lunes, febrero 15, 2016

La "unidad de la izquierda" para desviar la revolución



A 80 años, esta es la primera de una serie de notas sobre una de las más grandes revoluciones obreras y campesinas de la historia que, por la traición de las conducciones y la dictadura de Franco, fue derrotada con el saldo de un millón de muertos siendo la más sangrienta y larga de toda Europa.

ABRIL DE 1931: producto de la crisis mundial de los años ‘30, cae la monarquía de Alfonso XIII en medio de movilizaciones de masas y de un país atrasado con el 70% de la población de campesinos pobres. Se restaura la república, gobernada por una coalición, de republicanos burgueses y socialistas. La UGT (mayoritaria central obrera del PSOE), pone a su principal dirigente, Largo Caballero, al frente del Ministerio de Trabajo. Poco cambia con respecto a la anterior dictadura de Primo De Rivera. Las huelgas son ilegalizadas y reprimidas. Los campesinos esperan la reforma agraria. Las ilusiones de cambio chocan con la realidad. La vida seguía cara, las patronales no respetaban los convenios obreros y la tierra seguía en manos de la nobleza y la Iglesia. Un putch campesino dirigido por la CNT (anarquista) en Casas Viejas en 1933, es reprimido por el gobierno dejando un saldo de 20 fusilados. El gobierno republicano se desprestigia y pierde base social. La derecha se envalentona y con consignas demagógicas gana el gobierno en las elecciones de noviembre de 1933.

Triunfo de las derechas, resistencia proletaria.
El inicio del “bienio negro”

Meses después del triunfo del republicano derechista Lerroux, los profascistas clericales de Gil Robles, intentan tomar las calles, pero son barridos por los obreros socialistas, que responden con huelgas generales1 . El nombramiento de 3 ministros ultraderechistas provoca una reacción general, que se expresa en su punto máximo, en la insurrección de Asturias y en la huelga independentista de Cataluña. A pesar de su heroicismo, y de instaurar un gobierno obrero por 17 días, el aislamiento llevó a la derrota. Fueron fusilados 3.000 mineros por las tropas moras2. Pero la derrota de la temprana insurrección, no paralizó al proletariado. Siguieron las huelgas generales por la amnistía para los presos de Asturias y Cataluña. El gobierno de la derecha fracasa en contener el ascenso de las masas y comienza el capítulo del Frente Popular.

16 de febrero de 1936: triunfa el Frente Popular

Se conforma el Frente Popular, la mayor coalición obrera-burguesa de la historia de España3 , al servicio de engañar a las masas. Impulsado por el Partido Comunista, y con la ilusión de la vía electoral como camino hacia el gobierno obrero y popular, se mantenía a los representantes de la burguesía en el poder4 . El reclamo de amnistía a los presos de octubre del ‘34, lleva al POUM (Partido Obrero de Unificación Marxista) a ingresar al frente de colaboración con la burguesía y a que, los anarquistas, no proclamen su histórico boicot a las elecciones y dejen libertad de elegir a sus seguidores. Pero la clase obrera aprende, no confía en Azaña (primer ministro republicano) y Companys (presidente pequeñoburgués catalán), y comienzan a tomar la tarea en sus manos. Al otro día del triunfo, marchan a las cárceles, a liberar a los presos del “Octubre asturiano”. Al mismo tiempo se movilizan para reincorporar, en cada empresa del país, a los activistas despedidos por la misma huelga general del ‘34. Toman revancha contra la Iglesia (principal propietaria de tierras del país) obligando a marcharse a cada cura de cada pueblo, para abrir la puerta a la distribución de tierras y dar fin al oscurantismo religioso (y cómplice de la reacción) en las ciudades. Días después, cuando los republicanos mantienen la censura de la prensa (obrera), y comienzan a acercarse a los reaccionarios, empieza la primer huelga general en Madrid, llamada por la CNT anarquista, para dispersar una manifestación fascista, que exigía el “fin del caos”. Los obreros socialistas acompañan el paro, en contra de su dirección, que llama a apoyar a Azaña y a dejar en manos del gobierno la lucha contra la reacción. En mayo, comienza una lucha al interior del PSOE, para pedir la renuncia a la política proburguesa de Indalecio Prieto5 y de Largo Caballero. Reclaman romper los límites burgueses del programa del Frente Popular, y avanzar hacia un gobierno obrero. En junio, se desencadena la huelga general de los mineros de Asturias, exigiendo la renuncia de 2 ministros burgueses. También se concretan masivas tomas de tierras por los campesinos y huelgas generales en cada ciudad importante del país, por distintos motivos. Las masas obreras y campesinas desbordan al gobierno del Frente Popular. La burguesía española saca la conclusión que el desvío de la revolución, que comenzó 6 años antes, no resultaba eficaz por lo que convocó al ejército que dará el golpe de Estado del 18 de julio.

Sergio “Cucha” Folchieri
Trabajador de Volkswagen

Notas:

1. El triunfo de Hitler en Alemania, puso en guardia al proletariado europeo. El Partido Socialista Obrero Español (PSOE), con Largo Caballero y la juventud socialista, gira a la izquierda y un sector juvenil llama a los trotskistas, a dar la pelea por izquierdizar el partido y preparar la toma del poder. Lamentablemente, Andrés Nin (principal revolucionario trotskista español) les da la espalda, contradiciendo a León Trotsky y se une a los comunistas de derecha del Bloque obrero y campesino de Maurín, creando una organización no revolucionaria, centrista: el POUM.
2. Marroquíes de la colonia española. Su pedido de terminar con el colonialismo español, nunca fue oído por republicanos y socialistas. Terminaron siendo la tropa de choque de Franco.
3. Frente realizado entre los republicanos burgueses, el Partido Socialista, el Partido Comunista, y el POUM. 4. “Las Listas daban 152 diputados para los republicanos y 116 a las organizaciones obreras”, Félix Morrow, Guerra civil en España. Publicaciones Las Trece Rosas, p. 32. 5. Dirigente del sector centro del PSOE. Posterior Ministro de Guerra en el gobierno de Largo Caballero, en septiembre del 1936.

CLAVES

»Enero de 1930: cae la dictadura de Primo de Rivera y comienza el camino a la restauración de la República, gobernada por republicanos burgueses y socialistas
» Noviembre de 1933: gana la derecha, comienza el bienio negro, gobierno de derechas y resistencia obrera y popular, con la insurrección de Asturias y la huelga general catalana, en octubre del ‘34.
»Febrero de 1936: triunfa el Frente Popular y comienzan los aprestos burgueses para la guerra civil y una salida fascista a la revolución.

No hay comentarios.: