jueves, noviembre 10, 2016

¿Perdió la candidata de las mujeres?



Donald Trump ganó las elecciones en Estados Unidos. Entre la decepción de sectores progresistas, aparece la pregunta ¿Era Hillary Clinton la candidata de las mujeres?

Contra todos los pronósticos, Donald Trump ganó las elecciones en Estados Unidos. El republicano fue muy claro con respecto a su opinión sobre las mujeres con comentarios misóginos y sexistas pero, ¿la candidatura de Clinton representaba las causas de las mujeres?
Muchos hablaron de “hazaña” y "empoderamiento" cuando el Partido Demócrata nominó a Hillary Clinton como candidata. La primera dama, Michelle Obama, dijo que gracias a Clinton, sus hijas “pueden dar por sentado que una mujer puede convertirse en presidenta”. La misma “inspiración” despertó en feministas, celebridades y varios sectores que se ilusionaron con la llegada de una mujer a uno de los puestos de mayor poder en Estados Unidos y el mundo.
Pero en los Estados Unidos de la polarización social y la desigualdad, muchas mujeres le dieron la espalda a Clinton. En las elecciones primarias, muchas apoyaron al senador Bernie Sanders (mayoritariamente entre las jóvenes, en general votaron por Sanders en una proporción 70-30). En la elección presidencial, el 54 % de las mujeres la votaron, debajo del 55 % que había apoyado a Obama en la última elección presidencial. Pero lo más llamativo fue que la posibilidad de que una mujer llegara a la Casa Blanca no despertó entusiasmo entre muchas mujeres para quienes pesó más la imagen de Clinton como representante del establishment.
... lo más llamativo fue que la posibilidad de que una mujer llegara a la Casa Blanca no despertó entusiasmo entre muchas mujeres para quienes pesó más la imagen de Clinton como representante del establishment.
Clinton polarizó el voto femenino, uno de los bloques electorales más grandes: las jóvenes la ven como representante de un feminismo “neoliberal” (de las mujeres blancas de clase media alta, que desprecia los problemas y las demandas de las trabajadoras y las minorías étnicas). Las latinas la votaron pero no abrumadoramente, quizás la única excepción sea la comunidad negra donde el Partido Demócrata tiene un peso tradicional y se la vio como el mal menor.

¿Era Clinton la opción para las mujeres?

El sentido común podría responder rápidamente SI porque el contrincante era Donald Trump, famoso por su retórica misógina y reaccionaria. Y porque es cierto que las mujeres fueron carne de cañón en la campaña republicana. Sus derechos son despreciados, junto con los de las comunidades afroamericana y latina. Pero, ¿se traducía eso en un apoyo a Clinton? La respuesta fue NO.

¿Una campaña feminista?

Clinton lanzó su campaña con la imagen de un cristal estallando en pedazos, en una clara alusión a la ideal de “romper el techo de cristal” (que representa los límites de las mujeres para acceder a puestos altos), también con imágenes de las sufragistas y el movimiento feminista de los años ‘60. Clinton sabía a quiénes se dirigía, pero los demócratas de conjunto subestimaron el peso negativo de su imagen como parte de la élite.
Especialmente para las jóvenes no bastó que Hillary fuera mujer; esperaban que su plataforma defienda los derechos de la mayoría de las mujeres. Y Hillary está lejos de hacerlo, identificada con Washington y Wall Street. Una joven feminista lo definía de la siguiente forma: “Puede que Clinton sea una mujer, pero también es blanca, rica, privilegiada y heterosexual”.
Especialmente para las jóvenes no bastó que Hillary fuera mujer; esperaban que su plataforma defienda los derechos de la mayoría de las mujeres. Y Hillary está lejos de hacerlo, identificada con Washington y Wall Street.
Para muchas feministas, que Clinton llegara al poder era la oportunidad de demostrar la forma en las que mujeres lidian con los problemas –implícitamente, de forma diferente a la de los políticos y funcionarios varones–. Pero la trayectoria de Clinton no mostraba nada de eso.
Las jóvenes que crecieron bajo los gobiernos de las familias Clinton y Bush saben que apoyó leyes como DOMA; que declaraba que ningún estado estaba obligado a reconocer una relación entre personas del mismo sexo; o la reforma de la ley del sistema criminal que resultó en la encarcelación masiva de jóvenes afroamericanos y latinos, entre quienes hay muchas mujeres.
En 2011, Hillary Clinton fue una de las tres mujeres que aconsejaron a Obama bombardear Libia (en medio de la “primavera árabe” en toda la región). Clinton (entonces secretaria de Estado), Samantha Power (Consejo de Seguridad Nacional) y Susan Rice (embajadora de EE.UU. en la ONU) estuvieron al frente de las operaciones militares.
En 2011, Hillary Clinton fue una de las tres mujeres que aconsejaron a Obama bombardear Libia
¿Más mujeres en puestos de poder significan un avance en la lucha contra la discriminación y machismo? Sí y no. Sí, porque muestra que las mujeres a lo largo de la historia mediante la movilización conquistaron lugares que antes les eran vedados (no se conoce hasta hoy ningún derecho regalado). Y no, porque su presencia en esos puestos de poder, en los estados capitalistas, solo colabora con el sostenimiento y la reproducción del orden social actual, que sigue apoyándose en la explotación y la desigualdad de las grandes mayorías, donde las mujeres llevan la peor parte.

Celeste Murillo @rompe_teclas

No hay comentarios.: