Un alto cargo del Ministerio ruso de Defensa anunció los planes de crear una comisión especial para recontar las bajas que la Unión Soviética sufrió en la Segunda Guerra Mundial.
La comisión, declaró el general mayor Alexander Kirilin, estará integrada por representantes de varios departamentos y usará "una metodología universal", es decir, tomará en consideración "todas las cifras: cuánta gente fue enviada por comisarías militares y cuánta regresó, incluidos los prisioneros, los desertores, etcétera".
El objetivo no es cuestionar el número oficial de casi 26,6 millones de habitantes que la URSS perdió durante aquella guerra sino precisar las bajas del Ejército, puesto que diversos historiadores mencionan cifras diferentes al respecto, afirmó.
La cifra final de bajas en combate, anticipó, "será del orden de 8,8-8,9 millones de personas, incluidos 2,5 millones de prisioneros de guerra". Es el mismo número que una comisión del Estado Mayor General reportó en su día a Mijaíl Gorbachov, el último dirigente de la Unión Soviética.
Son bajas equiparables a las de la Alemania nazi, dijo al recordar que la Wehrmacht perdió alrededor de 5,2 millones de efectivos.
RIA NOVOSTI
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