La deuda no paró de crecer. Macri pagó U$S 76.000 millones. Una suma que representa lo mismo que construir cientos de hospitales y escuelas. El Gobierno honra la fraudulenta deuda. Se necesita una salida de otra clase.
La deuda otra vez vuelve a estar en el centro de la escena en Argentina. El endeudamiento creció exponencialmente con Mauricio Macri, con el aval del FMI y nuevamente la pelea de fondo es quién paga los costos de esta crisis.
Esta semana el FMI emitió un comunicado donde afirma que la deuda no es sostenible en la situación actual de las cuentas fiscales y externas del país y solicita que los acreedores privados acepten una quita. Se trata de los grandes fondos de inversión radicados en EE.UU., como Fidelity, Franklin Templeton, BlackRock y Pimco. Con esta definición el Fondo, que es corresponsable de la catástrofe, se pone primero en la fila para cobrar.
El comunicado del Fondo no implica que los privados acepten un recorte de sus bonos. Un banquero afirmó “si pretenden que pierda plata y lo acepte contento están locos. Por mí que se haga todo mierda y nos vamos a litigar a Nueva York”, según publicó Alejandro Bercovich en el diario Bae. Los buitres no tendrán inconveniente en apelar a otro juez de Estados Unidos como sucedió con Thomas Griesa en 2012 para asegurar su cobro y ganar millones. El Gobierno dio luz verde a los especuladores para jugar esta carta con la prórroga de jurisdicción en favor de tribunales judiciales de las potencias imperialistas.
La historia de terror de la deuda no es nueva. Desde la dictadura hasta 2019 se pagaron más de U$S 600.000 millones y la deuda no paró de aumentar. Así, antes de Videla era de U$S 8.000 millones y a fines del macrismo pasó a ser de U$S 324.000 millones, según publicó el Ministerio de Economía.
Una deuda manchada de sangre e ilegal. Un fallo del juez Jorge Ballestero en el año 2000 estableció 477 ilícitos en la constitución de la deuda durante la dictadura. Las irregularidades durante el macrismo, a pesar de las denuncias que hizo el peronismo cuando estaba en la oposición, no se investigarán. El Gobierno pretende pagar a libro cerrado una deuda fraudulenta.
¿A cuánto equivale la deuda que pagó Macri?
Mucho se habla del endeudamiento en la era Macri, pero también pagó millones de dólares, alrededor de U$S 76.000 millones.
Una suma sideral que es difícil de dimensionar a cuánto equivale. Veamos. Los U$S 76.000 millones pagados por el expresidente representa lo mismo que la construcción de 141.000 jardines de infantes; o 923 hospitales de 200 camas; o 2,1 millones de viviendas individuales de dos dormitorios. Una montaña de deuda que se fueron a los bolsillos de los especuladores.
El Gobierno ya definió que la prioridad central es pagar la deuda. Para ello decidió impulsar la ley de Solidaridad, que recortará 2,2 % del producto, congeló la movilidad previsional que actualizaba las jubilaciones, y la aplicación del impuesto País que recae sobre los sectores medios. También el oficialismo anunció una leve suba de la jubilación mínima, pero redujo los haberes de los adultos mayores superiores a $ 16.200.
La historia se repite. La deuda se paga a costa de ajustar a los trabajadores y los sectores populares. El FMI, aunque Fernández quiere mostrarlo como un amigo, no tardará en exigir sus recetas para recortar el gasto y asegurarse cobrar, también jugarán los especuladores que quieren recibir su parte.
La crisis no tiene que recaer sobre las mayorías populares. Hay que rechazar el acuerdo con el Fondo y desconocer la deuda odiosa, junto a otras medidas de emergencia como el monopolio estatal del comercio exterior, la nacionalización de los bancos y la creación de una banca estatal única.
La Izquierda Diario
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