miércoles, octubre 16, 2019

Día Mundial de la Alimentación: el hambre en pleno siglo XXI, un crimen capitalista



El 16 de octubre es el Día Mundial de la Alimentación, promovido por Naciones Unidas, pero cada día mueren 18.000 niños y niñas de hambre en el mundo.

Cada 16 de octubre desde 1979 se conmemora el Día Mundial de la Alimentación. Una "celebración" promovida por la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO). Según la página oficial del organismo internacional, el objetivo es disminuir el hambre en el mundo, propósito que también busca la Agenda 2030 con su meta de hambre cero.
Pero detrás de estas aparentes buenas intenciones, la realidad irrumpe en forma brutal: cada día mueren 24.000 personas de hambre en el mundo, 18.000 de ellas son niños y niñas de entre uno y cuatro años.

Índices de pobreza alarmantes

En pleno Siglo XXI más 1.300 millones de personas en el mundo son pobres. Los datos publicados por la ONU muestran que el 46 % de estas personas lo son de manera "severa", es decir, sufren carencias en al menos la mitad de las dimensiones que cubre el índice.
El cinismo de la ONU y los organismos internacionales
Son quienes dan a conocer informes o estudios con las terribles cifras de pobreza, hambre y desigualdad a las que son sometidas millones de personas en el mundo, pero no dejan de defender las falsas virtudes que capitalismo tiene para ofrecer.
Además los países que sostienen a estos organismos multilaterales son los que mantienen un sistema de explotación que genera semejantes consecuencias. Los países con mayores índices de hambre y pobreza están subordinados económica o políticamente a ellos.

Argentina: el hambre en un país que produce alimentos para 10 veces su población

En Argentina se producen alimentos para más de 440 millones de personas, pero el propio Indec reconoció que a poco más de un año de la vuelta del Fondo Monetario Internacional (FMI) al país, en el primer semestre del año la pobreza trepó un 8,1 % interanual. Así, la pobreza pasó de 27,3% en el 1er semestre de 2018 a 35,4% en 2019, marcando un triste récord en 17 años.
El Gobierno de Macri con su política de ajuste brutal y sistemática ha deteriorado de manera rápida las condiciones de vida de las amplias mayorías. A esto hay que agregarle que estos datos son de un relevamiento realizado antes de la última devaluación pos PASO, esa que dejo un dolar a $ 60 y que a Alberto Fernández le parece “razonable”. O sea, que en los próximos meses estos números van a ser más alarmantes.
A partir del 2007, el kirchnerismo al mando del Estado manipuló los datos de pobreza y en el 2013 el INDEC, que había sido intervenido, no publicó más datos oficiales al respecto. “Si hay hambre que no note” fue su lema y fue así que sus funcionarios llegaron al colmo de decir ridiculeces como que “en Argentina había menos pobres que en Alemania” o que en Chaco la desocupación era del 0 %. La propia Cristina Kirchner dijo en 2015 que la pobreza era del 4,7 %. Un número, como se demostró después, muy alejado de la realidad.
Según un infome de la UCA, la “pobreza multidimensional infantil” aumentó 4 puntos en un año: entre 2017 y 2018, 600.000 niñas y niños de entre 0 y 17 años pasaron a engrosar la estadística de quienes están por debajo de la línea de la pobreza. La indigencia, en tanto, subió un punto porcentual en un año, y pasó de 4,1% a 5,1%. De este modo, según el informe, en la actualidad hay 590.000 menores de 17 años que son indigentes.
La dimensión donde “se advierte un retroceso preocupante es en la alimentación”, asegura el informe. O sea: cada vez más pibes pasan hambre.
El 29,3% tiene un déficit en sus comidas y el 13% pasó hambre. Una de las manifestaciones de esta situación son los comedores escolares. Desde chicos y chicas que tienen como principal comida diario el almuerzo en la escuela, madres que cuentan que aún así sus hijos vuelven con hambre, así como el pésimo servicio que da el Estado y las empresas concesionarias.
El estudio muestra la evolución de la pobreza infantil entre los años 2010 y 2015, y se consideran en dicha situación todos los niños que viven en hogares con ingresos familiares por debajo de la línea de pobreza, es decir, que no alcanzan para adquirir la canasta básica de bienes y servicios.
Hace pocas semanas el Senado convirtió en ley la prórroga de la emergencia alimentaria. Esta medida intenta paliar una realidad en la que hay 14 millones de personas bajo la línea de pobreza y el 51% de los niños que están bajo esa franja (los datos son de un estudio producido por la Universidad Católica Argentina (UCA).
Es decir que en nuestro país son más los niños y niñas que tienen hambre que los que no.
Para esos números que hablan de millones de personas hundiéndose en la miseria, se destinarán tan sólo seis mil millones de pesos, que si bien es una medida paliativa, no resuelve los problemas de fondo.
Esto es lo que ofrecen el macrismo y la "oposición", migajas para la población más pobre, pero miles de millones para el FMI.
Alberto Fernández durante su gira por el Estado Español y Portugal ya manifestó la postura del Frente de Todos ante el ajuste que viene : las deudas hay que honrarlas.

Andrea Lopez
Martes 15 de octubre | 13:00

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