Bolivia: paro de la COB

El paro general convocado por un ampliado de la Central Obrera Boliviana para este martes 4 de mayo, reclamando un aumento del salario, es justo y surgió de una presión directa de las bases. Trabajadores fabriles, maestros y policías ya han iniciado planes de lucha por un aumento salarial no menor del 12,5%. Más de 40 trabajadores fabriles están en huelga de hambre desde el pasado martes en demanda de un aumento salarial de 12 por ciento, en tanto que los maestros de las escuelas estatales pararon el viernes en rechazo al cinco por ciento ofrecido por el Ejecutivo. La Policía Boliviana también ha salido a rechazar el aumento salarial del 3 por ciento que resolvió el gobierno para ellos. Plantean un incremento salarial del 25 por ciento, dijo Víctor Laura, presidente de la Asociación Nacional de Suboficiales, Sargentos, Clases y Policías (Anssclapol), y anunciaron movilizaciones junto a sus esposas e hijos, bloqueos y piquetes de huelga de hambre en distintas ciudades del país. Igualmente hubo manifestaciones en ese sentido de suboficiales y sargentos del ejército y fuerza aérea.
El gobierno rechaza esta petición de aumento salarial con el mismo argumento de los gobiernos neoliberales del pasado. Dice que un aumento mayor del 5% “causaría inflación” y que ese aumento es “suficiente porque la inflación fue del 0,36%”.
¡Mentiras! Igual que gobiernos neoliberales del pasado tratan de engañarnos con estadísticas falsas. En primer lugar, la inflación real de los últimos 5 años en los productos de primera necesidad superó a los aumentos salariales que dio el gobierno. El vicepresidente Alvaro García Linera dice que el salario fue aumentado por el gobierno en el 45% desde el 2005. El salario mínimo era de 440 bolivianos en el 2005 y ahora llegaría a 679,50 bolivianos con el 5%. Pero los precios de productos de primera necesidad aumentaron en mayor proporción al 80 ó 100% en muchos casos, como el pan por ejemplo que antes entregaban 4 panes por un boliviano y ahora solo 2 panes. ¡100% de aumento! Entonces el salario real (es decir lo que realmente se puede comprar con el salario, medido en panes, pollo, carne, frutas, etc, lejos de aumentar, bajó. ¡Esto lo sabe cualquier trabajador y no nos pueden engañar con falsas estadísticas!
Y esto ocurrió cuando, según lo dice el propio gobierno, en los últimos años hubo un gran aumento del PBI (la producción total en bienes y servicios del país). ¡Mientras los trabajadores ganan menos, los empresarios nacionales y transnacionales están ganando más! ¡Es el gobierno quien tendría obligación de intervenir en la economía para que un aumento del salario real salga de las ganancias patronales y no vaya a nueva inflación!
Un aumento del salario real de los trabajadores asalariados beneficiaría también al amplio sector de gremiales, campesinos que producen alimentos para el mercado interno y otros trabajadores informales.
La conducción de la COB, encabezada por Pedro Montes, venía apoyando incondicionalmente al gobierno y, por eso, fue la acción de los sindicatos en lucha lo que impuso el ampliado y el paro general. La COB anunció un nuevo ampliado para el miércoles para evaluar los resultados del paro y evaluar medidas escalonadas con nuevos paros generales. Esto es necesario, y para eso convocar asambleas de base en todos los sindicatos y votar un programa y un pliego de reclamos inmediatos que unifique la lucha junto a otros sectores de trabajadores, incluyendo también a la base de la policía y suboficiales militares, así como los reclamos formulados por la Mesa 18 en la Cumbre de los Pueblos por la expulsión de las transnacionales, contra los megaproyectos hidroeléctricos y por la liquidación del latifundio, de la CONOMAQ y sectores campesino e indígenas contra la nueva ley de tierras que quiere imponer el gobierno que apunta a liquidar las Tierras Comunitarias de Origen, los reclamos de los comunarios contra la contaminación de la mina San Cristóbal, los reclamos de las juntas vecinales de El Alto por creación de puestos de trabajo, un hospital de tercer nivel en El Alto, aumento del presupuesto para la UPEA (Universidad de El Alto), restitución inmediata de la tierra a los trabajadores campesinos del Movimiento Sin Tierra desalojados brutamente ilegalmente con amenaza armada en la localidad de San Ignacio de Velazco, Santa Cruz; apoyo a campesinos y vecinos de Caranavi en su lucha por la instalación de planta de cítricos, etc.
Como lo vienen haciendo ante cada reclamo popular, sectores de la dirección del MAS y del gobierno vienen propagando el rumor de que toda esta protesta “está organizada por la derecha” para “desestabilizar el proceso”. Compañero trabajador: ¡no crea esa mentira! La derecha, los patrones no quieren ningún aumento salarial, menos aun quiere liquidar el latifundio o expulsar a las transnacionales. Ellos que intentaron derrocar a Evo o dividir Bolivia en el 2008 ahora se metieron al MAS y se asocian con el gobierno para aumentar sus ganancias a costas de los trabajadores y dicen que por reclamar salarios somos “derechistas”. Los trabajadores ya derrocamos y no apoyaremos a los viejos partidos neoliberales que entregaron nuestras riquezas e impusieron el decreto 21060. ¡Y no aceptamos la calumnia de que nuestra lucha “apoya a la derecha”! Lamentablemente, es el gobierno, el que se junta con derechistas contra el pueblo trabajador.
Estos son los reclamos de los trabajadores y oprimidos de la ciudad y del campo, de los indígenas, exigidos desde la guerra del agua del 2000 y la guerra del gas del 2003. El pueblo le dio su voto masivo al MAS y los dos tercios en la Asamblea Plurinacional para que cumpla este programa. Pero el gobierno del MAS prefiera aliarse a los empresarios, las transnacionales y la derecha, en lugar de escuchar el reclamo popular.
Los trabajadores tenemos que unirnos en esta lucha. También los hermanos que confían en Evo Morales y que creen que está engañado o rodeado de derechistas y que si le pedimos escuchará. Reclamemos juntos entonces con el paro general, para que escuche a los trabajadores y no a los derechistas, en la petición salarial y otras que son totalmente justas.
¡Viva el paro de la COB! ¡Todos al paro y movilizaciones convocadas por los sindicatos! ¡Por un plan de lucha nacional que unifique los reclamos de todos los trabajadores de la ciudad y el campo! Por un aumento general de salarios del 12,5% y aumentos no menores discutidos con cada sindicato.