miércoles, marzo 20, 2019

El discurso republicano de Macri, tan podrido como los servicios

Mauricio Macri pide que se aparte al juez que lleva la causa por espionaje ilegal. La Corte Suprema respaldó el pedido de Ramos Padilla.

Mauricio Macri pidió que destituyan al juez federal de Dolores, Alejo Ramos Padilla, que investiga una red de espionaje que involucra al fiscal Carlos Stornelli y salpica a figuras de Cambiemos como Elisa Carrió y Gustavo Arribas.
El pedido fue presentado este lunes por el ministerio de Justicia por medio de Juan Bautista Mahiques, el representante del Ejecutivo en el Consejo de la Magistratura, el organismo que remueve jueces.
El periodista Carlos Pagni hizo una interpretación precisa del reclamo presidencial “El oficialismo no quiere que se investigue lo que está investigando Ramos Padilla”.
La resolución “bonapartista” de Macri demuestra que el editorialista de La Nación está en lo cierto. Si se continúa con la investigación, que tiene como principal imputado al falso abogado, es probable que salga a la luz la podredumbre que hay en los sótanos del Estado. Entre ellos saldría que Cambiemos espía hasta los propios integrantes de Cambiemos. Entre las espiadas estaría la gobernadora María Eugenia Vidal.
Por estas horas Elisa Carrió denunció penalmente a Marcelo D’Alessio. Además, la líder de la Coalición Cívica solo reconoció que tuvo una sola reunión con el falso abogado "en el bloque" y dijo que le parecía una persona "delirante". "Tengo 25 años de operaciones encima", sostuvo Carrió. La presentación recayó en el juzgado de María Romilda Servini de Cubría y el fiscal que deberá evaluar la denuncia es Guillermo Marijuan.
En el bloque de Cambiemos, así como el fiscal Carlos Stornelli, todos sostienen que no conocen a Marcelo D’Alessio. Sin embargo, hay fotos, mensajes de WhatsApp, y varias reuniones en el Ministerio de Seguridad que lo desmiente.
Una de estas reuniones es la que describe la diputada Myriam Bregman en una de sus columnas publicadas a este diario. “Ha trascendido que Marcelo D’Alessio estuvo en el Ministerio de Seguridad de la Nación durante el G20”. A pesar de estás pruebas, Patricia Bullrich fue una de las primeras de negar tener algún vínculo con el espía y tildarlo también de “delirante”.

Un nuevo fallo de la Corte Suprema contra el gobierno

Los cinco cortesanos fallaron a favor de los reclamos del juez federal de Dolores, Alejo Ramos Padilla. En la acordada de este martes, Ricardo Lorenzetti, Elena Highton de Nolasco, Carlos Rosenkrantz, Juan Carlos Maqueda y Horacio Rosatti coincidieron en aprobar el pedido del magistrado, un día después de que el Gobierno nacional presentara su pedido de remoción contra Ramos Padilla en el Consejo de la Magistratura.
El fallo de la Corte dispone entregar al juez de Dolores un auto y fondos para contratar a dos personas que ayuden a la instrucción en la causa que investiga por presunto espionaje ilegal de una "organización paraestatal de inteligencia" de la que participaría D’Alessio.

La podredumbre del Estado

La crisis que abre el caso D’Alessio demuestra la podredumbre del Estado. Los aparatos de los “servicios” son los “sótanos de la democracia”, son parte de sus pilares estructurales. Este nuevo episodio de espionajes ilegales vuelve a mostrar que detrás de los debates, los consensos y los relatos de los políticos burgueses están los “carpetazos” para chantajearse entre ellos. Dejo expuesto también que el discurso republicano de Macri y Cambiemos esta tan podrido como los servicios.
Estos servicios de inteligencia son además, parte del poder policial del Estado que sirve para armar causas contra quienes, de una manera u otra cuestionan el orden social y político. Por caso Américo Balbuena infiltrado en la Agencia Walsh o el famoso “Proyecto X”, que denunció la abogada de derechos humanos Myriam Bregman.
El Poder Judicial se nutre de los espionajes para armar causas. Una medida elemental contra esta casta es la elección popular de jueces y fiscales y los juicios por jurados.

La Izquierda Diario

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