistas de los resultados del Congreso. Para nuestros esfuerzos por revivir las ideas básicas del comunismo han sido un muy importante primer éxito la consulta interna. Y nada va a impedir el progreso de estas ideas en los meses y años venideros. Como dijo Lenin, "el marxismo es todopoderoso, porque es la verdad¨. Las crisis del capitalismo es una confirmación de la teoría y de las perspectivas del marxismo. En todas partes, los jóvenes y los trabajadores están movilizándose. Ellos están buscando una respuesta a la crisis. El "reformismo anti-liberal" que defiende la dirección del PCF no es la respuesta.
Una importante conclusión práctica que debe extraerse de este Congreso es la necesidad de seguir ampliando y coordinando nuestros esfuerzos para rectificar el rumbo del partido. La Riposte llama a todos los activistas comunistas que se reconocen en sus ideas a continuar su compromiso activo en el partido. Debemos defender las ideas del marxismo, explicando de manera paciente y fraternal en las discusiones de secciones y células. El partido necesita nuestra energía y nuestro entusiasmo. Gracias a un debate constructivo entre los comunistas será posible convencer a una mayoría de los compañeros para desarrollar la inserción social del PCF. De esta manera podemos poner al partido en posición para cumplir su tarea histórica: el derrocamiento del capitalismo y la transformación socialista de la sociedad.
Jerome Metellus (PCF París, delegado al Congreso y miembro de La Riposte)
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