domingo, diciembre 25, 2011

La sombra de la I internacional es alargada


La Asociación Internacional de los Trabajadores (AIT), más conocida como “la primera Internacional”, fue, entre otras muchas cosas, la primera tentativa proletaria de internacionalismo organizado, y lo fue desde unas posiciones pluralistas que nadie discutió. Su tiempo fue breve, pero su influencia se prolongó a través del tiempo, marcando unas líneas básicas que todavía siguen vigente, bajo otro manto, el ideal según el cual la emancipación de los trabajadores será obra de los trabajadores mismos, sigue vigente. Por otro lado, una multitud obrera podría gritar perfectamente frente a la familia condesa de Alba o en las narices del Sr. Rosell, aquello de más deberes sin derechos, no más derechos sin deber, y sonaría de lo más pertinente. También marcó el inició de la primera gran escisión socialista, la que separó a “marxistas” (luego resultó que Marx no lo era), y a “bakuninistas” o anarquistas, aunque a la hora de la verdad, unos y otros se habían batido coco con codo en las barricadas de la “Commune”, y lo harían en muchas otras barricadas ulteriores…
En el esquema de su “cerebro”, y en la opinión de la mayoría, la AIT pretendía ser "un partido mundial" y no una federación de partidos nacionales, estos últimos aún no existían; y estaba cons­tituida por seccionales locales, regionales y a veces nacionales; igualmente se permitía la adhesión de algunas sociedades obreras preexistentes; así como adhesiones individuales, algunas tan selectas como la que encarnaron en Portugal Eça de Queiroz y Antaro de Quental, o colectivas como la que se forjó en un lugar de Extremadura. Su Consejo “rector” encuadra las relaciones entre las seccionales, orga­niza las colectas de solidaridad y toma partido en los problemas que los trabajadores juzgan importantes, por ejemplo la cuestión nacional polaca contra la opresión “gran rusa”, la cuestión irlandesa contra el colonialismo británico, la guerra franco-alemana, y por supuesto, la Comuna de París que demostró a los opresores que la revolución que venía era tan democrática como igualitaria, es por eso que un prefascista hispano la llamó “la piedra filosofal del crimen”.
Pero antes que nada, la AIT fue una federación internacional de organizaciones de trabajadores de la Europa Central y Occidental en el momento en que el mo­vimiento obrero empezaba a resurgir tras las derrotas de 1848 y 1849. Surgió de los esfuerzos espontáneos de los trabajadores de Londres y París, expresando su solidaridad con la insurrección patriótica polaca de 1863…Fue intelectualmente animada por Marx (de 1864 a 1872) y Engels (de 1870 a 1872), dos “libertarios” en el sentido más pleno de la palabra, que jugaron un papel clave en su dirección.
Totalmente consciente del potencial de la asociación, Marx reconoció desde el primer momento que «había implicados "poderes" reales», pero que «llevaría tiempo antes que el renaci­do movimiento consiguiese la antigua audacia de expresión» (Carta a Engels, 4 de noviembre de 1864) que había caracterizado a la organización interna­cional de cuadros más reducida, la Liga de los Comunistas, un importante “partido” que había sido dirigido por Marx y Engels de 1847 a 1852. Por todo ello, Marx redactó y se aseguró la aceptación de un Manifiesto inaugural y unas reglas establecidas a fin de posibilitar las bases para la cooperación con los líderes liberales de las «Trade Unions» británicas y con los seguidores de Proudhom, Mazzini y Lasalle en el continente. Dichas reglas admitían diversas maneras de afiliación, y su Consejo General, elegido normalmente en los congre­sos anuales, tendría su sede en Londres –el único lugar donde existía un margen de libertad suficiente para actuar sin demasiadas cortapisas- hasta 1872.
En los primeros tiempos de la AIT, Marx, que redactó casi todos los documentos elaborados por el Consejo General, se dedicó a «los puntos que hacen posible un acuerdo inmediato para la acción conjunta de los obre­ros» (Carta a Kugelmann, 9 de octubre de 1866). Esto incluía las acciones contra el trasvase de esquiroles, la protesta contra los malos tratos dados a los prisioneros fenianos irlandeses y la lucha contra la guerra. Según se de­sarrollaba la Internacional, Marx consiguió asegurarse la adopción de de­mandas con un carácter crecientemente socialista. Así, en 1868, a pesar de una reducida oposición proudhoniana, la AIT, que en sus principios no se había comprometido con el sistema de propiedad pública, se declaró a favor de la propiedad colectiva de las minas, los ferrocarriles, las tierras cultivables, los bosques y las comunicaciones. Todas los criterios establecidos entonces podrían adaptarse sin dificultada en esta época en la que la privatización se ha convertido en el mayor robo que jamás hayan conocido los siglos.
Tal como decíamos más atrás, la Comuna de París de 1871 resultó ser el momento decisivo en la historia de la AIT. Engels iba a describir la revolución de la primavera pari­sina como «hija espiritual de la Internacional, indudablemente, aunque ésta no había movido un dedo por darle vida» (Carta a Sorge, 12-17 de sep­tiembre de 1874). Los seguidores franceses de la Internacional, principalmen­te proudhonianos, desempeñaron un papel importante en ella, y por ello el Consejo General organizó una campaña de solidaridad internacional. Marx se aseguró la aprobación de su apasionada justificación histórica de la Comu­na, La guerra civil en Francia, por mayoría del Consejo General, en cuyo nombre se publicó en forma de discurso; todavía sigue siendo un texto imprescindible. La experiencia de la Comuna y la ampliación del sufragio para la clase obrera llevaron a Marx y Engels a subra­yar la necesidad de formas efectivas de la acción política y sindical organizada en un tiempo en el que los trabajadores carecían de la necesaria conciencia colectiva. Así, en septiembre de 1871, por iniciativa suya, la AIT, en su conferencia de Londres, se declaró oficialmente a favor, por primera vez, de la «constitución de la clase obrera en un partido político». Tal objetivo fue incorporado en la nueva regla 7.a —redactada por Marx y adoptada en el Congreso de la Inter­nacional en La Haya (1872)—, la misma que especificaba igualmente que «la conquista del poder político se convierte en el gran deber del proletariado».
Como es sabido, estas propuestas encontraron la oposición de Bakunin de y sus se­guidores, quienes, sobre la base de premisas anarquistas, de­fendieron la abstención respecto a la política, un criterio sobre el que esta corriente no siempre ha mantenido una posición coherente, recordemos sin más que el delegado bakuninista en España, Fanelli, pudo realizar su célebre viaje gracias a sus prebendas como diputado, y lo era en el sentido más radical de la palabra, o sea no se callaba.
Recordemos que la Alianza Internacional de Democracia Socialista, de Bakunin, había solicitado ingresar en la AIT en 1868. A pesar de su aversión hacia aquel programa, Marx defendió al año si­guiente su admisión en las secciones de la Internacional bajo el principio de que la AIT habría de «dejar que cada sección redactase libremente su pro­pio programa teórico» (Documentos de la Primera Internacional, vol. 3). El conflicto entre los seguidores de Marx y los de Bakunin, que escalaron posi­ciones dentro de la Internacional de 1869 a 1872, estaba centrado por encima de todo en saber cómo debía organizarse la AIT Atacaba Bakunin el «autoritarismo» del Consejo General, pero al mismo tiempo intentaba colo­car a la Internacional bajo la tutela de una sociedad secreta jerárquicamente organizada y controlada por él mismo. Enfrentados con la represión estatal desde fuera y con la desorganización bakuninista desde dentro, Marx y En­gels lucharon por que se aumentasen los poderes del Consejo General. Baku­nin ganó el apoyo para sus posiciones en Suiza, Italia, España (donde después de unos comienzos muy modestos, los “internacionalistas” conocieron una rápida implantación), Bélgica, y se aseguró el de una parte sustancial de los británicos.
En medio del debate, tuvo la mayor importancia el Congreso de La Haya de 1872 que congregó a sesenta y cinco delegados de trece países europeos, Australia y los Estados Unidos, un número mayor que el de cualquier congreso precedente. En el mismo se otorgaron poderes cre­cientes al Consejo General y se expulsó a Bakunin y su compañero James Guillaume, de la AIT, acusados de haber querido organizar una asociación secreta dentro de la propia Internacional, y, además, con un contencioso de fraude contra Bakunin. El congreso aprobó también por estrecha mayoría —y en nombre de Marx, Engels y sus seguidores— que el Consejo General se instalase en New York. Motivo fundamental para este cambio debió de ser el miedo a que en Londres pudiera caer bajo el control de los exiliados del grupo liderado por August Blanqui, exiliados a raíz de la caída de la Comuna. Curiosamente, con los mismos con los que Marx se había aliado para asegurarse la mayoría frente a Bakunin y sus seguidores, que no tardaron en organizar su propia internacional, la llamada “Internacional negra”, que pretendía re­coger el manto de la AIT gozó de algunos éxitos iniciales, pero se vio irre­mediablemente dividida hacia 1877, celebrando su último y agonizante congreso, puramente anarquista, en 1881.
Esta alteración marcó efectivamente el final de la AIT, que al final quedó disuelta en una conferencia celebrada en Filadelfia, en 1876. Después de un primer tiempo de desconcierto, el movimiento obrero conoció un aumento progresivo de los partidos obreros nacionales —principalmente con un carácter más o menos marxista, sobre este punto habría mucho que hablar, de hecho Marx no será editado seriamente hasta décadas más tarde y sus ideas fueron conocidas primordialmente por manuales— que la AIT, especialmente en 1871-1872, se había esforzado en promover. Se suele ignorar que Marx, hasta su muerte en 1883, y Engels, incluso en la época del Congreso fundacional de la Segunda Internacional, se habían opuesto a «participar en organizaciones internacionales, que en el presente son tan imposibles como carentes de utilidad» (Carta a Laura Lafargue, 28 de junio de 1889). Sin embargo, posteriormente dio un importante apoyo y sus propios consejos a la Internacional Socialista que marcará otro momento en la historia social, el momento de la forja de grandes partidos y grandes sindicatos. De un legado que trataremos en una próxima entrega.

Pepe Gutiérrez-Álvarez

Marcha en Argentina a 10 años de insubordinación popular: Que febril la mirada



“Cuando estuvimos desesperados,
alguien contó la historia.”
Francisco Urondo, poeta argentino
caído en combate contra la
dictadura en julio de 1976.

Fue hace 10 años, duró, en tiempo real un día entre el 19 y 20 de diciembre, cobró la vida de casi 40 personas aún sin justicia, e hizo noticia en el mundo entero.
Quien suscribe recuerda vagamente las imágenes repetidas y ‘bien poco argentinas’ de los noticieros desde un Santiago de Chile donde los afortunados con contrato dormitaban en la fila del aguinaldo, el paquete de mercadería y las compras navideñas, mientras media ciudad estaba volcada en las calzadas y plazas, vendiendo copias orientales de juguetes ya copiados de imposibles originales gringos.
Ahora en Argentina ya ha cursado una década de los piquetes de desempleados, barriadas llevándose mercadería del gran comercio al detalle, Madres de Detenidos Desaparecidos poniendo el cuerpo contra la policía a caballo y también a bala; mujeres, jóvenes, estudiantes y trabajadores en la delantera de una militancia de izquierda sorprendida por la insubordinación aparentemente espontánea de los empobrecidos, como si no hubieran existido saqueos en 1989, ni Santiagazo en 1993, ni huelgas generales tres años después, y nuevos paros el 2000, esta vez, compuestos de sindicatos y cesantes. Sin contar con el disgusto caceroleado, de groserías sin mantel y en primer plano, de ahorristas violentados ‘porque ya no se puede confiar ni en los bancos’.
El entonces Presidente Fernando De la Rúa, firmó su renuncia ante el levantamiento y se alejó de la vida real en helicóptero luego de promesas, amenazas, represión y un Estado de Sitio que fue gasolina para el incendio popular. El desfile de presidentes desechables no se hizo esperar. Así, como en una pasarela, se vio bien vestir a Ramón Puerta, Adolfo Rodríguez Saá (quien declaró la quiebra financiera argentina y la imposibilidad de pagar las cuotas de la deuda externa), Eduardo Camaño, y Eduardo Duhalde. El 2003 asumiría Néstor Kirchner y, desde el 2007, la actual mandataria Cristina Fernández.
Pero acaba de comenzar la marcha desde el Congreso Nacional hacia Plaza de Mayo. Y son más de 10 mil.

La impunidad y la actualidad de las luchas

“Hace 10 años fuimos uno de los tres sindicatos que se movilizó y encaró la represión desde las primeras horas de la mañana hasta la tarde, junto a los motoqueros que hacían de conexión y tuvieron dos muertos, y el Suteba Combativo de La Matanza”, evoca marchando, Liliana Schelotto de la mesa ejecutiva de la Asociación Gremial Docente de la Universidad de Buenos Aires.
-¿Qué asignaturas están pendientes desde el 2001?
“La falta de presupuesto para que la educación se ponga al servicio de los intereses populares. Presupuesto significa no únicamente tener edificios en condiciones, que no tenemos; no solamente tener seguridad en el trabajo, que hoy no tenemos; contar con todos los trabajadores rentados porque hoy existe un alto porcentaje de docentes universitarios que se desempeñan ad honorem, sin sueldo. Lo mismo que los investigadores. Significa becas para los estudiantes, que tampoco las tenemos o que llegan a 45 dólares. También, como al conjunto de los trabajadores, se nos retiene parte del salario –que es el impuesto a las ganancias-, cuando debería existir un impuesto a los grandes capitales y fortunas. Por eso estamos aquí. Nos movilizamos contra el ajuste, contra el aumento de las tarifas del gas, la electricidad, el agua, que va a repercutir negativamente en los recursos públicos. Y estamos porque tenemos compañeros docentes que son delegados sindicales con juicios y sumarios abiertos, o que están siendo expulsados de la universidad por luchar. Queremos paritarias libres (negociaciones laborales sin condicionamientos) para marzo-abril de 2012.”
Por su costado, Martín Alderete es un abogado que pertenece a la Coordinadora Anti-represiva por los Derechos del Pueblo. Martín afirma que participa en la marcha como una manera de “reivindicar la reacción popular frente a una situación de absoluta miseria que se sufría en ese momento. La protesta fue contra un sistema político que estaba contra el pueblo.”
-¿Qué aspectos consideras incumplidos?
“Sigue existiendo pobreza, falta de educación, vivienda. Más allá del discurso del gobierno, continúan violentándose los derechos humanos, especialmente a partir de estos últimos tiempos donde hemos observado movimientos de trabajadores sindicalizados para demandar mejores condiciones salariales y laborales. Pero la respuesta ofrecida es judicializar la protesta, abrir procesos criminales, cuando el único delito ha sido exigir derechos legítimos.”
-¿Qué opinión tienes de la reforma a la ley antiterrorista que busca sancionar el Ejecutivo?
“Ello constituye un avance para quienes quieren criminalizar la protesta social. Con el ropaje de que sería una ley antiterrorista, los supuestos que castiga son conductas que sólo pueden ser llevadas adelante por organizaciones populares. Por ejemplo, se criminaliza que un individuo o grupo de personas tenga por finalidad exigir a la autoridad nacional, a un gobierno extranjero o a una institución internacional que haga algo o se abstenga de hacerlo. ¡Eso es lo que se hace en las calles y en cada huelga!”
-¿Qué tareas realiza frecuentemente la Coordinadora Anti-represiva por los Derechos del Pueblo?
“Atendemos las situaciones ligadas a la represión del Estado. Hay muchos jóvenes pobres que son asesinados y torturados en las comisarías por las policías. Asimismo, asistimos legalmente a las personas acusadas en la dimensión penal por el solo hecho de salir a luchar.”
El abogado Martín Alderete recuerda que hace 10 años él tenía 26, ya era profesional, “estuve en las calles y fui a las comisarías a sacar a algunos compañeros que habían sido detenidos ese día en la ciudad de Buenos Aires. Incluso un amigo y compañero fue asesinado en Avenida de Mayo y 9 de julio por las balas policiales. Era Carlos ‘Petete’ Almirón.” Martín escucha una nueva pregunta y contesta que “siento la alegría de un pueblo que después de muchísimos años de no participar activamente en el ámbito público, se arrojó a las calles a pelear por lo que consideraba justo y no retrocedió, aun frente a la represión y la muerte. Eso cambió la historia argentina. Hoy la gente se toma las vías públicas y cree que su presencia activa es mucho más relevante que poner un voto en las urnas. Y en otro sentido, tengo mucho dolor por los compañeros muertos y porque esos crímenes siguen impunes hasta hoy. No hay nadie condenado por los que faltan y, se sabe, que se trató de violencia estatal ejercida por las más altas esferas del gobierno de ese momento.”

La buena relación entre el estado y las clases dominantes

En el último número de la revista Sudestada, el sociólogo y cientista político, Atilio Borón, afirma que después de 10 años, “El modelo económico, en lo esencial, se ha mantenido (…) La Argentina hoy tiene un índice de polarización económica donde el 10 % más rico gana 27 veces más que el 10 % más pobre (…) pero cuando empezamos el período democrático estábamos en 13”, y añade que “Hubo algunos cambios importantes que hizo el gobierno (de Néstor Kirchner y Cristina Fernández) (…) Primero y más importante, la quita de los bonos de la deuda externa. El segundo es la Asignación Universal por Hijo (…) cambiaron algunos elementos como la reestatización de las AFJP, cuya privatización había sido votada por gente de este mismo gobierno. Pero no alteran las estructuras fundamentales del modelo neoliberal que todavía tiene como uno de sus puntales, la ley de entidades financieras, que rige todo el sistema financiero y bancario (…) la clase dominante ha respaldado de manera muy fuerte la gestión del actual gobierno (…) Más allá de chisporroteos ocasionales, que son inevitables, hay una muy buena relación entre el Estado y las clases dominantes”.
En la misma publicación, el Doctor en Ciencias Políticas, Guillermo Almeyra escribe que “El estallido, la gran pueblada, esta vez en Buenos Aires, fue resultado de la combinación entre el corralito para favorecer al capital financiero y el lento desgaste político provocado por el cierre de empresas, privatizaciones, el aumento de la desocupación que había dado origen a los piqueteros” y continúa, “Había voluntad de cambio del personal político, no de cambio del sistema capitalista. (…) La Central de Trabajadores de Argentina y la Central General de Trabajadores, apoyaron pero no organizaron. (…) La hegemonía capitalista, la visión nacionalista, el verticalismo estatista y la visión desarrollista de la economía siguen intocados, como en tiempos de Perón o de Frondizi”.
Lo que faltó
“Hace 10 años yo tenía 15”, relata Matías Cisneros, mecánico y delegado sindical de los trabajadores del subterráneo porteño Línea C, “el 20 de diciembre lo viví encerrado en mi casa, mirando la tele. Vi los saqueos, vi las movilizaciones, vi la represión, y vi como se cagaban de hambre en mi casa. Me cambió la cabeza. Y cuando entré a trabajar al subterráneo, vi la asamblea, vi un método de organizarse y hoy estoy acá, como un indignado de 2001, pero organizado.”
Matías habla rápido y fuerte con fondo de cánticos contra la impunidad de los casi 40 muertos de entonces, mientras dice que “las causas por las que salieron a la calle en ese tiempo siguen vigentes. Los que ahora están en el gobierno son los mismos sólo que reciclados, y siguen vendiendo al país como hace una década. El único cambio es que ahora estamos en medio de una crisis económica internacional y antes sólo fue una bancarrota argentina. Ya sabemos en la actualidad que viene un ‘tarifazo’ (quita de subsidios a servicios básicos), y no pensamos entregar nuestras conquistas sociales.”
-¿Qué faltó el 2001?
“Una organización política capaz de organizar a los trabajadores.”

Andrés Figueroa Cornejo

Nochebuena



En vísperas de Navidad, se quedó trabajando hasta muy tarde. Ya estaban sonando los cohetes, y empezaban los fuegos artificiales a iluminar el cielo, cuando Fernando decidió marcharse. En su casa lo esperaban para festejar.
Fernando Silva dirige el hospital de niños en Managua.
En vísperas de Navidad, se quedó trabajando hasta muy tarde. Ya estaban sonando los cohetes, y empezaban los fuegos artificiales a iluminar el cielo, cuando Fernando decidió marcharse. En su casa lo esperaban para festejar.
Hizo una última recorrida por las salas, viendo si todo queda en orden, y en eso estaba cuando sintió que unos pasos lo seguían. Unos pasos de algodón; se volvió y descubrió que uno de los enfermitos le andaba atrás. En la penumbra lo reconoció. Era un niño que estaba solo. Fernando reconoció su cara ya marcada por la muerte y esos ojos que pedían disculpas o quizá pedían permiso.
Fernando se acercó y el niño lo rozó con la mano:
-Decile a... -susurró el niño-
Decile a alguien, que yo estoy aquí.

Eduardo Galeano

Los nuevos salvadores de la Patria.


Como ya es de conocimiento público, acaba de ser aprobada la LEY TERRORISTA CONTRA EL PUEBLO, exigencia del G20, es decir los amos del mundo, y particularmente del GAFI (Grupo de Acción Financiera Internacional), como arma legal para reprimir la lucha de los pueblos ante los planes de ajuste que se avecinan, ya que como es costumbre, consideran que la crisis capitalista la deben pagar los trabajadores y demás sectores populares. Se terminó el magro reparto de zanahorias y ahora viene la ley del garrote.
Gobiernos lacayos como el argentino, con el ropaje de "progres" e ilustres defensores de los derechos humanos, impulsaron rápidamente esta ley, aprovechando su reciente triunfo en las elecciones. Contaron para ello con distinguidos cómplices, algunos de los cuales se dan a conocer puntualmente a continuación, en una breve lista, sin duda incompleta, de los diputados de los partidos políticos que se dicen democráticos y progresistas, o de centroizquierda, realmente traidores a su pueblo, cuya nefasta conducta no debe quedar en el olvido:
Carlos Héller (Nuevo Encuentro), banquero progresista y ex miembro del PC; Gastón Harispe (Nuevo Encuentro); Juan C. Junio (Nuevo Encuentro), directivo del Banco Credicoop y ex miembro del PC; Martín Sabatella (Nuevo Encuentro), ex integrante de la Alianza y ex miembro de la F. Juvenil Comunista.
También hay que destacar que el hijo de Estela Carlotto, cabeza de las Abuelas de Plaza de Mayo, votó a favor de la ley.
Los oportunistas y renegados suelen proliferar a todo nivel en momentos difíciles y complejos para el campo popular, pero lo más grave es cuando logran reciclarse una y otra vez por falta de memoria y de una auténtica alternativa de cambios profundos, con apoyo masivo, autocrítica que nos debemos todos.
Por tal motivo, es urgente e imprescindible impulsar la unidad y la lucha de nuestro pueblo contra esta ley terrorista, incluyendo en lo posible un programa mínimo a establecer de común acuerdo, pero no solo a nivel nacional sino a la vez desde cada barrio, zona o región.

Colectivo Avanzar por la Unidad del Pueblo

Diario de una alfabetizadora cubana



Este relato está basado en las declaraciones de Sonnia Labrada y fragmentos de su diario original, escrito entre el 17 de abril y los días posteriores al 22 de diciembre de 1961, fecha en la que se declaró a Cuba Territorio Libre de Analfabetismo.
Cubadebate

Diciembre 18, 1961, Año de la Educación. Sentada en el suelo, mientras escribo, balanceo los pies por entre las barras metálicas del tren. Parece como si fuéramos en un ciempiés con sombrero de guano, porque estos vagones se utilizan para transportar caña. Ahora están acondicionados con bancos de madera y techo de pencas para taparnos del sol.
A ambos lados de la vía, los campesinos agitan las cartillas entre sonrisas, como si quisieran acompañarnos a La Habana para desfilar con nosotros.
Todavía me parece escuchar la Banda de Holguín, cuando nos regaló en la estación, hace dos días, los acordes de La Internacional. Hemos madurado tanto durante la última época… Ya es tarde, tengo sueño, pero no voy a dormir. Quiero repasar los hechos de estos meses.

Varadero: La fragua

Abril 17. Mi nombre es Sonnia Labrada Velázquez. Tengo 17 años y terminé el tercer curso en la escuela de Maestros Primarios de Holguín. Pertenezco a la Brigada Conrado Benítez.
Por fin llegamos a Varadero, después de un viaje larguísimo. Nos albergaron en la antigua casa de veraneo de la hija de la Condesa de Revilla de Camargo. Es un chalecito rosado, de tejas blancas, pero no tiene muebles, solo muchas literas. Dicen en la radio que por el sur de Las Villas han desembarcado contrarrevolucionarios, pero aquí no pasa nada. Pienso que en mi casa estarán preocupados, aunque desde antes de que saliéramos conocían la amenaza de agresión al país.
Ya nos dieron los uniformes: boinas, botas, cinto, distintivo, camisa y pantalón. Todo me queda bien. Después de las clases de orientaciones nos bañamos en el mar. Aquí me dicen Ana Frank, porque no paro de escribir.
Abril 18. En la noche, estábamos divirtiéndonos cuando se apagó la luz inesperadamente y mandaron a hacer silencio porque iba pasando un barco. Al rato nos ordenaron bajar al sótano. Las muchachitas se alarmaron, pero no se oyó ni un tiro. Dicen que hay un desembarco de mercenarios por Playa Girón.
Abril 25. Hoy nos preguntaron la disposición que teníamos para ir a cualquier parte de Oriente. Me siento avergonzada de mí por no dar el paso, pero me puse a pensar en papi y mami: ellos me pidieron que si podía escoger no fuera para Baracoa. Por mí, me hubiera ido, pero pedí que me manden para Holguín, Aguas Claras específicamente. Sé que no va a ser posible, porque seguro que allí no hay muchos analfabetos.
Mayo 5. Nos repartieron las mochilas: traen cinco cartillas, dos manuales, seis libretas, seis lápices, la hamaca, una bandera cubana, un retrato de Camilo, tres libros de cuentos de Martí, Arma Nueva (un folleto para cuando el analfabeto sepa leer), expedientes y registros. Además, contiene una lata de leche condensada, un paquete de chocolate y uno de caramelos. Estoy ansiosa por comenzar la sagrada tarea que me espera.

“Ana Frank” en Holguín

Mayo 9. Tengo una suerte terrible: me quedaré en casa de Orfelina Fernández (Orfe), mi amiga y compañera de escuela y alfabetización. Vive en el Cuartón Las Casimbas, en el barrio de San Lorenzo, entre Holguín y Las Tunas. El lugar está frente a la carretera, a 45 minutos de Holguín.
La casa es grande, de madera y cinc, con el piso de cemento. Tiene dos cuartos: nosotras dormiremos en el segundo. La madre se llama Mercedes y parece buena persona. Fermín, el padre, es un señor mayor. Con ellos viven también Ernesto, el hermano más pequeño, Fermín, el del medio, y Manuel, el mayor. Todos son muy simpáticos.
Mayo 10. Ya está listo nuestro centro de alfabetización. Pusimos banderas y los retratos de Camilo. Yo quisiera tener en la pared uno de Martí y otro de Fidel, voy a ver si los traigo el domingo de la casa.
No quise coger al primer alumno porque tenía miedo y me daba pena darle la clase yo sola. Orfe lo hizo y resulta que es inteligente, porque aprendió rápido la lección.
Mayo 11. Ya tengo mis propios estudiantes: Hilda, Lolita, Juan, Cachita Susana, Elda, Romilio… A Elda le enseñé a firmar, va de lo mejor. Es la primera vez que verdaderamente enseño algo. Ojalá que al final de este año pueda sentirme orgullosa por ayudar a leer y escribir a una persona adulta.
Mayo 16. Amado, el brigadista responsable de la zona, nos contó que regaron papeles con amenazas de que nos van a ahorcar. Todas las noches, a una muchacha le ponen su nombre en una mata de mango cerca de la casa. Por suerte, nosotras no hemos tenido dificultades.
Me bañé temprano, comimos y al poco rato llegó Romilio. Después, Manolo con la señora y sus hijos. Él llegó hasta la P. A ella le puse unas cuentas y le hice un dictado: ya sabe leer y escribir bastante bien. Se fueron después de las 9 y al poquito rato nos acostamos.
Noviembre 11. Mañana será un día para no olvidar: celebraremos la victoria del conocimiento por encima de la oscuridad de la ignorancia en San Lorenzo: por fin podremos declararlo libre de analfabetismo. Cómo voy a extrañar a mis ocho alumnos, a mis compañeros de la Campaña… Ya tengo en mis manos la carta que cada uno de ellos escribió a Fidel como prueba de lo que han aprendido.
Diciembre 15. Hoy Holguín estaba precioso durante el desfile. Los brigadistas nos concentramos en la Avenida de los Álamos y llevamos nuestra alegría hasta el parque Calixto García. Allí estaban muchos de nuestros compañeros de escuela, a quienes no veíamos desde el inicio de la Campaña. Había que ver la emoción con que todos nos mirábamos.
Pero cuando izaron la bandera y Holguín fue declarado Territorio Libre de Analfabetismo, sentí que ya no estaba frente a la Periquera, sino a unos kilómetros de Buenaventura, en Las Casimbas, bajo la luz de mi farol, intentando enseñarle a Romilio las primeras letras.
Hace aproximadamente un mes que nos despedimos de la familia de Orfe, pero no me olvido de ninguno. Esta experiencia ha sido maravillosa. Mis padres no saben cuánto les agradezco por haberme permitido participar.
Diciembre 18. Son las tres de la madrugada. Dicen que estamos entrando a La Habana. Nos quedaremos en Guanabacoa, en casa de Lourdes y Lucy Chirino y Yuya (la madre), unas brigadistas que conocimos en Holguín y con las cuales mantuvimos buenas relaciones. Ya tenemos el itinerario previsto para los días anteriores al desfile: muchas visitas a amigos y paseos por la ciudad.
Pero lo que más me emociona es el acto del 22. No dejo de pensar en eso. Imagino la Plaza de la Revolución repleta de cubanos, aguardando por los brigadistas con banderitas de colores en las manos. Iremos de uniforme completo, con los faroles y las cartillas en alto, listos para asumir cualquier otra tarea. Fidel estará allí, sonriente y orgulloso de su pueblo. Y entonaremos el Himno de las Brigadas Conrado Benítez y el Canto de Triunfo, para terminar diciendo bien alto: “Fidel, Fidel, dinos qué otra cosa tenemos que hacer”.

Liudmila Peña Herrera

La Rusia indignada. Retratos de un pueblo harto de injusticia


20 años después del fin de la URSS, la sociedad civil rusa se rebela contra el fraude electoral de Putin.
Las manifestaciones callejeras celebradas por toda Rusia este mes representan un desafío a los estereotipos habituales sobre la pasividad del pueblo ruso. Indignados por el resultado de una elección parlamentaria fraudulenta, miles de rusos han salido a la calle para manifestar su repulsa ante las ambiciones de Vladímir Putin de regresar a la presidencia del país en marzo. El alto grado de participación y el fervor de las protestas parecen sorprender positivamente a los propios manifestantes. Un orador en Moscú se dirigía a la multitud diciendo: "¡Muchas gracias por no quedaros en vuestras casas sentados en el sofá bebiendo cerveza!".
De hecho, la sociedad civil en Rusia ha ido creciendo continuamente durante los últimos años y es cualquier cosa menos pasiva. Antes del colapso del comunismo (hace 20 años, este día de Navidad), reunirse en un piso privado a hablar de temas remotamente políticos podía suponer la cárcel o el exilio para los participantes. Hoy en día, existen literalmente miles de organizaciones no gubernamentales esparcidas por el extenso territorio del país. Estas ONG trabajan en una amplia gama de temáticas, desde las campañas medioambientales al trabajo social con discapacitados; desde la lucha contra la corrupción a la defensa de los derechos humanos.
El crecimiento acelerado de la sociedad civil rusa tuvo lugar durante los años posteriores a la transferencia de la presidencia de Putin a Dmitri Medvédev. Y ahora que Putin prepara su regreso, muchos activistas se preguntan si podrán continuar desarrollando su labor de la misma forma.
En 2006, Putin introdujo una nueva ley que afectaba a las ONG y estaba diseñada para controlar a los grupos independientes (principalmente, atándolos de pies y manos con trabas burocráticas). Al final, sólo unos pocos se vieron obligados a desaparecer. Pero hoy, el activismo independiente parece suponer una amenaza para el Gobierno de Putin, quien ha retomado sus ya familiares e inquietantes teorías de que sus críticos están financiados por los enemigos extranjeros del país.

Sociedad civil marginada

Entre los activistas rusos existen diferentes posiciones en lo relativo a la cooperación con las autoridades. Sergei Kovalev, antiguo preso político y primer Comisionado para los Derechos Humanos de Rusia tras el colapso soviético hace 20 años, por ejemplo, insiste en que una sociedad civil verdaderamente sólida desafiaría al actual Gobierno ruso exponiendo su total "ilegitimidad". Por el contrario, se queja, la realidad es que muchos activistas se ven reducidos a trabajar marginalmente y a actuar como "cortesanos con astucia".
Para Marina Pisklakova no hay nada marginal en sus esfuerzos por proteger a las mujeres rusas de la violencia doméstica. Tras crear una serie de refugios para mujeres que escapan del maltrato de sus parejas, acaba de lograr que se establezca el primer número de teléfono gratuito del país para denunciar este tipo de violencia. También está volcada en convencer al Parlamento ruso de que criminalice la violencia doméstica, de forma que las mujeres no tengan que entablar acciones judiciales por su cuenta. "Las agencias gubernamentales nos aceptan como socio en igualdad de condiciones a la hora de responder a la violencia de género", dice Pisklakova.
Algunos activistas arriesgan la vida para desempeñar su labor. En Chechenia han matado a investigadores por estar dispuestos a retar a las autoridades chechenas. Primero fue la periodista Anna Politkóvskaya, muerta a tiros frente a su apartamento moscovita en 2006; más tarde, la activista pro derechos humanos Natalya Estemírova, secuestrada y asesinada en Chechenia en 2009.

Represión mortal

Denunciantes y abogados pro derechos humanos han sido asesinados; uno de ellos murió en la cárcel debido al maltrato y la posible conducta criminal de los oficiales. Los activistas que intentaban evitar la destrucción del bosque de Jimki en las afueras de Moscú fueron atacados en varias ocasiones, tanto por matones anónimos como por la Policía Local. Un periodista del lugar, Mijail Beketov, se encuentra confinado en una silla de ruedas y sin habla tras recibir una atroz paliza.
Cuando las amenazas no son de muerte, pueden ser legales y destinadas a arruinar la reputación y las finanzas del acusado. Oleg Orlov, director de la organización pro derechos humanos más conocida de Rusia, Memorial, ha sido acusado por el gobernante checheno Ramzan Kadirov de difamación criminal. A principios de este año resultó absuelto, pero se ha recurrido el veredicto. El periodista y crítico Artióm Troitsky, que lleva desde los tiempos soviéticos sacando sátiras de los poderosos, se enfrenta a una demanda de un funcionario del Kremlin por haberle llamado "caniche entrenado".
A veces, la sociedad civil desempeña funciones que el Gobierno ruso no atiende debidamente. Natalya Voronitsina, una exfotógrafa actualmente postrada en cama con esclerosis múltiple progresiva, se dedicó a organizar la lucha contra el fuego durante los dramáticos incendios que asolaron el oeste de Rusia en 2010. Desde su portátil en su apartamento de un barrio moscovita, enviaba voluntarios, provistos de sus propios equipamientos, a ubicaciones donde las brigadas locales de bomberos no estaban bien preparadas o eran incompetentes. "Los incendios demostraron a mucha gente que el Gobierno es impotente", dijo Voronitsina. "Sólo el pueblo puede lograr algo".
Irónicamente, la mayoría de los rusos saben muy poco sobre las actividades de su propia sociedad civil. Son escasos los periódicos rusos dispuestos a criticar el liderazgo del Kremlin y a informar sobre las actividades de los grupos pro derechos humanos, y sólo una o dos emisoras de radio en Moscú lo hacen. Por otro lado, la televisión rusa permanece bajo un estricto control. "Los canales estatales de televisión son de hecho los órganos de relaciones públicas del Gobierno", dice Leonid Parfenov, ex personalidad televisiva independiente a quien se ha mantenido alejado de los noticieros televisivos durante los últimos siete años.

Récord de cibernautas

La buena nueva es que Rusia tiene ahora más usuarios activos de internet que ningún otro país en Europa, y que Putin no controla las noticias a las que se pueden tener acceso de este modo. Una de las muchas razones por las que el partido en el Gobierno obtuvo muchos menos escaños de los previstos en las elecciones parlamentarias de este mes es el hecho de que el Kremlin ya no monopoliza el mensaje. Algunos de los grandes portales web políticos independientes se cayeron durante las elecciones parlamentarias, lo cual hace temer que el Kremlin quizá no sea tan tolerante en el futuro con la libertad de expresión cibernética.
No obstante, montar una censura de internet a gran escala sería algo extremadamente caro (como han descubierto, por ejemplo, los chinos). Las libertades cibernéticas son un genio que a Putin le va a resultar muy difícil volver a meter dentro de la lámpara soviética.
Los reformistas rusos se lamentan de la pasividad de su pueblo desde que se plantearon las primeras ideas para reformar Rusia. "El Gobierno llevaba al pueblo de la mano y el pueblo se dejaba guiar a ciegas", escribió el historiador Borís Chicherin en 1857. "A lo largo de la historia, el Gobierno nunca ha encontrado en el pueblo un obstáculo grave". Pero cuando las manifestaciones callejeras arrasaron el país este mes, de repente da la impresión de que Vladímir Putin quizá sí haya encontrado un grave obstáculo en su propio pueblo.

Carroll Bogert

La derrota del capital financiero por el pueblo islandés


De cómo la población islandesa se rebeló exitosamente frente a las políticas neoliberales impuestas por el FMI y la UE

Islandia es un país de poco más de 300.000 habitantes. No tiene ejército. Y, sin embargo, derrotó a los centros financieros más importantes del mundo a base de su firmeza y voluntad popular. En las ligas de riqueza que periódicamente se publican, Islandia aparecía como uno de los países más ricos del mundo, ya que su PIB per cápita era de los más elevados. Y todo ello se atribuía a la enorme desregulación de la banca, permitiéndole a ésta lo que quisiera, sin ningún tipo de regulaciones, frenos o inhibiciones. Islandia era el paraíso del neoliberalismo. Las políticas del gobierno islandés estaban orientadas a facilitar y dar la bienvenida al capital financiero de otros países, como Gran Bretaña y Holanda. Ello condujo a una situación en la que todo el mundo se endeudó, incluyendo el Estado. La deuda pública pasó de ser 200 veces el PIB del país en 2003 a 900 veces en 2008. Todo parecía ir sobre ruedas hasta que estalló la crisis financiera europea. Entonces, la economía islandesa colapsó. Los tres bancos más importantes de Islandia, Landbanski, Kaupthing y Glitnir fueron nacionalizados. Y su moneda se desmoronó. Su valor descendió un 85% respecto al euro.
Este desastre financiero fue el origen de una revolución popular que cambió el rumbo del país, hasta entonces gobernadas por elites familiares que habían controlado el poder financiero y político del país. Tal revolución popular recuperó su soberanía perdida. El gobierno, respondiendo al colapso, había negociado un préstamo de 3.500 millones de euros de varias fuentes y países. Pero como condición, tanto el FMI como la Unión Europea quisieron imponer unas condiciones draconianas a la población islandesa, tal como está ocurriendo en Grecia, Irlanda, Portugal, España e Italia. Entre estas condiciones estaba una que exigía que cada ciudadano en Islandia pagara el equivalente a 100 euros al mes durante los próximos quince años a fin de pagar la deuda debida a tales bancos. Esta demanda fue la que sacó a la población a la calle, y así comenzó la revolución islandesa. La idea de que la ciudadanía tenía que pagar el desastre creado como consecuencia del comportamiento irresponsable de la banca, que contó con la complicidad del Estado, fue más de lo que la gente podía tolerar. La presión de la calle –elemento clave en la revolución popular- hizo que el jefe del Estado, Ólafur Ragnar Grímsson, rehusara firmar la ley que exigía que la ciudadanía pagara las deudas privadas y públicas y que aceptara la petición popular de que se convocara un referéndum en el que la población expresara su opinión sobre la citada ley.
Los gobiernos británico y holandés, en nombre de sus bancos, así como el FMI y la Unión Europea, amenazaron por todos los medios con convertir a Islandia en la Cuba del Norte de Europa, aislándola completamente, como había ocurrido después de la revolución cubana. Pero la población respondió que “si aceptaban la ley propuesta por las élites gobernantes, Islandia se convertiría en el Haití del Norte”. En Marzo de 2010 la población votó en el referéndum y nada menos que el 93% rechazó aquella ley. El enfado de la población se tradujo en un movimiento que exigió responsabilidades civiles y criminales a los responsables de la crisis financiera en Islandia, incluyendo al que había sido el Primer Ministro de Islandia, así como los presidentes de los tres bancos que tuvieron que ser nacionalizados. Todos ellos han terminado en los tribunales, y no se excluye que terminen en la cárcel.
Fruto de la indignación popular, también se exigió que se hiciera una Nueva Constitución escrita, no por el Parlamento, sino por una Comisión Popular, formada por 25 ciudadanos sin filiación política entre 522 adultos que habían sido elegidos por la población. Se está elaborando el borrador, y la comisión está recibiendo comentarios por Internet. Cuando el proceso termine, será sometido al Parlamento para su aprobación.
Varias consecuencias pueden deducirse de lo dicho hasta ahora. Una de ellas es que todas las previsiones de “catástrofe” que ocurriría si el referéndum fuera rechazado –como lo fue-, provenientes de los centros financieros, FMI y de los gobiernos de la UE, fueron ignorados, pues eran motivados para crear una cultura del miedo que servía a sus intereses. La otra conclusión es que cualquier solución al enorme problema creado por los bancos extranjeros y nacionales pasa por recuperar la soberanía por parte de la población. Islandia demuestra la necesidad de no delegar el poder popular en otras instituciones que claramente han mostrado que no representan los intereses de la mayoría de la población.

Vicenç Navarro

Los avances en la investigación por la muerte de Neruda


Santiago, 24 Diciembre 2011.- En la siguiente entrevista, concedida por el juez Mario Carroza al diario argentino MDZ, el magistrado reconoce que las muertes de Pablo Neruda y Eduardo Frei en la Clínica Santa María, “son parecidas”; dice que el testiminio de Manuel Araya, el chofer de Neruda que asegura que fue asesinado, “tiene cierto grado de verosimilitud”, y asegura que “hay varios de los elementos que él incorpora en su declaración que son comprobados en el tiempo”. En otras palabras, la posibilidad de que Pablo Neruda haya sido efectivamente asesinado por agentes de la dictadura, ya es más que una mera hipótesis de un testimonio aislado.
El 19 de septiembre de 1973, ocho días después del golpe de Estado que derrocó a Allende, Pablo Neruda es trasladado en ambulancia desde su casa de Isla Negra a la Clínica Santa María, en Santiago, donde permanecería hasta su salida hacia México, en un plan elaborado, con participación del gobierno mexicano, para sacarlo del país hacia un exilio que podía ser el comienzo de una resistencia desde el exterior a las intenciones de Pinochet.
En el camino desde Isla Negra a Santiago, la ambulancia en la que va Neruda es seguida de cerca por el automóvil en el que va Manuel Araya, su chofer y guardaespaldas. Durante el traslado, son detenidos varias veces en la ruta y revisados. Pero llegan a la clínica, que será el lugar en el que Neruda muera, el 23 de septiembre. La versión oficial dice que fue a causa de su cáncer de próstata, pero a mediados de este año, Manuel Araya comenzó a hacer temblar esta historia, al revelar que Neruda fue asesinado mediante la colocación de una inyección en el estómago, en la mañana del 23 de septiembre, que le provocó la muerte.
Manuel Araya fue detenido ese mismo día por los carabineros, horas antes del deceso del poeta, y trasladado al Estadio Nacional, lugar de encierro escogido por los golpistas.
Las huellas de la inyección en el cuerpo de Neruda estaban, el plan para huir del país era concreto, la posibilidad de una actividad de resistencia desde el extranjero no era ajena, los tiempos se ajustan a las posibilidades de un asesinato…
Todo parece concordar con la versión que Manuel Araya, 38 años después, por fin puede revelar mediante una denuncia realizada a través del Partido Comunista de Chile, al que tanto él como Neruda pertenecían en 1973.
Por eso, MDZ online viajó a Chile tras los pasos del posible asesinato de Pablo Neruda, y nos entrevistamos con el juez Mario Carroza, ministro dela Corte de Apelaciones y quien está a cargo del expediente Neruda (1.038-2011), que nos recibió en su despacho.
A continuación, una charla en profundidad sobre la causa Neruda, la condición en la que se encuentra, su parangón con otro caso de relevancia y sus posibles consecuencias.
- ¿Por qué el chofer de Pablo Neruda se decide cuarenta años más tarde a hacer la denuncia?
“No sé cuáles son sus motivaciones, algo explicó él cuando se lo entrevistó. Nosotros, dentro de lo que era el marco de una activación de procesos de derechos humanos, dondela Corte Supremadio ciertas directrices y dictó un autoacordado, recibimos numerosas querellas, entre las cuales estaba la de Salvador Allende, y también recibimos la de don Pablo Neruda, que se iniciaba por algo distinto, porque era en razón de los dichos que había hecho el secretario de él.
La motivación del señor Araya, entiendo yo, de alguna manera es que comprende que llega el momento de hacerla, porque no había sido escuchado, porque él dice que en reiteradas oportunidades manifestó esta situación pero no había sido escuchado, y tal vez, como se da el caso de Salvador Allende, el de Bachelet y otros que se están revisando, entonces, se acerca al partido y ahí puede entregar su versión de lo que había sucedido enla Clínica Santa María”.
- Que es la misma clínica en la que muere Eduardo Frei, que luego se demostró que había sido asesinado. ¿La metodología con la que fue asesinado Frei, sería similar a la empleada para matar a Neruda?
“Aparentemente, desde un punto de vista de una analogía, podríamos decir que sí, pero las épocas son distintas, entonces yo no sé si los elementos que se tenían en el año en que muere don Pablo Neruda a la época en que muere don Eduardo Frei, la tecnología, era la misma, o las sustancias eran las mismas, pero en las formas en que aparentemente se gestan, yo entiendo que son parecidas”.
- Usted dijo que Araya habría entendido que llegó el momento. ¿Llegó el momento a nivel justicia? ¿Chile está atravesando un tiempo de revisión profunda de estos casos de delitos de lesa humanidad?
“El Poder Judicial ha entendido que, dentro de lo que son las violaciones a los derechos humanos, fundamentalmente a raíz de la violencia política, en cuanto a lo que son desapariciones y muertes, no así en cuanto a la tortura, porque en este momento está en funcionamiento la Comisión Valech, encargada de revisar todas estas situaciones que no fueron tan conocidas en ese tiempo pero que sí ocurrieron, el Poder Judicial, decía, empieza a revisar todo este proceso, a ver si hay antecedentes o si no los hay, fundamentalmente movido por la Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos, que es un poco la que promueve, conversando con la Corte Suprema, revisando con los ministros que llevan las causas de derechos humanos, esta situación, y la Corte Suprema la recoge y dicta este autoacordado”.
- La denuncia del posible asesinato viene de una sola persona, pero me imagino que tiene que haber otros elementos alrededor como para darle vía judicial.
“En ese minuto, cuando el señor Araya da esta información, obviamente que hay elementos a los que era necesario llegar para establecer si era cierta o no. Uno de ellos fue una declaración que prestó respecto del embajador de México en ese entonces, que estaba en el Consulado en ese momento y el Partido Comunista lo acompañó. Por otro lado, había que ver si efectivamente lo de la inyección, lo del elemento que se le aplica al poeta era efectivo, si había veracidad, entonces se llega al doctor, se llega a la enfermera.
Ahora, la clínica no tenía muchos elementos, no ha cooperado lo suficiente, porque dice que muchos de los antecedentes ya no los tiene, la ficha clínica tampoco la tiene, o sea, esto se ha reconstruido más que nada por testigos que estaban en ese minuto enla Clínica Santa María, y así se pudo ir recopilando información, porque este doctor dice que atiende a don Neruda, que estaba sufriendo, que tenía una cierta crisis, pero eso es lo que él explica, que le aplica la inyección y después lo deja en manos de otro doctor, y a ese doctor se lo está tratando de ubicar.
Entonces, en razón de esos parámetros de ir investigando las situaciones es que se va logrando que lo que al menos dice Araya tiene cierto grado de verosimilitud, porque efectivamente él es detenido, es llevado al estadio, y hay varios de los elementos que él incorpora en su declaración que son comprobados en el tiempo.
Lo otro hay que verlo desde el punto de vista técnico, que ya sería ver si es efectiva o no la aplicación de una sustancia distinta y si con una exhumación puede comprobarse, porque, además, don Pablo Neruda fue sepultado y después exhumado, hubo una reducción y la reducción se llevó a Isla Negra, en definitiva, lo que vamos a encontrar si fuéramos y exhumáramos sería la reducción, y hay que ver si de esos restos es posible llegar a colegir que efectivamente pudo haber una sustancia distinta a la que se señala”.
- ¿Y el camino de la exhumación está avanzado?
“En este minuto estamos enviando toda la información, todos los antecedentes que tenemos y los que podamos recopilar, al Servicio Médico Legal a fin de que nos señale si con estos restos que tenemos es posible llegar a establecer que hubo una sustancia extraña. Si ellos nos dicen que sí, entonces, bueno, habría que resolver la exhumación”.
- Vuelvo al caso Frei. En ambos hay una coincidencia con la ficha médica. La de Frei desaparece durante 20 años y reaparece en el Hospital de la Universidad Católica y la de Neruda aún no ha podido ser encontrada. ¿Se sigue también esa pista?
“Sí, se sigue el camino de poder llegar a alguna documentación que tengala Santa Maríay que a lo mejor ellos mismos no sepan cuál fue su destino, pero si en algún momento se nos da una pista como para ubicar más información respecto de la situación de Neruda, va a ser seguida. Por ejemplo, tenemos una entrevista en una semana más con el embajador en Francia, don Jorge Edwards, quien habría sido amigo personal de él en el momento en que es operado en Francia y se le detecta este problema del cáncer a la próstata. Entonces, en definitiva, él podría dar los elementos sobre en qué hospital fue atendido y si hay algunos antecedentes médicos de don Pablo Neruda allá”.
- ¿Y si ese cáncer podría ser fulminante en dos días, como dicen los documentos oficiales que sucedió?
“Por ejemplo. Es que hay varios factores. Se produce una situación entre que lo van a buscar, según algunos testigos, con alguna crisis que tiene don Pablo, y lo trasladan en una ambulancia, pero en el trayecto entre Isla Negra y Santiago hay varios controles, se lo va controlando, entonces sería conveniente saber quiénes lo controlan y en qué estado físico se encontraba, como si por ejemplo él estaba en buen estado físico, si se veía bien o se veía crítico, porque el señor Araya dice que cuando llega ala Clínica SantaMaría no se veía como que él fuera a fallecer en un lapso muy corto, sin perjuicio de que igual podría darse el desenlace fatal”.
- ¿La versión del gobierno mexicano coincide con la de Araya?
“En cuanto al estado en que se veía, sí, no en cuanto a si él fue enviado a comprar una medicina [a Araya se le pide que vaya a conseguir unos medicamentos y cuando sale de la clínica, a las pocas cuadras, es detenido], detalles que agrega el señor Araya en su propia versión. Ahora, ya está comprobado que efectivamente le aplican una inyección, pero unos dicen que es dipirona y otros dicen que es otro elemento. Lo de México viene a reafirmar cómo se encontraba él físicamente un día antes de la muerte”.
- ¿Y lo que dice la señora Matilde Urrutia?
“Habría sido vital que ella hubiera podido declarar, pero sin embargo tenemos su propia versión. Existe un libro en el que ella hace sus afirmaciones, pero no hay muchos elementos de los que uno pueda sostenerse como para decir que ella afirmaba esto o lo otro.
Yo creo que, fundamentalmente, los elementos dentro del plano que estamos investigando están en la información que se pueda obtener de parte dela Clínica SantaMaría o de la gente que trabajaba allí, para saber en qué estado lo encuentran, porque, de acuerdo a la enfermera que lo atiende, el médico que señala que debe aplicarse un determinado remedio, todas esas cosas van a deducirse a partir de eso, lo otro se refiere a cómo lo vieron otras personas, que también existen diferencia de opiniones, cómo lo vieron en Isla Negra y demás. Yo fui allá [a Isla Negra] e interrogamos a varias personas acerca de cómo lo vieron cuando él ya regresa de Francia. Algunos lo veían bien, pero hay otras personas que dicen que lo ven más complicado, más atacado por el cáncer”.
- Pero, aparentemente, el cáncer ya había sido tratado y no era mortal en ese momento de su vida.
“En ese momento no, por eso esas son las versiones que se están contraponiendo”.
- ¿Cómo se afectaría el sistema jurídico chileno si se descubre que Neruda fue asesinado?
“Bueno, desde el punto de vista judicial, lo de Neruda fue algo oficial y que no fue investigado, de tal manera que desde ese punto de vista la versión oficial siempre indicaba que había muerto de cáncer y jamás hubo una investigación o se indagó la posibilidad de la participación de terceras personas en su muerte, de tal manera que el Poder Judicial llega a conocer este caso recién. Ahora, desde el punto de vista jurídico político, yo creo que va a tener consecuencias importantes”.
- ¿Puede derivar en la apertura de otras causas a partir de gente que se anime a revelar lo que conoce?
“Probablemente, y establecer responsabilidades de quienes pudieron haber intervenido en esos hechos. Si se da el caso de que el sistema para operar de un determinado servicio de inteligencia era este, puede haber ocurrido con muchas personas más”.
- Y puede arrastrar hacia arriba también, porque estamos hablando hasta ahora de quienes lo trasladaron, de quienes lo revisaron en el camino, de quienes estuvieron en el hospital, pero no de quienes, en todo caso, tomaron la decisión.
“Entiendo que, como todo servicio de inteligencia, y que me ha tocado investigar muchas causas de derechos humanos, obviamente que las instrucciones vienen de atrás, entonces, es efectivo que esto debería escalar a quienes tuvieron conocimiento”.
- Se sabe que Neruda intentaba salir de Chile para llegar a México, desde donde, y esto ya es especulación, intentaría formar una resistencia para sacar del gobierno a Pinochet.
“Efectivamente. Uno puede sacar muchas conclusiones del hecho de que por qué, cuál era la necesidad, si él estaba gravemente enfermo, por qué tenía que ser eliminado, cuál era la razón. Pero también me imagino que en el caso del presidente Frei se preguntaron lo mismo, por qué el presidente Frei era un objetivo. Ahora, el señor Neruda hubiera sido un obstáculo, porque estábamos justo en el período 73, un tiempo muy breve desde que había sido el golpe de Estado, imagino que existía todo uno momento en que los servicios de inteligencia trabajaban febrilmente respecto de ciertas personas”.
- Esto de que haya sido tan próxima al golpe su muerte, ¿es otro elemento de análisis o no se puede tomar como tal?
“Hay una situación que se produce y que es que los servicios de inteligencia en esa época no estaban organizados, estructurados orgánicamente como para reprimir en la forma en que lo hacela DINA, como lo hace el CNI. Los servicios de inteligencia, fundamentalmente, comienzan a trabajar y a operar con una sistema que van creando en el camino, porque los servicios de inteligencia como actúan hoy son otros sus parámetros, pero si llega el momento de un golpe de Estado, comienzan a organizarse para ver cómo reprimen en lo inmediato, y supongo que dentro de todas esas mentes febriles pudo haber alguien que pensó que ciertas personas eran un obstáculo, y había que actuar de una forma u otra”.
- Porque, siguiendo la suposición de que Neruda fue asesinado, ya había muerto Allende, atentar contra Neruda hubiera jugado internacionalmente en contra del gobierno de facto.
“Claro. Tantos años vivimos, en el caso del señor Frei en la idea de que él había muerto por un problema que se presentó en la operación, y que años después se diga esto no ocurrió así, significa que pudo haber un modus operandi que hacía parecer como una enfermedad que a uno lo iba llevando paulatinamente al deceso, sin embargo, esa enfermedad era utilizada como forma de acelerar la eliminación de la persona, pero esto no deja de ser una teoría”.
- ¿Ya hay personas acusadas o al menos sindicadas como participantes?
“No, hasta este momento no. El objetivo fundamental en este minuto es saber exactamente si Neruda pudo o no morir por efecto de alguna sustancia que le fue administrada.La Justiciatarda pero llega, y de alguna manera es posible revivir las cosas con una cierta sensibilidad, tomar decisiones, que a futuro la gente diga se hizo lo posible, los responsables pagaron, y lo fundamental es conocer la verdad, esa que gran parte de la sociedad nunca conoció, como esto del grado de acción que tenían los servicios de inteligencia y otros que no eran inteligencia pero que en forma independiente actuaban, reforzados por el poder que tenían, y creo que ahora, con todo esto, hasta las mismas fuerzas armadas captan el grado de ferocidad con que actuaron”.
La entrevista termina. El juez Carroza es un hombre cordial, y nos quedamos conversando unos minutos más. Antes de retirarnos, se nos permite acceder al expediente del caso Neruda. Son 400 páginas de una sola gran duda.

Fuente: MDZ

Cifras y argumentos sobre falacias del modelo chileno


Mitos neoliberales se fueron al suelo

Estudios, encuestas, datos económicos, revelan que la economía chilena no beneficia a la mayoría de los ciudadanos y afecta, con especial énfasis, a los estudiantes que cargan una pesada mochila financiera. Metas de supuesto avance con el neoliberalismo, planteadas por la dupla Concertación-Coalición por el Cambio, incumplidas.
Las movilizaciones estudiantiles han comenzado a liberar un cúmulo de contradicciones por décadas levantadas cual virtuosas estadísticas económicas. A la primera y más evidente, que está relacionada de forma directa con la educación, su calidad y su condición de servicio privado, hay otras variables económicas y sociales que desde la perspectiva de un estudiante aparecen, más que como futuro o proyección de vida, como abismo y negación. Porque tras el duro y oneroso trance del estudio superior, lo que se levanta en el horizonte es un territorio más lleno de contradicciones que de certezas.
Por donde se mire, el modelo de economía y sociedad levantado y publicitado durante más de dos décadas tanto por la derecha, hoy en el Gobierno, como por la actual oposición, emite todo tipo de señales de error, ya asumidas como una evidencia de su deterioro no sólo por el movimiento estudiantil, sino por gran parte de la ciudadanía. Lo que estamos observando y oyendo en estos días es el estruendo que hace al caer una gran escenografía que aparentaba progreso y desarrollo, derrumbe que ha quedado constatado en el poco aprecio que gran parte de la población le tiene al sistema y sus protagonistas. No sólo hay un rechazo al modelo neoliberal, también a sus instituciones y principales actores.
Hace unas semanas, el sondeo Latinobarómetro 2011 graficó, cuadró y ordenó lo que puede observarse en las calles chilenas, fenómeno que no ha sorprendido a estos expertos: Desde los orígenes de los sondeos, hace ya más de 15 años, la población chilena expresaba una molestia por aquel modelo económico y social tan elogiado por empresarios, políticos de todos los colores y funcionarios de organismos económicos internacionales.

LATIFUNDIO ESTILO BANANERO

No es modelo para aplaudir ni para seguir. Aquello fue un gran eslogan publicitario pagado por el sector privado para mantener al país en uno más de los latifundios de estas tierras australes. Bastó escarbar un poco bajo las elogiadas estadísticas macroeconómicas y los resultados empresariales para hallar indicadores peores que en las tradicionales repúblicas bananeras. “Los datos de Latinobarómetro 2011 muestran fehacientemente de qué manera el movimiento estudiantil ha reubicado a Chile muy por debajo del promedio de la región en una serie de indicadores significativos”, escribe Marta Lagos, directora del centro de investigaciones sociales. Un cúmulo de variables que hoy sostiene y justifica al movimiento de los estudiantes y se proyecta hacia otros grupos sociales. Porque -dice el estudio- “en la medida que pasan los días, empieza lentamente a crecer la percepción de que estamos ante algo más grande de lo que muchos quieren reducir”.
Esta encuesta resume nuestra percepción hacia el escenario actual y futuro. Y no puede ser más alarmante. El modelo insuflado desde la dictadura por todos los gobiernos como el único camino al progreso y al desarrollo, se cae a pedazos. Por un lado vemos las pancartas en las calles y oímos las consignas enrabiadas contra el sistema, por otra parte tenemos las estadísticas que ratifican la creciente ira.
Entre el 2010 y el 2011 la idea de progreso ha caído 26 puntos porcentuales, en tanto la satisfacción con la democracia y el gobierno unos 24 puntos, concluye el sondeo. También caen 18 por ciento las expectativas en un futuro mejor, y una mayoría estima que el 2012 será peor que este año en curso.
Los grandes mitos neoliberales se van al suelo. Baja un 14 por ciento la creencia que las privatizaciones han sido beneficiosas para el país y baja también la idea de que la economía de mercado es el único sistema para alcanzar el desarrollo. En fin, estos y otros indicadores están muy debajo de la media latinoamericana. La percepción de los chilenos es que aquí las cosas están peor.
Esta sensación tal vez se relacione con la siguiente afirmación de Marta Lagos: “La clase media emergente, que acaba de salir de la pobreza, no logra consolidarse en un mundo hecho para una clase media alta acomodada. Las condiciones no están dadas para que la clase media baja pueda competir y ganarse un lugar en la sociedad chilena. No hay meritocracia, importa el color de la piel, el mercado del trabajo no existe”.
Este es el mundo que los estudiantes han desenmascarado a través de sus protestas. Porque éste es un mundo al que no tienen interés de acceder, sino cambiar.

LA OCDE RATIFICA LA DESIGUALDAD

Si la percepción que tiene la ciudadanía ante sus instituciones puede ser dramática, lo son también los indicadores que periódicamente pergeña la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) para sus países miembros. Las diferencias entre Chile y los parámetros de esta organización son enormes.
La primera gran diferencia que podemos hallar entre los países de la OCDE y Chile es el producto per cápita, aun cuando ésta, según anuncia éste y anteriores gobiernos, se reduciría con más crecimiento. Chile registró un ingreso per cápita el año pasado de 14.460 dólares (7.663.800 pesos), lo que equivale a un ingreso per cápita mensual de 638.650 pesos. Esto significa que una familia de cuatro personas, según esta variable, tiene en Chile una renta mensual media de 2.554.600 pesos. Obviamente, algo aquí no refleja la realidad. Pero el problema no es la suma, sino su distribución.
Al comparar la distribución del ingreso de Chile con los países de la OCDE, la observación nos entrega un poco de claridad sobre la distorsión en el ingreso. Un informe de este organismo publicado el año pasado, aun cuando admite que las políticas públicas chilenas han logrado reducir los niveles de pobreza, mantiene diferencias insalvables respecto a la riqueza, ya que “el diez por ciento más rico de la población tiene ingresos 29 veces sobre los ingresos del diez por ciento más pobre”. En la OCDE, en tanto, el promedio es de solo nueve veces.
Todos los ministros de Hacienda de los últimos veinte años han especulado con el mito del desarrollo como el efecto directo del crecimiento económico. Desde Alejandro Foxley a Felipe Larraín, pasando, por cierto, por Andrés Velasco, han repetido el coro neoliberal del crecimiento y desarrollo vía rebalse. Tras veinte años de crecimiento, el producto chileno se acerca a los 250 mil millones de dólares, un diez por ciento de la población vive mejor que en las zonas ricas de los países más ricos, en tanto el resto se desvive para alcanzar el fin de mes.
Veinte años con el mismo discurso, que demostró sus reales objetivos. Tal como se leía en una pancarta manuscrita en una de las numerosas jornadas de protestas: “Chilenos, no era chorreo, era saqueo”. Desde la instalación del modelo, la transferencia de riqueza ha sido desde el trabajador al dueño del capital, y no a la inversa.

¿DESARROLLADOS? NO, ERA BROMA

Hacia la mitad de agosto apareció publicada en La Tercera una columna del economista Joseph Ramos, profesor y ex decano de la facultad de Economía de la Universidad de Chile, titulada con la pregunta “¿Chilenos desarrollados?”. El atractivo de este breve texto es que ponía en duda el mito neoliberal del desarrollo, el que para el ministro Larraín, el actual centinela del modelo, se cumpliría un poco más allá del 2016. Para aquel año, el producto chileno per cápita llegaría a 20 mil dólares anuales (9.800.000 pesos anuales, o más de 800 mil mensuales). Pero el Producto Interno Bruto (PIB) no es igual a bienestar. Aún así, concedamos el lugar común de políticos y oficiantes neoliberales que bienestar es similar al nivel de vida que tienen los ciudadanos de Miami y los europeos. Pero si volcamos ese nivel de vida a números, dice Ramos, tendríamos que elevar la renta media de los chilenos a unos 32 mil dólares, que es el producto per capita de un país de desarrollo medio-alto como España.
Seamos menos ambiciosos y pongamos como ejemplo a Portugal, con un PIB per cápita un poco superior a los 20 mil dólares. Hacienda ha repetido y jurado que creciendo al seis por ciento anual Chile llega muy luego a este nivel de desarrollo. No crecerá a ese ritmo por diversos motivos, pero aun creciendo a ese ritmo, tampoco llegará al desarrollo, al menos para la generación que hoy sale de la educación media y superior. Por qué. Por lo que todos ya hemos sufrido. Como dice el profesor Ramos, aunque alcancemos el nivel de España, la “mayoría de los chilenos quedaría con un nivel de vida lejos del que tiene un país desarrollado”. Quienes superarán con creces el nivel de España será el diez por ciento más rico de la población. Bajo este modelo neoliberal, que concentra y excluye, que el país crezca o se estanque poco le vale al 90 por ciento restante.
Chile puede alcanzar un producto per cápita de país desarrollado con la mayoría de sus ciudadanos en la pobreza. Para vencer esta contradicción, que es la que tiene a la gente en las calles, no basta con crecer. Es necesario, dice el profesor Ramos, “reducir a la mitad las desigualdades”.
Por este camino no llegamos a ninguna meta de las levantadas como zanahorias desde hace ya más de veinte años por la dupla Coalición-Concertación. Así es como estamos, nos constata otra vez la OCDE en un ranking sobre calidad de vida publicado este año, variable en la que Chile sólo supera a México y Turquía. Aun cuando en la mayoría de los aspectos medidos Chile aparece entre los últimos de la fila, en la variable que está en una posición que no puede ser peor es la relacionada con ingresos.
Bajos ingresos, trabajos precarios y alto desempleo, en especial entre los jóvenes. Si la tasa de desempleo juvenil ya era alta hace unos cinco años, hoy ya se acerca al 20 por ciento, guarismo que sin embargo no esconde la precariedad e informalidad de los trabajos ofrecidos a los más jóvenes. La macdonalización del empleo es extensiva y apunta a un círculo vicioso que va desde los call centers, la comida rápida al reparto de pizzas.
A este mercado laboral llega el endeudado estudiante. Un estudio realizado por Cenda para la Confech afirma que el endeudamiento total de un alumno que cursa una carrera de cinco años será de 7,3 millones de pesos y más de diez millones si estudia siete años en una carrera de costo promedio. Esta última cifra sube considerablemente y puede duplicarse fácilmente en el caso de alumnos de carreras largas y caras, como medicina, por ejemplo.
Teniendo en cuenta la oferta laboral, su informalidad, inestabilidad y el deprimido nivel de remuneraciones promedio, los futuros profesionales no ganarán lo suficiente para solventar estos dividendos. Es decir, dice Cenda, “aquí hay un castigo que se acarreará por gran parte de la vida laboral sobre aquellos que contrataron créditos, quienes en su mayoría provienen de sectores medios y populares”.
Si se piensa que durante la vida laboral se pagará con facilidad esa deuda, una encuesta aparecida a comienzos de noviembre realizada por el sitio Laborum.com nos ratifica el malestar de las calles. Un tercio de los egresados trabaja en actividades que no tienen relación con sus estudios, en tanto la gran mayoría, un 75 por ciento no está satisfecho con su sueldo y casi el 80 por ciento se cambiaría de empleo.

Paul Walder
El Ciudadano

sábado, diciembre 24, 2011

La muerte de Kim Jong-Il


Nuevamente la atención del mundo esta centrada en Corea del Norte. Esta vez, no se debe a nuevos ensayos nucleares, a la agitación imperialista, o a un enfrentamiento militar con Corea del Sur a lo largo de la frontera más militarizada del mundo. Esta vez, la razón es potencialmente más explosiva: la muerte de Kim Jong-Il.
El dictador de Corea del Norte había estado enfermo desde 2008, cuando sufrió un ataque. Poco después, se iniciaron los preparativos para dar paso a la transición del poder, un proceso que debería haber concluido en 2012. Pero el 19 de diciembre, la prensa estatal de Corea del Norte informó que Kim había muerto a las 8:30 am del día 17 de diciembre, a la edad de 69 años.
De acuerdo a la información oficial ofrecida, la causa de su muerte se debió a un ataque al corazón sufrido mientras viajaba en un tren, provocado por la fatiga de "trabajar muy duro para el pueblo de Corea del Norte." La demora en hacer público el anuncio podría ser un indicador de que existen divisiones dentro del régimen sobre cómo seguir adelante. De acuerdo a la experiencia del pasado, esto no es ninguna sorpresa.
Cuando el padre de Kim Jong-Il, Kim-Il Sung, fundador de Corea del Norte, murió en 1994, el país estuvo sumergido en tres años de caos interno e incertidumbre, mientras las facciones rivales en la burocracia lucharon entre sí por el control. Esto, a pesar de que Kim había sido preparado durante 20 años por su padre para sucederle. Sin embargo, una serie de factores externos empeoraron la transición. El colapso de la URSS en 1991 condujo a Corea del Norte a un declive económico y a un período de espantosa austeridad. Esto fue seguido por las inundaciones de "proporciones bíblicas" en 1995, que acabaron con las reservas de granos y destruyeron amplias extensiones de tierra cultivable. De una población de 22 millones de personas, se estima que pudieron haber muerto entre 900.000 y 3,5 millones en la hambruna de la primera mitad de los 90´s.
Una repetición debe ser evitada a toda costa. Una suave transición ha sido preparada de antemano. Pero las cosas nunca son tan sencillas, sobre todo en una burocracia tan monstruosa como la de Corea del Norte. Temeroso de permitirle a uno de sus hijos construir una base poderosa en su contra, antes de que estuviera listo para hacerse a un lado, Kim Jong-Il esperó hasta el último momento para nombrar a un sucesor, casi dos años después de su primer ataque. No fue hasta septiembre de 2010 que su hijo Kim Jong-Un, a sus entonces 27 años de edad, fue designado como "el gran sucesor." Sin embargo, Un no tiene experiencia militar, a pesar de haber sido nombrado general de cuatro estrellas y Vicepresidente de la Comisión Militar Central del Partido de los Trabajadores de Corea. En un país dominado por la burocracia militar, ¿Seguirá el ejército al mando de alguien tan inexperimentado como Un? ¿Será Un capaz de mantener las riendas del poder sin la implosión del régimen?
En palabras de Mike Chinoy, del Instituto Norteamericano de China, "¿Cómo puede alguien que aún no ha cumplido los 30 años, ganar la lealtad, el respeto y la autoridad de mando sobre el enraizado aparato partidista, la arraigada burocracia militar y los altos funcionarios del partido, que han ocupado sus posiciones durante mucho tiempo? ".
Los analistas geopolíticos en Straftor plantearon la siguiente posibilidad:
"El tío de Kim Jong-Un, Jang Song Thaek, gobernará tras bambalinas mientras Kim Jong-Un es entrenado para el puesto. Al igual que la transición de Kim-Il Sung-Kim Jong-Il, es probable que Corea del Norte se cierre internamente en los próximos años, mientras la élite del país logra adaptarse al nuevo equilibrio de poder. En toda transición, están los que ganan y los que tienden a ser privados de sus derechos, y esta competencia puede llevar a conflictos internos."

¿Restauración del capitalismo?

El capitalismo ha logrado instalarse abiertamente en casi todo el mundo. En una época de crisis económica y de competencia perro-come-perro, cada pulgada del mercado internacional es disputada como chacales hambrientos por un hueso. Corea del Norte, a pesar de todas las complicaciones, es una de las "últimas fronteras" del capitalismo, y todos los grandes actores en la región -EE.UU., China, Japón y Corea del Sur- están revolviéndose para establecer sus reglas, siempre y cuando el régimen se caiga en pedazos. Todos quieren "su" capitalismo para obtener ventajas.
Debido a la confidencialidad extrema del estado norcoreano, es difícil formarse una idea clara de la situación en el país. Es difícil, por ejemplo, saber cuán tan profundamente ha penetrado el capitalismo. Como se ha explicado en artículos anteriores, la restauración gradual de las relaciones de propiedad capitalista han avanzado en el "Reino Ermitaño" durante algún tiempo a través de China. Un articulo de septiembre de 2010, titulado El capitalismo chino inunda Corea del Norte, publicado en las noticias de Duluth Tribune, incluyó este interesante comentario de un periodista sobre el terreno:
"Mientras que la aceptación interna de la eventual administración de Kim Jong Un parece confusa, las posibilidades de desarrollo de Corea del Norte dependen ampliamente del respaldo y la inversión china. El Partido Comunista Chino se ha mantenido firme en su apoyo a la liberalización económica de Corea del Norte, no sólo para evitar su colapso, sino porque China puede ganar dinero en el proceso. Los líderes en Beijing constantemente envían delegaciones comerciales y turísticas hacia el Norte, derraman toneladas de residuos industriales en Corea del Norte, y ayudan a las empresas chinas a amarrar lucrativos contratos en la industria minera. Después de haber examinado casi la totalidad de las más de 800 millas de longitud de la frontera norcoreana con China en los últimos años, puedo afirmar con seguridad que ningún tipo de presión estadounidense va a posicionar a China del lado de EE.UU. en contra de Corea del Norte, o hacer que China respalde enérgicas sanciones en contra de su vecino. El modelo chino, poco a poco ha ganando terreno en Corea del Norte, y algunos empresarios coreanos se han desarrollado a lo largo de la frontera. Por otra parte, las propias necesidades locales de China requieren que el desarrollo de la región fronteriza tenga prioridad sobre las medidas punitivas que podrían frenar el desarrollo nuclear de Corea del Norte."
Una cosa es segura: hay enormes intereses en juego, sea cual sea el resultado de la transición. La burocracia gobernante tiene todo que perder si el país se derrumba. Seguramente hay quienes desean mantener el statu quo, con el fin de seguir recibiendo los beneficios de la administración estatal de la economía. Otros están muy interesados ​​en la adopción de la "vía china"-con la ayuda directa de los propios capitalistas chinos. Este es un proceso que parece haberse acelerado en el periodo reciente.
Otra capa puede ser atraída por el acercamiento o la reunificación con el Sur, con la esperanza de ser los beneficiarios de la venta de los activos estatales y la apertura del país a Corea del Sur y el capital norteamericano. Durante un periodo, en la década del 2000, las relaciones entre el Norte y el Sur se desbloquearon, debido a la "política del sol" que fue adoptada por la capitalista Surcorea. En combinación con programas de ayuda alimentaria, la política conciliadora del presidente Roh Moo-Hyun fue la "zanahoria" utilizada para sacar al norte "del frío". Sin embargo, el actual presidente Lee Myung-Bak, ha practicado una línea dura hacia el Norte, la política "de palo". Sin embargo, algunos analistas de Corea del Norte ven la reciente renovación de las conversaciones con los EE.UU., sobre el programa nuclear del país, como un intento de llegar a Occidente con el fin de reducir la dependencia de China, o por lo menos, como un intento de ganar influencia respecto a la relación con la burocracia china.

El papel de las masas

No hace falta decir que el régimen de Corea del Norte no tiene nada que ver con el auténtico comunismo. Se trata de una horrible y deformada caricatura de los primeros años de la Unión Soviética, después de la revolución de 1917, que fue el gobierno más democrático y representativo en la historia de la humanidad. La dinastía de la familia de Kim adoptó el modelo estalinista, con una sofocante burocracia totalitaria y la virtual esclavitud de la masa de la población.
La única solución real se puede alcanzar mediante una revolución política de los trabajadores del Norte para derrocar a la burocracia, junto con una revolución social de los trabajadores del Sur, con el fin de combinar recursos y establecer las bases para una economía socialista. Desafortunadamente, ese no es un probable escenario en el período que se avecina. Décadas de la más increíble propaganda interna y la regimentación de la vida cotidiana han tenido un efecto evidente.
Sin embargo, la tradición heroica y revolucionaria de los trabajadores coreanos, tanto en el Norte como en el Sur, son parte de la memoria colectiva de la región. A raíz de la Segunda Guerra Mundial, hubo una tremenda ola revolucionaria que sacudió la península coreana. Para detenerla, el país fue dividido en forma criminal por imperialismo de EE.UU. y el estalinismo ruso.
A pesar del adoctrinamiento, todavía está por verse cómo responden las masas de Corea del Norte a la muerte de Kim Jong-Il, y sobre todo, a la transición. Algunos informes, indican que su instinto combativo no ha sido completamente extinguido. Esto es lo que AsiaNews informó en febrero de este año:
"La ola de protestas que comenzó en el Medio Oriente parece haber llegado incluso a Corea del Norte. Por primera vez en la historia del régimen estalinista, grupos de ciudadanos comunes han protestado en tres ciudades exigiendo alimentos y electricidad, dijeron las fuentes. La situación es excepcional y confirma las dificultades económicas, especialmente en relación al suministro de alimentos, que las personas tienen que soportar bajo el gobierno comunista.
"De acuerdo al periódico Chosun-Ilbo de Corea del Sur, citando información proveniente de Corea del Norte, estallaron manifestaciones el 14 de febrero, dos días antes del cumpleaños de Kim Jong-Il, en las ciudades de Jongju, Yongchon y Sonchon, no lejos de la frontera con China.
"El Departamento de Seguridad del Estado (el organismo todopoderoso bajo el control directo de Kim Jong-Il) investigó el incidente pero no pudo identificar a las personas que comenzaron el movimiento porque se encontraron con un muro de silencio.
"En el pasado, cuando se presentaba un incidente de tales características, las personas solían informar a las fuerzas de seguridad sobre lo acontecido, pero ahora se están cubriendo el uno al otro", dijo la fuente.
"Fuentes Coreanas han informado a AsiaNews que esto representa una grieta en la mentalidad imperante. "Diversos factores están en juego. Por un lado, el empeoramiento de la situación económica del país es sin duda una de las razones, de hecho, el régimen es incapaz de alimentar a la mayoría de su gente. Por otro lado, los reajustes en el poder para preparar a Kim Jong-Un para suceder a su padre en el trono en Pyongyang".

"El joven Kim es 'temido por la población', dijo la fuente. 'Lo ven como un loco sediento de sangre. Casi todos piensan que él estuvo detrás de los ataques militares contra el ejército surcoreano en Cheonan y a una isla bajo control de Corea del Sur, lo que llevó a las restricciones de la ayuda humanitaria desde el Sur. Esto ha agravado aún más los niveles de vida en el Norte. Los norcoreanos están dispuestos a hacer cualquier cosa para detener la sucesión' ".
A pesar de la evidente inclinación derechista del artículo, los hechos reportados son de tremendo interés sintomático. No es una casualidad que las protestas reportadas se hayan producido cerca de la frontera china, donde el brazo fuerte de Pyongyang podría tener su punto más débil.

¿Y ahora qué?

La "democrática" dictadura capitalista que gobierna en Corea del Sur ha sido beneficiada por el "diablo en las puertas" de Corea del Norte. Se han gastado grandes sumas de dinero para militarizar el país, los derechos sindicales han sido pisoteados y el país entero ha estado permanentemente en pie de guerra desde el cese al fuego en 1953 que puso fin a las hostilidades de la Guerra de Corea, aunque técnicamente la guerra continúa. Todo esto ha sido justificado por la amenaza del Norte. Hasta el día de hoy, decenas de miles de tropas de EE.UU. siguen estacionadas en el Sur.
La pluma en el sombrero de la dominación corporativa del Sur es el tratado de libre comercio recientemente firmado con los EE.UU. Sin embargo, si el Norte se derrumba o se transforma en alguna especie de satélite estadounidense, de Corea del Sur o chino, ¿Cómo podrán seguir justificando la despiadada explotación y la represión ejercidas en contra de los trabajadores de Corea del Sur? Los trabajadores en el Sur han luchado como tigres para resistir las intenciones capitalistas de convertir al país en un simple maquila para las multinacionales de EE.UU. y Corea.
Hasta el momento, no hay señales de acción militar inminente por parte de los enormes ejércitos de Corea del Norte. Esto parece indicar que el ejercito está "en posición de firmes" detrás de Kim Jong-Un, al menos por el momento. Pero las cosas pueden cambiar rápidamente en cualquier momento. No se puede descartar una "agresión" desesperada por parte del régimen de Corea del Norte, aunque no es el escenario más probable.
Altos diplomáticos y líderes de los EE.UU., China, Japón y Corea del Sur han expresado sus condolencias y están tratando de posicionarse en el norte. "La gran hipócrita", Hillary Clinton, dijo estas dulces y amables palabras para el pueblo del Norte, después de décadas de sanciones y amenazas de EE.UU.: "Estamos profundamente preocupados por el bienestar de la gente de Corea del Norte y nuestros pensamientos y oraciones están con ellos durante estos difíciles momentos".
A un lado de la península, EE.UU., Corea del Sur y el imperialismo japonés, se estarán relamiendo los bigotes, a pesar de la incertidumbre de los próximos días. Pueden ser pacientes. Han esperado mucho tiempo para poner sus manos en el Norte, pueden esperar un poco más. Pero no pueden ser demasiado pacientes: China también está esperando en el flanco y ya tiene sus garras profundamente clavadas en el Norte. Si la reunificación con el Sur se presenta de la misma manera que la reunificación alemana, el flujo de trabajadores hacia el sur se utilizará para disminuir los salarios y las condiciones de vida, y la población del norte será considerada como ciudadanos de segunda clase o peores. El veneno del "norteño vs sureño" sería utilizado en un intento de dividir y someter a la clase obrera. Pero con el tiempo, el único camino será que los intereses de clase colocarán a la unidad del proletariado por delante, en contra los explotadores comunes!
En el otro lado de la brecha, los capitalistas chinos y su burocracia colosal movilizarán todos sus recursos para evitar la implosión completa del país, justo en su frontera, y para mantener en su poder el dominio de la situación. Corea del Norte es un elemento de respaldo de vital importancia para la geo-política de seguridad de China. Simplemente no pueden permitir que el norte sea absorbido por el sur, porque significaría tener decenas de miles de tropas de EE.UU. justo en su frontera. Mike Chinoy, del Instituto Norteamericano de China hizo la siguiente afirmación contundente: "Los chinos han dejado muy claro que no van a permitir que Corea se vaya por el desagüe. Harán todo lo que tengan que hacer para mantener al país en pie".
Los informes de los medios de comunicación reportan que la gente del norte está afectada por el dolor. Esto bien puede ser el caso. Décadas de adoctrinamiento les han dejado completamente desorientados sin el "Querido Líder". Pero la situación real, seguramente será mucho más compleja con el paso del tiempo. En los últimos años, cada vez más norcoreanos han deseado vivir en el exterior. Muchos han huido a China en busca de una vida mejor. Algunos lo han hecho rumbo al Sur. El mercado negro -literalmente debajo de la masiva plaza Kim Il-Sung en Pyongyang- de los DVDs piratas y otros artículos de China y del Sur, ha penetrado en el norte.
En un análisis final, el desgastado régimen norcoreano no puede desarrollar los medios de producción. Es completamente dependiente de la ayuda exterior para sobrevivir, sobre todo de la China capitalista. Esta ayuda trae consigo una dinámica propia. La ilusión de que viven en un "paraíso socialista" se ha disipando desde la hambruna masiva de la década de 1990. La lenta, pero constante invasión del capitalismo también ha jugado su papel, aunque en este momento es imposible saber con exactitud hasta qué porcentaje ha penetrado en la administración estatal de la economía.
Aún quedan muchas incógnitas. Pero no importa lo complejo que una situación pueda parecer, la lucha de clases es el motor de la historia y eventualmente encontrará una manera de manifestarse. Es probable que las masas de Corea del Norte se encuentren en un estado de shock y temor ante lo que está por venir, pero eso no durará para siempre. Los trabajadores en el Sur también están en un estado tenso de "esperar y ver", que tampoco pueden resistir. Finalmente, sólo los propios acontecimientos confirmarán cómo se desarrollarán las cosas en la península coreana en los próximos días, meses y años. Invitamos a nuestros lectores an estar atentos a los próximos acontecimientos históricos y a los análisis de la situación en Corea. Tal y como se desarrollen los acontecimientos, vamos a continuar desarrollando nuestra visión.

John Peterson

La segunda guerra fría y América del Sur

Viraje estratégico de Estados Unidos

La “guerra contra el terror” inaugurada por George W Bush tras los atentados del 11 S, está siendo desplazada por la “contención” de China, la nueva estrategia delineada por el Pentágono para cercar y, eventualmente, ahogar a la potencia asiática, con el objetivo de mantener la supremacía global. El último viraje del imperio involucra de lleno a Sudamérica.
Noviembre fue el mes en que se plasmó el cambio de rumbo. “En nuestros planes y presupuestos para el futuro, vamos a asignar los recursos para mantener nuestra fuerte presencia militar en esta región”, dijo Barack Obama el 17 de noviembre ante el parlamento australiano. En la edición de noviembre de Foreing Policy, la secretaria de Estado Hillary Clinton hizo algunas precisiones. “Durante los últimos diez años hemos dado ingentes cantidades de recursos a Irak y Afganistán. En los próximos diez años, debemos ser inteligentes acerca de dónde invertimos nuestro tiempo y energía, de forma que logremos la mejor posición posible para mantener nuestros liderazgo”.
En la próxima década, según Clinton, Estados Unidos realizará la mayor inversión “diplomática, económica, estratégica y demás, en la región Asia-Pacífico”. Como en toda estrategia estadounidense, lo militar y lo económico forman una sola política. En lo inmediato, se adelanta el despliegue de 250 infantes de marina en Darwin (norte de Australia), hasta alcanzar los 2.500 militares. Hasta ahora el Pentágono cuenta con bases en Japón, Corea del Sur, Taiwán y Guam, pero al establecerse en Australia forma una tenaza sobre la salida de China al océano Pacífico. Esta política forma parte del objetivo no declarado de formar una “OTAN del Pacífico” para presionar y cercar a China.
El segundo paso no es militar sino económico. Consiste en un ambicioso acuerdo de libre comercio entre varios países del Pacífico denominado Acuerdo de Asociación Trans-pacífico, TPP(1). Hasta ahora se trata de nueve países: Australia, Brunei, Chile, Estados Unidos, Malasia, Nueva Zelanda, Perú, Singapur y Vietnam. China es dejada fuera y se consigue romper la ASEAN, la Asociación de Naciones del Sureste Asiático, donde ese país tiene un papel hegemónico.
Según Michael T. Klare, el nuevo centro de gravedad de la política estadounidense supone el abandono de Oriente Medio, que durante medio siglo fue su prioridad, para focalizarse en la que considera su principal adversaria. La lectura del Pentágono sostiene que el talón de Aquiles de la economía china son las importaciones de petróleo que llega al país necesariamente por el Mar del Sur de China, donde Obama prevé su mayor despliegue militar(2).
La respuesta de China sigue consistiendo en apostar al diálogo, pero fortaleciendo sus estructuras defensivas. A diferencia de las potencias occidentales, que ascendieron a caballo de las guerras de conquista (desde España y Portugal hasta Inglaterra y Estados Unidos), el ascenso chino se basa en el comercio y la diplomacia. Esa diferencia es a la vez su potencial mayor, en la medida que no es una potencia agresiva, pero a la vez su debilidad, ya que puede ser desplazada por la fuerza como sucedió en Libia.

Debilidad estructural

La crisis de los Estados Unidos es más grave que la que atraviesa la Unión Europea. “Ahora insolvente se tornará ingobernable, arrastrando a los estadounidenses y a quienes depende de él a conmociones económicas, financieras y monetarias, geopolíticas y sociales violentas y destructivas”, asegura el Boletín Europeo de Anticipación Política (Geab No. 60, 16 de diciembre).
En los próximos cuatro años el país que diseñó el mapa global desde 1945, vivirá siempre según este pronóstico, “parálisis institucional y la desarticulación del bipartidismo tradicional”, una espiral de recesión-depresión-inflación y “la descomposición del tejido socio-político”. Es cierto que semejante pronóstico suena apocalíptico, pero ¿quién hubiera pensado que la agencia S&P llegaría a degradar la calificación del país?
A escala internacional Estados Unidos cada vez tiene menos aliados. Immanuel Wallerstein recuerda que sólo en noviembre y la primera mitad de diciembre la Casa Blanca “ha tenido confrontaciones con China, Pakistán, Arabia Saudita, Israel, Alemania y América Latina” (La Jornada, 18 de diciembre). Los fracasos se extienden: Obama envió al secretario del tesoro, Timothy Gethner a Europa para sugerir alternativas a la crisis y fue olímpicamente ignorado; fue humillado por Pakistán y luego por Irán, ya que al parecer el drone que “aterrizó” en ese país no sufrió un accidente sino que fue bajado por un ciberataque.
Pero la situación más grave es la interna. Un estadounidense de cada seis recibe bonos de alimentación así como uno de cada cuatro niños; el 57 por ciento de los niños vive en hogares pobres; el 48,5 por ciento vive en grupos familiares asistidos por el Estado, frente a un 30 por ciento en 1983 (The Economic Collpase, 16 de diciembre). Llama la atención el agravamiento de la situación social en pocos años: desde 2007 el ingreso familiar cayó un siete por ciento; en zonas de California el precio de la vivienda cayó un 63 por ciento, el precio promedio de una casa en Detroit es de 6.000 dólares y el 18 por ciento de las viviendas de Florida están vacías. Un niño de cada cinco experimenta episodios de vida en la calle.
Todos los días aparecen datos nuevos que revelan el deterioro social y moral del país. La revista Pediatrics, de la Academia de Pediatras, reveló que a los 23 años uno de cada tres estadounidenses ha sido arrestado en algún momento. En 1965 sólo lo habían sido el 22 por ciento a esa edad (USA Today, 19 de diciembre). Según los autores del estudio, esos datos no significan que haya una mayor criminalidad juvenil, sino que “obedece a leyes más estrictas” ante situaciones de escándalo público o consumo de sustancias prohibidas. Concluyen que los arrestos de jóvenes tienen consecuencias nefastas para su desarrollo y alientan “comportamiento violento y conductas antisociales”. Si el estudio discriminara los arrestos que sufren negros e hispanos, los resultados hubieran sido escandalosos.

Un cerco a la integración

En una situación interna e internacional tan grave, el viraje estratégico puede, como señala Klare, llevar al mundo a una situación “extremadamente peligrosa”. En su opinión, compartida por otros analistas, estamos ingresando en una nueva guerra fría que no excluye “el dominio y la provocación militar” con fuerte énfasis en el control de los hidrocarburos del planeta. Si el objetivo de Estados Unidos frente a China consiste en “poner de rodillas a su economía, mediante el bloqueo de sus vías de suministro de energía”, esa política -que no es nueva- es de hecho un anuncio para el resto del mundo. Recordemos dos hechos: Sudamérica aporta el 25 por ciento del petróleo que importa Estados Unidos y los mayores descubrimientos de crudo en la última década están en aguas territoriales brasileñas.
Las exportaciones de Venezuela al país asiático están en el punto de mira. Las inversiones chinas en ese país acumulan 40 mil millones de dólares desde 2007. PDVSA exporta 430 mil barriles diarios de petróleo a China pero las estatales chinas CNPC y Sinopec planean multiplicar por diez su bombeo de crudo en el país hasta llegar a 1,1 millones de barriles diarios en 2014, para lo cual han recibido cinco áreas en la Faja Petrolífera del Orinoco, que requieren unos 20.000 millones de dólares en inversiones cada una (Reuters, 20 de diciembre).
El viraje de Obama cuando insiste en que “Estados Unidos es un país del Pacífico”, cuando siempre había sido un país Atlántico, no sólo implica tejer alianzas en Asia sino también en América Latina. El TPP incluye a Chile y Perú y espera involucrar a México. En paralelo, el 5 de diciembre en Mérida los cuatro países de la Alianza del Pacífico (Chile, México, Perú y Colombia) acordaron lanzar el bloque comercial en junio de 2012, crear un mercado integrado con sus bolsas de valores y eliminar las tarifas aduaneras luego de 2020.
Para Andrés Oppenheimer, “veremos una división de facto de América Latina, entre un bloque del Pacífico y un bloque del Atlántico” (La Nación, 13 de diciembre). El análisis conservador desestima la recién estrenada Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC). En efecto, el columnista de La Nación (que además escribe en The Miami Herald y es analista político de CNN en Español) sostiene que en la cumbre presidencial de Caracas hubo apenas “discursos poéticos sobre la unidad regional”, sin ninguna consecuencia económica.
Una de las tendencias más importantes que se ha disparado luego de la crisis de 2008, es hacia la conformación de bloques regionales y comerciales, que redunda en un retorno del proteccionismo. La reciente decisión del Mercosur de elevar el arancel externo del 14 al 35 por ciento, forma parte de esa tendencia que busca proteger a la región ante la exportación de los países centrales de los productos que no pueden consumir internamente.
Con la crisis se redujo la demanda de Europa y Estados Unidos, lo que está provocando que países emergentes como China e India acumulen stocks de mercancías que pretenden colocar a precios muy bajos, lo que está afectando las industrias de la región, en particular a Brasil y Argentina. Ciertamente, los países que no tienen un importante sector industrial, como Paraguay y Uruguay, no se benefician con ese tipo de medidas pero, sin embargo, pueden obtener mayores cuotas de exportación hacia los grandes de la región.

Brasil toma nota

En Brasil ha ganado espacio la convicción de que debe enfrentar nuevas amenazas y que ellas provienen de los países centrales, en particular de los Estados Unidos. Lo interesante es que esa convicción atraviesa a toda la sociedad, arriba y abajo.
Cinco días después del discurso de Obama ante el parlamento australiano, militares brasileños filtraron a la prensa un informe interno del Ministerio de Defensa sobre la situación del equipamiento de las diversas armas. La prensa conservadora tituló que buena parte del material bélico se había convertido en “chatarra” y aseguraba que de las cien embarcaciones de combate de la Marina apenas 53 están navegando y que sólo dos de sus 24 aviones A-4 están operativos (O Estado de Sao Paulo, 22 de noviembre).
La difusión del “informe secreto” se produjo en un momento en que diversos sectores, incluyendo al ministro de Defensa, Celso Amorim, presionan para acelerar el proceso de modernización y equipamiento de las fuerzas armadas, y muy en particular de la Marina encargada de defender la Amazonia verde y la azul, en referencia a las dos principales riquezas del país: biodiversidad y petróleo. Otro de los puntos neurálgicos es la compra de 36 cazas a Francia que lleva más de dos años paralizada. Sin embargo, la prensa no destaca los importantes avances que se están realizando en la fabricación de submarinos con importante transferencia de tecnología.
El general de brigada (retirado) Luiz Eduardo Rocha Paiva, miembro del Centro de Estudios Estratégicos del Ejército con amplia trayectoria militar y formación estratégica, analizó el reciente viraje estadounidense advirtiendo que la “pérdida de espacios” de la superpotencia y sus aliados repercute directamente sobre la región sudamericana y Brasil. Vale la pena reproducirlo extensamente porque refleja la mirada de buena parte de los gobernantes, militares o no, del país. “Los conflictos llegaron a nuestro entorno. El fracaso o éxito limitado de Estados Unidos y sus aliados en áreas distantes resultarán en presiones para imponer condiciones que aseguren el acceso privilegiado a las riquezas de América del Sur y del Atlántico Sur” (O Estado de Sao Paulo, 20 de diciembre).
Rocha Paiva destaca la creciente influencia de China en la región, la presencia de Rusia e Irán en países como Venezuela y concluye: “Los Estados Unidos reaccionarán a la penetración de rivales en su área de influencia y eso afectará el liderazgo de Brasil en el proceso de integración regional y en la defensa de su patrimonio y su soberanía”. Por eso apuesta a reforzar el poder militar defensivo ante la nueva realidad.
Tan interesante como su mirada global es la que hace de la región. “No son los vecinos la razón para reforzar el poder militar del país, sino su ascenso como potencia económica global, la participación destacada en el comercio mundial y la codicia por nuestros recursos y posición geoestratégica. Todo eso sacó a Brasil de su posición periférica y lo colocó en las rutas de cooperación y conflicto”. Concluye advirtiendo que a Brasil le puede suceder en el siglo XXI, lo mismo que a China en el XIX: “Las potencias rivales se pueden unir para presionar y amenazar al país” (3).
Esa percepción sobre las amenazas que enfrenta es compartida por una porción mayoritaria de los brasileños. Un reciente estudio del Instituto de Investigación Económica Aplicada (IPEA por sus siglas en portugués), entre casi cuatro mil personas, muestra que el 67 por ciento piensa que existe una amenaza militar extranjera por los recursos naturales de la Amazonia. Un 63 por ciento cree que los yacimientos hidrocarburíferos en el mar pueden sufrir ataques militares externos(4).
Más interesantes aún son las respuestas cuando la pregunta gira en torno a qué país puede constituir una amenaza militar en los próximos veinte años para Brasil. El 37 por ciento piensa en Estados Unidos. Muy lejos, Argentina con el 15 por ciento. Debe destacarse que esa era la hipótesis de guerra más probable desde la independencia hasta la creación del Mercosur, incluyendo a la dictadura militar (1964-1985) cuyo despliegue principal era en dirección sur. Esta percepción revela que los cambios en la estrategia militar de Brasil, que se plasmaron en la última década y sobre todo en la “Estrategia Nacional de Defensa”, publicada en 2008, cuenta con un amplio respaldo social.
El posicionamiento estratégico de un país madura en tiempos largos y la aplicación de la nueva estrategia se hace realidad en décadas. El Brasil de arriba y el de abajo coinciden en que el país es vulnerable ante probables amenazas externas. Tal vez esa percepción haya comenzado a cambiar el 8 de diciembre, cuando dos soldadores del equipo franco-brasileño que trabajan en los astilleros de la DCNS (Direction des Constructions Navales) en Cherburgo, de un total de 115 aprendices que están trabajando para transferir tecnología, comenzaron a soldar la última unión de las secciones del primero de los cuatro submarinos Scorpene destinados a Brasil (DefesaNet, 8 de diciembre). En adelante, se fabricarán en el astillero de la Marina en Rio de Janeiro.

Notas

1) El Acuerdo Estratégico Trans-Pacífico de Asociación Económico fue firmado en 2005 por cuatro países: Brunei, Chile, Nueva Zelanda y Singapur. Los demás, incluyendo Estados Unidos, se fueron incorporando progresivamente.
2) “Jugando con fuego. Obama amenaza a China”, Sin Permiso, 11 de diciembre.
3) Se refiere a las dos guerras del opio cuando Inglaterra y Francia se unieron contra China.
4) “O sistema de indicadores de percepçao social. Defensa Nacional”, IPEA, 15 de diciembre de 2011.

Raúl Zibechi, periodista uruguayo, es docente e investigador en la Multiversidad Franciscana de América Latina, y asesor de varios colectivos sociales.