Justo este ocho de mayo se cumplirán tres décadas de uno de los actos terroristas más repudiables y dramáticos de la historia de Cuba: el incendio dirigido por manos enemigas contra el Círculo Infantil Le Van Than, del municipio capitalino de Marianao, el más grande de su tipo con 10 pisos y capacidad para 570 niños.
Vívido aún en la memoria de los cubanos esta aquel día de mayo de 1980, cuando a las cuatro y 45 de la tarde comenzó el fuego de grandes proporciones que puso en movimiento no solo a los bomberos, sino también a la policía, estudiantes de una secundaria aledaña, así como a vecinos y familiares de los pequeños.
Se recuerda la presencia --como siempre en el lugar de los hechos-- del Comandante en Jefe Fidel Castro, quien constantemente preguntaba sobre el estado de los pequeños en la medida que se producía la evacuación de los infantes.
Ante el monstruoso intento de quemar a niños vivos se levantó con indignación el pueblo. Sucedía así otro nuevo acontecimiento de terror por parte de los enemigos de la Revolución y la reafirmación de que, ante cada provocación, amenaza o agresión, estaría siempre alerta y en disposición combativa.
En aquel instante se pronunció de igual modo el Comité Cubano de Solidaridad con Vietnam, el cual dio a conocer la declaración en la que expresaba su más enérgico repudio al escalofriante incendio intencional del Círculo Infantil Le Van Than, que puso en peligro la vida de cientos de pequeños.
El hecho fue calificado de diabólico, y engendrado por la mente fría y macabra del imperialismo y la Agencia Central de Inteligencia (CIA).
Cuba entonces devino hervidero de indignación. La nación se organizó para una marcha el día 17, aún con el calor y la efervescencia del trascendental primero de mayo acaecido en toda la nación.
El tiempo, el implacable y más feroz, como dijera en una de sus canciones Silvio Rodríguez, no ha logrado que este suceso sea olvidado.
La nación cubana enfrenta hoy nuevas formas de agresión como la guerra mediática orquestada por la Casa Blanca y sus lacayos de la Unión Europea; sigue su incesante lucha por la liberación de los Cinco Héroes antiterroristas cubanos presos en Estados Unidos y porque se levante el bloqueo contra la Isla.
Las contínuas acciones terroristas contra Cuba, desarrolladas desde suelo norteamericano con la complacencia del gobierno de Washington, han ocasionado la muerte de tres mil 478 personas, incluidos niños, mujeres y ancianos, además de haber dejado saldo de dos mil 099 incapacitados.
Estas son las víctimas de la guerra sucia y mantenida por más de cinco décadas.
Estos crímenes terroristas contra Cuba comenzaron meses después del triunfo de la Revolución, el primero de enero de 1959, y sus autores gozaron de impunidad en territorio estadounidense para fraguar, organizar y ejecutar sus planes, y aún hoy desandan por sus calles con la mayor libertad después de cometer sus atroces actos.
Idania Rodríguez Echevarria
Servicio Especial de la AIN
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