El 6 de noviembre, el gobierno mexicano canceló, sorpresivamente, la licitación del tren rápido México-Querétaro otorgada a la empresa china Railway Construction Corporation. Como varios medios de prensa develaron, el contrato incluía a tres constructoras mexicanas ligadas al PRI y a Enrique Peña Nieto.
Una de las empresas beneficiaras, Grupo Higa, se encargó además de la edificación de la mansión del presidente y su esposa en las Lomas, uno de los barrios más acaudalados de la ciudad. La ostentosa construcción y las licitaciones corruptas a empresas vinculadas al ejecutivo, exacerbó aún más la indignación que incendia al país por el asesinato y desaparición forzada de los normalistas de Ayotzinapa.
El despilfarro y la corrupción del poder
La casa blanca ubicada en Lomas de Chapultepec, es una edificación de 7 millones de dólares y está custodiada por el Estado Mayor Presidencial.
Si bien en declaraciones recientes la presidencia informó que la casa fue adquirida por la esposa del presidente, Angélica Rivera, el inmueble se encuentra a nombre de Ingeniería Inmobiliaria del Centro, una de las empresas de Grupo Higa.
La relación de EPN con grupo Higa data de cuando era gobernador del Estado de México y es una de las empresas más cercanas al ejecutivo.
Por ello, cuando la prensa nacional informó de la licitación para el tren rápido, EPN no tuvo alternativa que cancelarla, ya de por sí profundamente cuestionado por el movimiento democrático por la desaparición de los normalistas que en las movilizaciones grita al unísono ¡Fuera Peña!
Huida a China
Las declaraciones externadas por el procurador José Murillo Karam dando por muertos a los normalistas desaparecidos fueron desmentidas hace unos días por el Equipo Argentino de Antropología Forense.
La brutalidad, cinismo e insensibilidad con la cual la procuraduría presentó los resultados de la investigación atizó el descontento. Los padres y familiares de los normalistas se inconformaron aún más porque EPN, en medio de la crisis nacional, decidió ir a China a la cumbre de la APEC.
Cuestionado por el crimen contra los normalistas que el movimiento popular denuncia como un crimen de Estado, por las licitaciones corruptas con empresarios y grupos cercanos al poder y por haber abandonado el país, Peña Nieto pasa por el peor momento de su gobierno, mientras el movimiento democrático cada vez más exige su renuncia.
Jimena Vergara
México D.F., 12 de noviembre de 2014
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