Ayer debatieron los cuatro candidatos a jefe de Gobierno de la ciudad. Larreta ocultó a Macri e impuso hablar de gestión y obras. Lammens lo siguió y decepcionó a los simpatizantes del Frente de Todos. Un deslucido Tombolini sólo aportó formalidad. Y Solano fue el único que se plantó y se convirtió en el verdadero opositor a Larreta.
Se realizó el primer debate obligatorio entre los candidatos a jefe de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Fue el cierre del ciclo #LaCiudadDebate organizado por el Tribunal Superior de Justicia y transmitido por el Canal de la Ciudad, donde pasaron los candidatos de las quince comunas y los candidatos a legisladores de la ciudad.
Con tiempos limitados por reloj, sin posibilidad de repreguntar y con un temario acotado a la gestión municipal, se limitó un verdadero debate que incluyera los principales problemas que preocupan. Hablar de ganadores o perderdores en un debate tan limitado es difícil, pero sí podemos hacer un resumen básico y sacar unas primeras conclusiones.
Horacio Rodríguez Larreta defendió su gestión, luego de 12 años de continuidad macrista, enumerando obras y gestión administrativa. Logró que los demás candidatos, a excepción de Solano, entren en ese juego y le permitió eludir las criticas con un simple “aun nos falta más”, mientras seguía enumerando más obras para su futuro Gobierno. No se pronunció sobre política, ni economía, y mucho menos de los problemas del país, que aunque no se nombre son problemas de la ciudad también. Incluso logró ocultar a su candidato a presidente, Mauricio Macri.
En este juego entro Matías Lammens del Frente de Todos, que llegó a reivindicar parte de las obras del gobierno macrista y se diferenció prometiendo aun más. Tan fue así, que envalentonó a Larreta que llegó a preguntarle: “Matías, ¿vos apoyarías la política que llevamos a cabo juntos en el Bajo Flores y otros barrios de la ciudad?”. Enunciando promesas de obras, redobladas por el mismo Larreta, le quitó personalidad llegando a decepcionar a propios y ajenos. Tan preparado e ensimismado se encontraba con las obras, que incluso no nombró a Alberto Fernández, ni a una de las principales consignas de los kirchneristas porteños, “Larreta es Macri”.
Por su parte, el deslucido Matías Tombolini, con una gran formalidad y elocuencia conquistada en su paso por la TV, se dedicó simplemente a presentar proyectos sin entrar en debate con ningún otro candidato. Ni siquiera al preguntar, llegó a confrontar. Su única apelación nacional fue la presentación de su candidato a presidente Roberto Lavagna.
Y por último, pero no por ello menos importante, Gabriel Solano del Frente de Izquierda-Unidad que se plantó.
Entró en el juego del debate, pero desplegó un programa ante cada tema, contraponiéndolos al relato macrista. Habló desde sectores en lucha de la ciudad, donde la izquierda está inserta e increpo en más de una oportunidad a Rodríguez Larreta en defensa de los trabajadores, quedando así como un verdadero opositor al macrismo. Sus preguntas fueron incisivas, llegando incluso a incomodar a Matías Lammens en más de una ocasión. E increpo a todos los candidatos planteando un tema de fondo: “Todos plantean pagar la deuda externa, todos plantean seguir con el FMI, el Frente de Izquierda no. Planteamos una ruptura con el FMI y una salida para los trabajadores”.
Acompañando a Solano en el estudio se encontraban otros referentes del Frente de Izquierda, como Myriam Bregman, Alejandrina Barry, Jorge Adaro y María del Carmen Verdu que lo acompañan en las listas porteñas, y Néstor Pitrola de la provincia de Bs. As., entre otros.
Como dije anteriormente el temario del debate estaba acotado a temas de gestión de la ciudad, omitiendo los temas más importantes del país hoy. Como la deuda externa, la pobreza, la desocupación y el trabajo, la defensa del medio ambiente o incluso el derecho al aborto o la violencia contra las mujeres y diversidades sexuales. Lamentablemente varios de estos temas estuvieron ausentes en las alocuciones de los candidatos, aunque nadie puede negar que sean parte de la realidad y las distintas fuerzas tienen sus posturas.
La modalidad del debate, partió de una presentación de cada candidato, pasando por exposiciones en cada uno de los cuatros temas y preguntas por sorteo entre candidatos, con un cierre por tema y un cierre al finalizar todo el debate.
Haremos un repaso por los puntos más picantes del debate en cada uno de los temas, que fueron: Autonomía, justicia y seguridad; Educación, salud, cultura y desarrollo humano; Vivienda, ambiente y desarrollo productivo; Infraestructura y gestión urbana.
Presentaciones
Los primeros en intervenir fueron Lammens y Tombolini, del Frente de Todos y Consenso Federal respectivamente, ambos optaron presentarse desde el punto de sus vidas privadas.
Mientras Rodríguez Larreta y Gabriel Solano, desde el comienzo dejaron marcada la orientación que le darían a todo el debate. El primero apelando al vecino y defendiendo la transformación de la ciudad lograda por las obras y advirtiendo desde el comienzo que presentaría propuestas de obras para los 48 barrios porteños. Mientras por su lado Solano, advirtió "Soy legislador del Frente de Izquierda desde 2017. Hemos sido opositores desde el primer día a este régimen de miseria que tiene la Argentina"
Autonomía, justicia y seguridad
Casi el tema excluyente en este punto fue la seguridad. Y Solano, por sorteo, fue el primero en exponer, arrancando a denunciar con fuerza a la “nueva” policía porteña "En 26 meses, la Policía de la Ciudad asesinó a 46 personas. Tenemos una policía corrompida, que regentea el delito. ¿Quién no sabe que detrás de los grandes delitos está la policía?” para luego aclarar “Nosotros nunca votamos la policía de la ciudad, como sí lo hizo el kirchnerismo"
Al finalizar, recibió su primer pregunta de parte de Larreta “gracias a las nuevas cámaras que pusimos con reconocimiento facial apresamos a muchos delincuentes. ¿no crees que es bueno para la seguridad de la gente?" Con esta pregunta Solano, lanzó su primera definición: "No comparto nada de lo que dice el Pro. Si se ponen estas cámaras, sumadas a las que ya están se van, vamos a ser el Gran Hermano. Ahora tenemos un hecho más grave, tenemos a Bullrich deteniendo a las personas por portación de cara. Esta es una política clasista”
Por su parte Lammens y Tombolini, se dedicaron a plantear que la inseguridad habia crecido y que no había estadísticas publicas para poder encarar el tema con seriedad, mientras que Larreta plasmó en números sus logros policíacos.
En un cruce de preguntas, Solano le disparó a Lammens, de “como podés defender las pistolas Taser, cuestionadas por la ONU como un elemento de tortura” el cual no dudo en contestar “Si la discusión es armas de fuego o Taser. Creo que la discusión es cómo se usan. El problema es el uso y formación de la policía” no dejando duda de que si está a favor de las Taser, a pesar de ser denunciada por todos los organismos de DD.HH. del país.
Educación, salud, cultura y desarrollo humano
En este punto el cruce era por un lado Larreta defendiendo los números de su gestión y los demás candidatos desmintiéndolos. Pero, en su critica, Solano incluyó un debate de contenido educativo “Forma parte de una política pedagógica. La secundaria del futuro la resisten todos los pibes, que la rebautizaron como ’sin futuro’, porque es una secundaria que da conocimientos elementales y manda a los pibes a laburar” y luego agregó la propuesta de anular la UNICABA, proyecto que pretende cerrar los 49 institutos de formación docente, enfrentados por los estudiantes terciarios.
Sin embargo, el cruce más atrayente, chicana incluida, se realizó entre Larreta y Lammens. Ante la pregunta con chicana de Larreta: “Matías, durante años trabajamos juntos en acción social en el bajo Flores y nunca me hiciste un comentario sobre la política social del gobierno. ¿Vos apoyarías la política que llevamos a cabo juntos en el Bajo Flores y otros barrios de la ciudad?” A lo que Lammens respondió “Nunca te hice ningún comentario, pero muchas veces me ofreciste ser candidato de tu lista y siempre te expliqué que no lo hacía porque tenía diferentes concepciones de la política”.
Otro cruce, pero con final feliz y coincidencia, fue cuando Solano le pregunto a Tombolini, si estaba de acuerdo con la separación de la iglesia y el estado y la educación laica, y la respuesta fue: si, estoy de acuerdo.
Este fue uno de los temas más incomodos para Larreta, donde recibió criticas que les fue difícil defender su gestión. La más incisiva, indudablemente fue la de Solano, cuando trajo el recuerdo de Cintia Choque, la trabajadora de transito precarizada atropellada en su trabajo y preguntó: “En la Ciudad hay 18 mil trabajadores del Estado precarizados. ¿Cómo el estado puede violar las leyes laborales?". Con cara de Joker, Larreta contestó "La Ciudad firmó el pacto fiscal en 2017. No podemos aumentar la planta", deslizando un punto central del ajuste nacional, el famoso pacto fiscal, que firmaron todos los gobernadores incluyendo los peronistas, contra los trabajadores. Mientras que el Frente de Izquierda, siempre esta en todas las luchas de los trabajadores.
Luego en el cierre del tema, y luego de las denuncias de los otros candidatos, Solano aclaró un tema en danza, la venta de tierras en la ciudad, diciendo "Acá se decía que el gobierno de Larreta vendió mucha tierra. Es cierto, más de 400 hectáreas. ¿Pero cómo fue, ya que por años no tenían mayoría en la legislatura? Porque fue con el apoyo del kirchnerismo. Sin los votos del kirchnerismo ni Macri ni, Larreta vendían esas tierras y podrían las mismas destinarse para viviendas populares y hacer bajar el costo de la tierra en la ciudad, abaratando los alquileres”.
Infraestructura y gestión urbana
En este punto un nuevo desliz de Lammens, o un sinceramiento, cuando expuso, “Hay algunas obras que se hicieron que están bien. El plan de inversiones de la Ciudad está bien y lo vamos a continuar. Pero en la decisión de qué obras de hacer tienen que ver con las prioridades”. Dándole pie a cuando Larreta tuvo que preguntarle, le incluyera al comienzo un "Me gusta tu comentario sobre continuar con las obras…"
Con esto Lammens siguió incomodo en el resto del tema, mientras sin duda o mejor dicho con más cancha televisiva Tombolini planteo si despeinarse el jopo “: "Es difícil criticar las obras de infraestructura de Macri y Larreta. También planteamos continuar. Pero hablemos de lo que no se ve, de la contaminación sonora y ambiental y de la diferencia entre el sur y el norte, que es inadmisible"
Ante el turno de cierre de Solano, cortó con tanta dulzura, al referirse tajantemente: “Nuestro diagnóstico sobre lo que hicieron en la ciudad es negativa. Está manejada por los grandes negocios inmobiliarios. El Gobierno de la ciudad es una inmobiliaria. Hoy la ciudad hay una política de exclusión del trabajadora las villas, a la calle o al gran Buenos Aires”.
Las intervenciones de cierre del debate se centraron en convocar al voto, cada uno con su slogan de campaña, una especie de spot de un minuto.
En el cierre Gabriel Solano, encaró desmitificando y aclarando: “Si querés que se vaya Larreta, la clave es que no llegue al cincuenta por ciento, y para eso podés votar a Lammens, Tombolini o a mi, da lo mismo desde el punto de vista matemática. Pero políticamente no da lo mismo. El Frente de Izquierda es el único que les da una salida política a los trabajadores. Planteamos una ruptura con el FMI y una salida a los trabajadores. Fortalezcamos a la izquierda en el congreso, en la legislatura y como fuerza política, a favor de los trabajadores, las mujeres y la juventud”.
Leandro Sorribas
@Leo_espartaco
Viernes 11 de octubre | 05:49
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