A 25 años de que sea elegido gobernador. El “zabeca” de Banfield, uno de los máximos exponentes de los caudillos peronistas. La construcción de un poder casi absoluto.
Cuando en la actualidad se menciona a los barones y punteros del peronismo (pero también de otras fuerzas políticas), cuando se descubren los negociados de los mismos vinculados al narcotráfico, las coimas, la ligazón con las policías mafiosas y los sucesos delictivos de las mismas, podemos decir que estos mismos actores estarían rindiéndole un homenaje al “zabeca” de Banfield: Eduardo Alberto Duhalde. El hombre que supo ser un empleado de la municipalidad de Lomas de Zamora hasta llegar a la presidencia de la nación, tejiendo una fortuna económico y política meteórica, vinculado a lo más rancio de la derecha peronista y siendo el máximo responsable político de las muertes de los luchadores Maximiliano Kosteki y Darío Santillán.
De empleado del municipio a intendente de Lomas de Zamora
Nacido el 5 de octubre de 1941, poco tiempo después de terminar el secundario ingresa como cajero del Banco de la Provincia de Buenos Aires, cargo que le asignan como herencia de la jubilación de su padre, como rezaba el mandato bancario. Según cuenta el periodista Hernán López Echague en “El otro” (Una biografía política de Eduardo Duhalde) terminó su laburo de cajero al cabo de pocos años porque su tío había ganado la lotería nacional y le solicito que le administre la plata, ya que Eduardo había ingresado a la carrera de derecho y al parecer era bueno con los números. Luego de acompañar un tiempo a su tío y continuando su carrera en la universidad, es que ingresa al municipio de Lomas de Zamora, es así como va conociendo y tejiendo relaciones con dirigentes de las 62 Organizaciones Peronistas. Duhalde ya empezara a jugar un rol dentro de la estructura peronista de Lomas.
En las elecciones de 1973, donde la fórmula del Frejuli (Frente Justicialista de Liberación Nacional) lleva a Cámpora al gobierno, triunfa luego de 18 años de proscripción del peronismo. El abogado Eduardo Duhalde conseguirá el segundo puesto de concejal en la lista peronista lomense. El recién electo intendente de Lomas Roberto Ortiz, abogado vinculado a los sectores más reaccionarios del peronismo, ejercerá su mandato como intendente por 90 días; luego de que un juicio político lo removiera al comprobar que estuvo metido en el negocio de compras de armas ilegales. El conflictivo escenario político de la época permite sospechar cuáles podrían ser los motivos de ver involucrado a un funcionario político en este tipo de delitos. La derecha peronista empezará a buscar por todos los medios de deshacerse de los sectores díscolos del movimiento. En su reemplazo debía asumir Pedro Turner, conocido dirigente vinculado a la Juventud Peronista y en ascenso político, pero una trampa (lo acusaron de desviar fondos públicos, acción donde se sospecha del papel de Duhalde) hace que asuma el segundo en la lista de concejales: Eduardo Duhalde. Las crónicas de la época ponen en primer plano dos medidas que fueron el caballito de batalla de su intendencia: el programa social destinado las necesidades de los más necesitados con la distribución de alimentos (Plan “Huevo y Leche”) y el programa “Mar y Arena”, cuyo objetivo era llevar de vacaciones a los niños de las villas miserias dos veces al año a la costa.
Siendo intendente de Lomas, en marzo de 1975, el accionar de la Triple A asesinará a 9 militantes de la Juventud Peronista de Lomas de Zamora, en un operativo donde móviles policiales irrumpieron en una casa, se llevaron a los jóvenes, los fusilaron a todos y dinamitaron sus cuerpos, lo que pasó a la historia como la "Masacre de Pasco", suceso donde se responsabilizó a Duhalde por su complicidad con las bandas de la Triple A.
La última dictadura militar encuentra a Duhalde retirado por un tiempo de la política y encumbrado en los negocios inmobiliarios. Hasta 1982 se dedicará a la actividad de martillero y a la docencia universitaria. La salida a la dictadura lo encontrará nuevamente en los primeros planos del peronismo provincial.
Gobernador de Buenos Aires
Duhalde ya tendrá un renombre dentro del armado peronista post-dictadura. Luego de ser elegido en 1983 nuevamente como intendente de Lomas, jugará sus fichas en la famosa “renovación” peronista de 1985. En principio apoyará a Cafiero en las famosas elecciones legislativas de 1985, donde éste será el elegido primer diputado en la provincia de Bs.As, ganándole al histórico Herminio Iglesias, rápidamente dejará de lado a éste, al no conseguir los cargos que quería y empezará a apoyar al caudillo riojano, Carlos Menem. Este lo designará compañero de fórmula en las presidenciales de 1989. Ya para esta época Duhalde será el político de más renombre dentro del peronismo, después de Menem. Será el líder dentro del territorio lomense, además de sumar lealtades de varios de los intendentes del conurbano.
Las elecciones presidenciales que consagrarán la fórmula Menem-Duhalde, se darán en un marcado clima de crisis política, social y económica, teniendo como consecuencia la hiperinflación que desató la caída de Alfonsín, devoró los salarios de los trabajadores, elevó a las nubes los precios de alimentos de primera necesidad, el combustible, el transporte y provocó saqueos en algunas localidades del país. Menem, consciente de que tenía a Duhalde como el mejor candidato dentro del peronismo, designa a éste como el candidato a gobernador de las elecciones de 1991.
El 8 de septiembre será elegido por primera vez (luego reelecto) como gobernador de la provincia de Buenos Aires en las listas del peronismo. Duhalde pondrá en práctica los mismos programas que cuando fue intendente de Lomas de Zamora. Será el artífice del histórico Fondo de Reparación del Conurbano Bonaerense, que funcionará casi como un ministerio más, comprometiendo a la Nación a otorgarle a la provincia una porción especial en el reparto de la Coparticipación Federal, impuestos a las ganancias recaudados destinados a la provincia. Comprará voluntades de los políticos de su propia fuerza como las contrarios (es conocido el caso donde debe sobornar a funcionarios del Modin, la extinta fuerza que lideraba Aldo Rico, para que voten la reforma de la constitución provincial que le permita ser reelecto), será involucrado varias veces al negocio del narcotráfico (como el conocido “Narcogate”, escándalo que involucraba a la familia Yoma, cuñados del ex presidente Menem, por liderar una banda que comerciaba ilegalmente la venta de drogas), y su nombre siempre estará vinculado a la derecha peronista, donde fue uno de los dirigentes más destacados de esa fuerza conservadora.
Ricardo Farías
Docente | Corriente Nacional 9 de Abril | Lista Marrón L.de Zamora
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