El sindicalista es formalmente el presidente electo y asumirá el gobierno el 28 de julio. Frente a la amenaza de “estallido social” (hispantv, 18/7), la burguesía prefirió recular. Fujimori cambió su discurso y llamó a respetar la Constitución. Si bien el conteo de votos había llegado al 100% el martes 15 de junio, las autoridades electorales no lo proclamaron ganador porque Fujimori presentó 270 pedidos de cancelación de las elecciones.
Aunque el JNE ratificó como presidente electo a Pedro Castillo, y como su vicepresidenta electa a la economista Dina Boluarte, la candidatura del médico Vladimir Cerrón a la segunda vicepresidencia fue declarada improcedente, debido a que se encuentra sentenciado por delitos de corrupción (el comercio, 19/7). Cerrón, secretario general de Perú Libre, el partido de Castillo, es presentado por los medios como la eminencia gris, marxista-leninista, del nuevo presidente
En estos más de 40 días, desde la primera vuelta, los militares retirados denunciaron un fraude al servicio del “comunismo”; marcharon exhibiendo uniformes y sables en las calles. Se trata de ex oficiales que responden al alto mando militar en actividad. En EEUU, con Trump, en Francia, en Brasil, en Myanmar y en Bolivia, los militares han protagonizado intervenciones excepcionales, en regímenes democráticos, incluso golpes de estado y conatos golpistas, demostrativos de una seguidilla internacional de crisis políticas.
Se han sucedido plantones de seguidores de Fujimori en las afueras de las casas de los magistrados y del tribunal electoral (El País, 19/7). Desde junio, indica el diario español, “seguidores de Fujimori y un grupo de choque de Fuerza Popular han realizado actos vandálicos en el centro de Lima, incluso intentando tomar el Palacio de Gobierno el jueves pasado y atacando a los seguidores de Castillo que acampan frente al tribunal electoral. El colectivo La Resistencia, que desde 2018 realiza escraches contra los periodistas y magistrados que investigan a Fuerza Popular, ha participado en primera fila en las manifestaciones de Keiko Fujimori” (19/7). Castillo debuta con intentos de golpe “a la Trump”. El ex segundón de Fijimori padre, Montesinos, que purga una prisión de privilegia en una base naval, intervino directamente en el impulso a un golpe de estado.
Un gobierno de “todos”
Castillo, en un breve discurso, prometió que hará “un gobierno de todos los peruanos, sin discriminación alguna” y de “todos los sectores”. La consigna de ‘tantos pobres en un país tan rico’, culmina con una promesa de colaboración con ‘los ricos’ Aunque Castillo pidió, a través de Twitter, “no dejarse sorprender con listas y nombres de posibles gabinetes que vienen circulando”, porque “son trascendidos y especulaciones” (telam, 19/7), el dirigente de Perú Libre (Castillo) Jorge Spelucín anticipó que el gobierno será “un gobierno de amplia, de ancha base” (ídem). La mesa del Congreso, de todos modos, tendrá la forma de una coalición política. Perú Libre es una minoría en la Asamblea Nacional, pues en la primera vuelta obtuvo el 18% de los votos.
El equipo económico de Castillo liderado por un asesor de Veronika Mendoza, candidata del “grupo Puebla” y posible primera ministra, se ha venido reuniendo con todos los sectores del país incluidos los empresarios, para darles “tranquilidad”. Castillo y Mendoza han definido una alianza “para la refundación del país”. “Unirse con todos los sectores”, sin descartar una coalición nacional. Desde la primera vuelta, ha habido una persistente fuga de capitales y la devaluación del sol, que se traduce en una carestía creciente de los alimentos.
Su principal consejero económico, Pedro Francke, dijo que “no haremos expropiaciones, no haremos estatizaciones, no haremos controles de precios generalizados, no haremos un control de cambios que haga que no puedas comprar y vender dólares y sacar los dólares del país”. Se mantendrá al presidente del Banco Central y su régimen de autonomía.
Castillo recibió el apoyo de Evo Morales y Alberto Fernández, como así del candidato presidencial Lula Da Silva. El ‘grupo de Lima’ formado por la OEA y EEUU para conspirar contra Venezuela, ha perdido otro peón, después de la derrota de Macri. Keiko Fujimori, quien controla buena parte de las bancas del Congreso, puede volver a ir presa por lavado de activos en la causa Odebrecht. Esta causa ya llevó a la cárcel, al exilio o al suicidio a cinco ex presidentes.
Asamblea Constituyente
Castillo afirmó que "el Perú del Bicentenario merece una Constitución forjada desde el diálogo, la reconciliación y el compromiso con la dignidad de todos/as". "Una constitución impulsada por su noble pueblo y aprobada en democracia, sin amenazas golpistas" (EFE, 18/7; la de 1993es de neto corte neo-liberal, al estilo de la chilena. El planteo es un recule de la propuesta plebiscitarla inicial de Castillo, que proponía que fuera convocado por un referendum de iniciativa del Presidente.
Mendoza dijo que en conversaciones con Castillo han concordado en lo contrario - en que la modificación se debe realizar mediante los “canales institucionales vigentes” (larepublica, 18/7). Castillo dijo que se hará “cuando el pueblo lo decida” (El País, 19/7) y no haya amenazas golpistas. La oposición a una Constituyente refrendaría es la principal consigna de oposición del capital – en Perú y en Estados Unidos.
La burguesía no quería que asumiera Castillo sin tener algunas garantías, ni ahora deja de complotar a pesar de ellas. Su asunción es una derrota parcial para la burguesía peruana, preocupada también por la irrupción de una rebelión popular. Castillo plantea condicionar su planteo de re-nacionalización de privatizadas y de recursos estratégicos, a las disposiciones de la Constitución, y por lo tanto a un parlamento hostil. Las fichas de un posible golpe siguen activas. Castillo pretende oficiar de árbitro de las contradicciones históricas de Perú.
Emiliano Monge
20/07/2021
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