jueves, abril 23, 2009

El idioma de Cervantes


El 23 de abril del año 1616, en distintos horarios y lugares del planeta murieron, así por antojos del destino, tres íconos de la literatura universal: el inglés William Shakespeare, el inca Garcilaso de la Vega y el español Miguel de Cervantes Saavedra.
Fueron primero los países hispanohablantes los que eligieron el 23 de abril para celebrar cada año el Día del Idioma Español, en homenaje a ese genio universal de las letras que fue Cervantes.
Como ofrenda póstuma a esos grandes hombres, en 1995, la Conferencia General de la UNESCO acordó también adoptar esa fecha para celebrar el Día Mundial del Libro y de los Derechos de Autor, teniendo como objetivo, además de rendir homenaje a estas tres grandes figuras y a todos los autores, incentivar, sobre todo en niños y jóvenes, el hábito por la lectura.
Hoy, a 393 años de la muerte de quien infundó belleza y universalidad a nuestro idioma, cuando hablamos español, no importa en que región del planeta y con todos los regionalismos agregados, estamos reafirmando nuestra identidad.
La rica lengua española ha sido el instrumento de expresión de los cubanos de todas las épocas.
En ella se expresaron nuestros patriotas. En los versos de Heredia se expresaron por primera vez las
ansias de libertad del pueblo cubano.
En nuestros días, todos los que hablan castellano, que ya sobrepasan los 500 millones de habitantes, el cuarto idioma más hablado del globo terráqueo, después del chino mandarín, el hindi y el ingles, disponen de los mismos modelos literarios, disfrutan de los mismos grandes poetas y escritores.
Cervantes con esa gran obra, El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha, engrandeció sobremanera la perspectiva de nuestra lengua, pero otros clásicos continuaron enriqueciendo los códigos de comunicación literaria y lingüística. Recordemos algunos como Quevedo, Antonio
Machado, José de Espronceda, Miguel de Unamuno y los nacidos del lado de acá del Atlántico, premios Nóbel de Literatura Gabriela Mistral, Pablo Neruda, Gabriel García Márquez, Octavio Paz, entre otros. En Cuba, junto al Apóstol José Martí, disponemos de excelentes creadores que enriquecen las letras, entre ellos los Premios Cervantes Dulce María Loynaz y Alejo Carpentier.
El idioma constituye uno de los elementos fundamentales de la personalidad de un pueblo, cimiento, como antes dije, de la identidad y nacionalidad de una nación. Piensan algunos que estas cuestiones están reducidas a los centros de enseñanza, de alumno a profesor, pero no debe preocupar exclusivamente a ellos, sino a todo el que lo emplee como vehiculo de comunicación.
Cada año, cuando está por llegar el día 23 de abril, infinidades de sitios en Internet realizan encuestas en torno a la pregunta: ¿Cuál es la palabra más bella del idioma español? Sólo se precisa un requisito
indispensable: en las respuestas no se aceptan nombres propios ni vocablos que no estén reconocidos en el Diccionario de la Real Academia de la Lengua española.
El pasado año estadísticas arrojaron que más de 40 000 personas alrededor de 60 países de los 5 continentes reflejaron aproximadamente 7 000 vocablos y la palabra que más impactos causó fue amor, seguida de libertad, paz, vida, esperanza, madre, mamá, amistad, azahar, amanecer, alegría, felicidad, sonrisa, luz, mar, solidaridad, pasión y abrazo.
Según los organizadores de tan singular concurso, todo parece indicar que los participantes reflejaron las palabras españolas cuya fonética las hacen más agradables al oído, pero que sobre todo llevan implícito conceptos fundamentales en las expectativas de los seres humanos.

Violeta Ramos Valdés

No hay comentarios.: