Este jueves, sitiado por miles de manifestantes, el Senado provincial sancionó la ley antiprotestas promovida por el ejecutivo provincial - que clandestinamente fuera aprobada el martes pasado en Diputados. El procedimiento express y en ambos cuerpos contrasta abiertamente con la amansadora de reuniones de comisiones y giros de un cuerpo a otro, que terminan por enterrar y esterilizar cualquier proyecto que pueda ser beneficioso para el pueblo trabajador. Los diputados kirchneristas y macristas habilitaron el tratamiento sobre tablas, para el cual se necesita mayoría agravada.Todo esto resume el pánico que ha causada en la politquería patronal de Salta la huelga indefinida y las movilizaciones masivas de docentes autoconvocados.
Las cámaras patronales de la Provincia, con la Sociedad Rural y Prograno a la cabeza, saludaron la iniciativa en nombre de la “producción”. Los autoconvocados de la salud y educación en huelga, gremios, organizaciones sociales, de derechos humanos, asociaciones profesionales, facultades y centros de estudiantes, entre otros, han expresado su más completo repudio.No así la Asociación de Educadores de Salta ni Ctera. El peronista renovador, Gustavo Sáenz, ha recurrido en tiempo relámpago al método de Gerardo Morales, el radical macrista de Jujuy, el Bukele de Noroeste.
Esta ley prohibe el derecho a huelga en áreas como salud, transporte y educación, en tanto “servicios esenciales”, y exige que todo reclamo social en los espacios públicos cuente con la autorización de la policía provincial, con 24 horas de anticipación. Asimismo, debe limitarse al espacio de media calzada y acatar la duración y modalidad que le hayan sido impuestas. Para este menester se hará “inteligencia” sobre las organizaciones de trabajadores y se infiltrarán las marchas.
El gobierno activa un aparato de seguridad cada vez más entrelazado con el crimen organizado, particularmente el narcotráfico; y con las patronales privadas, mediante el régimen de “adicionales”; es responsable de una alarmante cantidad de apremios ilegales y vejámenes contra la población civil. Sáenz secuestró los votos para gobernar a palos.
La docencia y los trabajadores de la Salud autoconvocados finalizan su cuarta semana de huelga. Están acompañados por un reguero de protestas reivindicativas. La ley es una declaración de guerra contra todo el pueblo trabajador y explotado de la provincia, que está sumido en un marco de pobreza creciente, de precariedad laboral, de colapso de la salud, la educación, los servicios públicos, etc., lo que es un caldo de cultivo fenomenal para todo tipo de protestas espontaneas contra patronales privadas y los gobiernos de turno; protestas que son un punto culminante de una experiencia social.
Ante el gran repudio popular que ha generado esta ley, se dice que Sáenz -alertado por la burocracia sindical de la CGT local y el burócrata camionero Guaymás-, analiza algún veto parcial que edulcore este engendro legal y lubrique una aceptación. En los docentes y trabajadores de la salud autoconvocados, por el contrario, junto con organizaciones piqueteras, de derechos humanos, sindicales, profesionales y estudiantiles, se discute reeditar la histórica movilización del lunes pasado, de más de 30 mil personas, por el triunfo de la huelga autoconvocada de salud y educación, por la caída de las causas armadas contra los docentes detenidos en el ex peaje Aunor y por la caída de esta ley antiprotestas de Sáenz, las patronales y el Estado salteño.
Julio Quintana
02/06/2023
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