Lernamerdz quiere decir en armenio "cerca de las montañas". Es una aldea en el valle de Ararat, cerca de Erevan, capital de Armenia. Viven 103 familias y 530 habitantes. En la época soviética la aldea era uno de los pocos lugares donde no había una estatua de Lenin. Los habitantes dicen que eran más bien comunistas pasivos y sólo había siete militantes comunistas en el pueblo. Pero tras la independencia de Armenia cuando las estatuas de Lenin fueron desmontadas en todo el país, en 1996, la gente levantó un busto de Lenin hecho en basalto que es el gran orgullo del pueblo. Pesa 2 toneladas y están muy orgullosos de él.
El secretario del grupo comunista local, Azat Barseghian explica:"En 1990 cuando terminó la era soviética quisimos conocer qué se podía hacer de bueno en la vida. Nos hicieron falta 6 años para comprender y al final hemos reconocido que SÓLO HAY UNA VERDAD, EL SOCIALISMO. Hemos asumido el comunismo y lo hoy lo apoyamos".
Ararat, u hombre de 41 años dice: "Cuando vuelva Lenin el agua cantará en los arroyos y el pueblo empezará a vivir mejor". Según Saak Mirzoyan 102 de las 103 familias son comunistas. Se conoce a Lernamerdz como la pequeña Cuba. Visitantes de Rusia, Francia, Bielorrusia, Grecia, Chipre y otros países la visitan y dejan sus impresiones y buenos deseos en el libro de Oro, decorado con un retrato de Lenin en la primera página.
Arthur Pilosian, de 41 años, dice:"La estatua de Lenin nos da fuerza, es el testigo de nuestro orgullo y nuestro progreso". En torno a esta fuente de fuerza, los habitantes organizan muchas actividades, celebran el aniversario del gran líder, el día de su muerte, el Aniversario de la Revolución de Octubre y los días festivos socialistas del 1 de mayo y 7 de noviembre.
Los niños son pioneros y miembros del Komsomol local. Albert Mirzoyan, 14 años, dice que el 1 de mayo es su día favorito. Van a Erevan y desfilan.
Armen Barseguian, de 15 años, muestra con orgullo su corbata roja de pionero y dice que le gustan sobre todo las banderas y globos rojos.
El responsable de la escuela, Zaven Grigorian, dice:"Las gentes de este pueblo son muy amistosas y pienso que es el resultado de una idea de solidaridad que es parte del comunismo. Todo el mundo piensa de la misma manera y lo más importante, todo el mundo está unido. Y se transmite a los niños. Pienso que podeis hacer muchas cosas gracias a la unidad".
Los aldeanos de Lernamerdz están de acuerdo con este punto de vista. Claman su fé en el futuro y en los ideales igualitarios del comunismo para ayudarse a superar las dificultades que tiene cada familia tras la caída de la Unión Soviética.
Fuente: Nuestra Bandera / RedGlobe
jueves, 13 de septiembre de 2007
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