Blog marxista destinado a la lucha por una nueva sociedad fraterna y solidaria, sin ningún tipo de opresión social o nacional. Integrante del Colectivo Avanzar por la Unidad del Pueblo de Argentina.
sábado, diciembre 23, 2017
20 años de la masacre de Acteal
Hablar de la historia del PRI es hablar de la historia de sus masacres. La más contemporánea, Ayotzinapa, la más brutal, la masacre de Tlatelolco del 2 de octubre de 1968.
La historia contemporánea del país será contada, también, desde un punto de vista crítico, por las masacres del estado mexicano contra los trabajadores, el pueblo pobre, y los pueblos indigenas.
Hace 20 años en Acteal, en Chenalhó Chiapas, un grupo paramilitar masacró a un campamento indígena de tzoltziles. Estos grupos paramilitares siguen actuando como lo muestra el desplazamiento de indígenas en Chenalhó este mes de noviembre.
La impunidad ha marcado del caso de la masacre, el crimen sigue impune porque los autores materiales fueron liberados paulatinamente desde 2009, bajo el argumento de que hubo fallas en el proceso judicial en su contra; en tanto que la autoría intelectual en la que habrían estado involucradas autoridades estatales y federales, nunca se sancionó. Esta impunidad garantiza los cercos militares y paramilitares a los pueblos de simpatizantes del EZLN y del CNI.
45 personas fueron asesinadas hace 20 años. 4 personas no nacidas fueron diezmadas. Hoy se ponen, por eso 49 veladoras. La organización civil de las Abejas, organizó una marcha desde la mina de arena de Majomut hasta la hondonada donde hace 20 años se encontraban refugiados las decenas de pueblos indios.
La masacre de Acteal es la muestra de la política represora del estado mexicano que implementa el desplazamiento interno para aniquilar a nuestros pueblos.
Recordar, rememorar y exigir justicia es tarea de todos los años para los miembros de las abejas., una Asociación Civil que se ha mostrado siempre solidaria. En 2011 recibió a la Caravana del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad, el primer movimiento nacional en rechazo a la militarización del país y puso sus energías para el desarrollo de este.
Ni perdón ni olvido, castigo a los asesinos.
Sergio Abraham Méndez Moissen
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