La repercusión ha sido manifiesta en el rubro de restaurantes, uno de los sectores con peores salarios y condiciones laborales, así como menos sindicalizado. “La falta crónica de personal ha creado un entorno de trabajo caótico, horarios impredecibles y dificultad para tomar días de enfermedad” (rsn.org, 11/12). Durante la pandemia, los trabajadores enfrentaron recortes salariales, expusieron su salud y su vida a los contagios masivos sin ningún tipo de compensación, mientras Starbucks engrosaba sus cuentas y sus ganancias.
Según la revista Forbes, entre enero y septiembre de este año Starbucks declaró ganancias por 20.900 millones de dólares, superando los 17.300 millones de dólares del mismo período del año pasado. Mientras tanto, sus trabajadores reciben 14 dólares por hora.
Tendencia nacional
La elección de los trabajadores de Starbucks empalma con una tendencia nacional de huelgas y acciones sindicales. En Kellog’s los operarios continúan la huelga contra la estratificación de los trabajadores en categorías, para bajar los salarios. En un almacén de Amazon ubicado en Bessemer, Alabama, los trabajadores derrotaron el fraude de la patronal y obligarán a un nuevo referéndum por su sindicalización, tras un fallo de la Junta Nacional de Relaciones Laborales. Al mismo tiempo 3.000 estudiantes-trabajadores de la Universidad de Columbia han estado en huelga durante seis semanas para exigir mejores salarios y atención médica y en los últimos días 100 trabajadores de planta se sumaron a los piquetes que llevan adelante en la entrada de la sede universitaria. A esto podemos agregar la reciente derrota del clan Hoffa Jr. en los Camioneros (Teamsters), con masiva participación laboral, aunque capitalizada por un sector disidente de esa burocracia en coalición con una oposición centroizquierdista. Los trabajadores automotrices (UAW) ganaron un referendo por la elección directa de la cúpula sindical contra el método de elección indirecta impuesto hasta ahora. Vemos así por todo Estados Unidos luchas por abajo, rechazo y repudio a las burocracias oficiales y maniobras y cooptaciones para enchalecar la lucha de las masas, con la participación de la Secretaría de Trabajo de Biden, y choques y realineamientos al interior de la propia burocracia.
En Estados Unidos se registran tasas récord de huelgas. Los trabajadores de una manera u otra expresan un hastío ante los bajos salarios y las condiciones de trabajo.
Joaquín Antúnez
14/12/2021
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