Heroico combatiente republicano español de 102 años, resistente antifascista y deportado en Buchenwald, es natural de Espejo (Córdoba)
“Nunca es tarde si la dicha es buena” reza un dicho muy conocido y que se aplica perfectamente en este caso. Virgilio Peña que se enroló como voluntario en el ejército republicano -en su pueblo Espejo (Córdoba-Andalucía)- en defensa de la legitimidad democrática amenazada por los generales golpistas Mola, Franco y Sanjurjo, recibe a sus 102 años un merecido homenaje en una tierra que no lo vio nacer y donde tuvo que a la fuerza exiliarse. Esa es la gran paradoja. De su propia patria fue expulsado, maldecido y condenado por rebelde por el único motivo de defender los derechos inalienables de la clase trabajadora, de los campesinos y los obreros españoles.
No solo fue un luchador de la guerra española -en las campañas de Andalucía, Teruel y el Ebro- sino que luego de la derrota, ya en el exilio francés, se unió a la resistencia contra el invasor Nazi.
En sus labores de sabotaje fue detenido por la policía colaboracionista del régimen de Vichy y en castigo por sus actividades subversivas, deportado al campo de exterminio Nazi de Buchenwald en Alemania.
Este obrero y campesino se mantiene fiel a los ideales del comunismo libertario y a pesar de su veteranía sigue con el puño en alto al pie de la trinchera como un digno ejemplo para las generaciones presentes y futuras.
A continuación queremos compartir con todos sus incondicionales la carta de invitación que nos ha remitido personalmente:
Jean-Yves Lalanne, alcalde de la localidad de Billère y Vice-presidente de la aglomeración Pau-Pirineos, tiene el honor de invitarlos a la sede de la alcaldía el 24 de junio de 2016 a las 17 horas con la ocasión de la entrega de las insignias de Caballero de la Orden Nacional de la Legión de Honor al señor Virgilio Peña Córdoba, combatiente español republicano y deportado al campo de exterminio de Buchenwald (número: 40.843) en presencia del general Yves Marinelli, representante del gobierno francés.
Virgilio Peña a sus 102 ve recompensado con este acto simbólico todo su sacrificio y su lucha en pos de la democracia, la libertad y la justicia de los pueblos.
¡Larga vida al miliciano Virgilio Peña!
¡Viva la República!
Carlos de Urabá | Mundo Obrero
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