Ese ataque tiene una arista muy importante en lo que a recorte salarial respecta. Aquí traigo un pequeño análisis nominal sobre lo cobrado, buscando poner sobre la mesa en números que puedan servir para materializar el ajuste salarial y que sirva como una herramienta para impulsar los reclamos por el salario. Para ello utilizaré los valores del salario de becarios, cuyos aumentos mensuales son homólogos a los aumentos de los distintos escalafones del CONICET.
En enero un becario cobró $603.305 por lo trabajado en diciembre, tomaré este primer sueldo para el estudio del cambio salarial durante estos 4 meses del nuevo gobierno. La inflación acumulada desde enero a mayo ha sido del 65 % (considerando una inflación de 9 puntos para el mes de abril arrojado por consultoras privadas, OJF). Si los sueldos hubiesen ido a la par de la inflación un becario en mayo debería haber cobrado 996 mil pesos por lo trabajador en abril. Sin embargo, el estipendio en mayo fue de 729 mil pesos, esto arroja que sólo ha aumentado en un 21 % con respecto a lo cobrado en enero. La paliza salarial entonces refleja que se han perdido más de 40 puntos con respecto a la inflación en sólo 4 meses.
Este recorte salarial, brutal, abonó a lo que el gobierno llama su déficit cero o superávit fiscal, el cual no es ni uno ni el otro, ya que la deuda total del Estado ha ido aumentando durante este período alcanzando los 700 mil millones de dólares. El plan motosierra del gobierno no impone un desmejoramiento momentáneo en la vida de los trabajadores, sino que pospone la quiebra general del Estado y la industria mientras hunde en la pobreza a sectores cada vez más amplios de la población.
Promovamos asambleas en cada lugar de trabajo para enfrentar el ataque salarial, los despidos y la ley de bases que promueve el cierre o reconfiguración de todo el sistema científico-técnico.
Sergio Yeti
05/05/2024
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