lunes, abril 14, 2008

A 37 años de la fundación del FA... Cambia todo Cambia


Mario Rossi Garretano

En el año 1971 surge el Frente Amplio, la fuerza política que hoy gobierna en nuestro país, tras décadas de lucha de varias generaciones que no midieron esfuerzos y sacrificios y aglutinados por un programa histórico de liberación nacional y social.
Programa que fue desmantelado a partir de 1985, cuando se inicia la restauración democrática burguesa después del período de la dictadura terrorista de estado, estableciendo además la marginación de la bases en las estructuras organizativas y la alianza hasta "con las víboras", al decir de José Mujica, para tratar de llegar de cualquier manera.
Programa que mantiene plena vigencia en este período histórico, pues una ola de medidas antiimperialistas y antioligárquicas y de nacionalizaciones recorre Latinoamérica en los gobiernos de Bolivia, Ecuador, Venezuela, Argentina, Nicaragua, etc; sin desconocer el carácter de clase burgués de esos gobiernos.

1971 – AÑO DE LA DECLARACIÓN CONSTITUTIVA Y DE LAS BASES PROGRAMÁTICAS.

La Declaración Constitutiva del 5 de febrero de 1971 establecía textualmente: "la oligarquía…enajenaron progresivamente – por la sumisión a las recetas del Fondo Monetario Internacional, por el endeudamiento externo, por la contratación de empréstitos lesivos, por la evasión criminal de divisa – la soberanía del país.
Todo ello para mantener intactos los privilegios de una minoría apátrida y parasitaria en alianza con las fuerzas regresivas del poder imperial. La República camina hacia la ignominiosa condición de una colonia de los Estados Unidos"
En las Bases Programáticas se establece: "…Denuncia del papel pasado y presente de la OEA como instrumento del imperialismo …Rechazo de la política del FMI y de otros organismos internacionales que actúen con similar orientación (BM y BID). Negociar la reconversión de la deuda externa, postergando los pagos y eliminando sus condiciones leoninas, para destinar, durante el período necesario, toda la capacidad de ahorro nacional a las finalidades económicas y sociales de este programa. En caso de no obtenerse la reconversión, adopción de las medidas unilaterales necesarias para el logro de los fines enunciados. Exigencia de reinversión de los beneficios de las empresas radicadas en el territorio nacional. Control y restricción al exterior de royalties, intereses y amortizaciones de deudas"
En otro parágrafo de la declaración constitutiva se dice: "...expresamos nuestro hondo convencimiento de que la construcción de una sociedad justa, con sentido nacional y progresista, liberada de la tutela imperial es imposible en los esquemas de un régimen dominado por el gran capital. La ruptura con este sistema es una condición ineludible de un proceso de cambio de sus caducas estructuras y de conquista de la efectiva independencia de la nación"
37 años más tarde, la Carta de Intención firmada con el FMI el 8 de junio del 2005 pasará a la historia como la más entreguista, donde se fija el pago puntual de la deuda externa, la privatización del patrimonio nacional y estatal, la reforma del estado desmantelándolo, la reforma impositiva que saquea los ingresos populares, etc.
El tratado de Protección de Inversiones y el TIFA, antesala del Tratado de Libre Comercio, nos convierten sin atenuantes en una colonia de los Estados Unidos.
37 años más tarde nuestra sociedad está dominada por el gran capital, las multinacionales proliferan en todas las áreas de la economía, principalmente las que derivan de la condición de país agropecuario (latifundios de soja y madereros, arroceras, cítricos, frigoríficos, curtiembres, pesca, etc.). Nuestro país está dominado por el gran capital, el propio Tabaré en sus viajes lo promociona y la política económica continuista neoliberal del gobierno, está basada en el ingreso de las inversiones de las multinacionales con libre entrada y salida de capitales y remesas de ganancias.
Sobre el final de la declaración constitutiva se establece: "Concebimos este esfuerzo nacional como parte de la lucha por la liberación y desarrollo de los pueblos del Tercer Mundo en general, del cual somos solidarios, y en particular, de la que tiene por escenario a nuestra América Latina, como hace más de un siglo y medio, la insurgencia de los pueblos, habrá de desembocar en la conquista de la segunda y definitiva emancipación."
37 años más tarde el gobierno progresista se ha alineado con el imperialismo, comparte la tesis de la lucha contra el terrorismo (calificación imperial a todas las luchas de liberación nacional y social), Tabaré Vázquez no ha ido a las asunciones de Ortega, Morales, Chávez y Correa, todos regímenes que están enfrentando al imperialismo y bajo las órdenes imperiales ha visitado a Uribe en Colombia, y califica a las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia) de terroristas, invitó a nuestra patria al genocida Bush, envías tropas a los enclaves de intervención imperial como Haití y el Congo, autoriza a las fuerzas armadas a participar en las operaciones "Unitas" con los marines yanquis, permite bases de entrenamiento de tropas sudamericanas con oficiales yanquis en el barrio montevideano de Santa Catalina, etc.
El FA ha declarado el rechazo a todo tipo de violencia, incluyendo tanto la injusta como la violencia justa, la revolucionaria como la contrarrevolucionaria, no ha condenado a Estados Unidos por sus intervenciones genocidas en Irak, y Afganistán y no ha condenado al sionismo israelí por el genocidio en Palestina. Desarrolla un conflicto de proporciones con el gobierno argentino en defensa de la inversión extranjera contaminante de una planta de celulosa y ha sido lamentable su comportamiento en la OEA(Organización de Estados Americanos)ante la infame agresión del gobierno colombiano contra el estado y pueblo ecuatoriano.
En las Bases Programáticas, en el capítulo III) Reformas de la estructura económica y social se afirma: "…la política de nacionalizaciones podrá tomar la forma de empresas estatales u otros… defensa, consolidación y desarrollo del patrimonio comercial e industrial del estado… Reforma agraria que erradicará el latifundio y el minifundio… nacionalización de la industria frigorífica…recuperación de AFE y creación de una marina mercante nacional … nacionalización de la banca y de los rubros esenciales del comercio exterior… reforma radical del régimen tributario, de modo que grave la riqueza, el capital improductivo y reduzca progresivamente los impuestos al consumo."
37 años más tarde la economía está totalmente extranjerizada, las empresas estatales de transporte como AFE (Administración de Ferrocarriles del Estado) y PLUNA (Primeras Líneas Uruguayas de Navegación Aérea) han sido privatizadas, en la Carta de Intención con el FMI se fijan las privatizaciones de los entes autónomos o sea las empresas del estado, se conceden nuevas zonas francas, verdaderos paraísos fiscales y de entrega de la soberanía; la tierra equivalente a cuatro departamentos, una cuarta parte de la superficie aprovechable ha sido extranjerizada para latifundios de plantaciones de soja y forestación – materia prima de cinco posibles plantas de celulosa -, no queda un solo banco privado de capital nacional y los bancos estatales van camino de una menor participación en el negocio financiero. Ha sido desmantelado el Banco Hipotecario del Uruguay, marginándolo de su rol social de la vivienda. Los rubros esenciales del comercio exterior están en manos de empresas extranjeras (carne, lana, arroz, cuero, textiles, etc.). La reforma impositiva del IRPF (Impuesto a la renta de las personas físicas) grava a los trabajadores y jubilados que aportan el 80%, un 11% las capas medias y un 9% aportan los capitalistas. Por un reciente fallo de la Suprema Corte de Justicia ha sido declarado inconstitucional este impuesto a los jubilados.

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